Ignacio Ramonet, periodista español y director de redacción de Le Monde Diplomatique, advirtió que las redes sociales son los medios de comunicación que mayor influencia han tenido en el comportamiento de las personas en la historia reciente de Latinoamérica. Esta afirmación la expresó este miércoles en el conversatorio “Retos de la Comunicación ante las nuevas realidades de América Latina”, conducido por el ministro del Poder Popular para la Cultura, Ernesto Villegas, y viceministro para el Fomento de la Economía Cultural y presidente del Centro Nacional del Libro (Cenal), Raúl Cazal, en la 16º Feria Internacional del Libro de Venezuela (Filven).
Texto: Prensa Cenal
En conversación con ambos, el español precisó que hoy día las redes sociales son las que están influenciando comportamientos. La manipulación es más fácil por esta vía que en la televisión y, en particular, manipular información sobre Venezuela, que “mucha gente en el mundo la cree”, indicó en la actividad, transmitida por el canal YouTube de la feria.
Detalló que desde las redes sociales, los medios de comunicación y los usuarios particulares dicen a las gentes lo que desean escuchar y, especialmente, plataformas como Twitter son de especial atención, ya que cuando quieren silenciar a alguien, lo hacen sin dar explicación y eso incide en los comportamientos y en las opiniones tendenciosas.
Esta nueva movida comunicacional del reciente milenio le ha quitado el poder a la televisión, que a finales del siglo XX se caracterizaba por ser un medio de masas, condición que ha quedado relegada y casi en el olvido, explicó.
Como ejemplo de la migración de las personas a medios digitales y redes sociales, Ramonet contrastó las cifras de audiencia de los cuatro primeros medios televisivos de Estados Unidos con los seguidores de Donald Trump en Twitter.
“Estados Unidos es un país de 350 millones de habitantes y todos los canales juntos no reúnen ni el 10% de la población en audiencia, son casi 30 millones los que ven televisión. En cambio, Trump tiene 88 millones de seguidores en Twitter, tiene más seguidores que electores. La televisión no es un medio de comunicación de masas”, enfatizó.
En el caso de los medios impresos, incluyendo los libros, para Ramonet existe un sentimiento generacional que se impone para aquellos que desean seguir sintiendo el papel y el olor de un ejemplar impreso en sus manos, pero considera concebible que las nuevas generaciones hagan su lectura a través de pantallas como teléfonos o tablets.
Constató que actualmente se produce menos papel y tinta, al tiempo que las rotativas que fabrican el periódico han desaparecido, pero el periodismo no, porque sigue haciéndose en digital y todo se encamina hacia la adaptaciones de condiciones.
Al respecto, aplaudió la iniciativa del presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro, quien ha llamado a las
personas a buscar nuevas herramientas comunicacionales que permitan ampliar las capacidades comunicacionales sin depender de una sola red social, como Twitter. Es una apuesta que considera varguardista, porque no se trata de dejar una red social sino de tener presencia en más plataformas de este tipo.
Cambios políticos de la región
Al reflexionar sobre los procesos políticos del último año en los países del continente, Ramonet consideró que son varios los
acontecimientos que están marcando el destino de países como Perú, EE.UU., Chile, Brasil, Bolivia, Venezuela y Cuba.
Contó que para él siempre ha sido claro el bloqueo al que Norteamérica ha sometido a Cuba, pero el hecho de que no pudo hacer un contacto por Zoom con el presidente venezolano el día que se inició la Filven, como sí lo lograron intelectuales desde otros países, le hizo sentir en carne propia el bloqueo a ese país, pues se encontraba en la isla cuando eso sucedió. “Creí que podía usar la aplicación Zoom como en cualquier otro país y no pude. Entonces comprendí que el bloqueo no es solo financiero, sino también en redes sociales”, dijo.
Ante ese hecho que le marcó, expresó que asume el lema de la Filven como suyo: Leer Desbloquea. “Mi presencia es voluntad de desbloquear a Cuba y Venezuela”.
Sobre su mirada de Venezuela en el mundo, expresó que esta nación lidera un proceso de transformación que le dice al resto de la humanidad que la revolución bolivariana no se pone de rodillas, aunque se manipule información en contra y exista un bloqueo económico.
En el caso de Bolivia, destacó el gran triunfo de Luis Arce, del Movimiento al Socialismo (MAS), en los últimos comicios presidenciales, a un año del golpe de Estado ocurrido en esa nación. “Estamos ante una reacción popular de rechazo a lo que ocurrió allí contra Evo Morales”. En medio de la ruptura del orden democrático en territorio boliviano, Luis Almagro, secretario general de la Organización de Estados Americano, OEA, gritó fraude y llamó a un golpe de Estado. Pero, destacó Ramonet, hoy guarda silencio por la falta de resultados en las últimas elecciones de EE.UU.
Advirtió que aunque los medios de comunicación han anunciado a Joe Biden como presidente electo, Donald Trump seguirá siendo con sus más de 70 millones de electores el principal oponente de la política en ese país.
Con respecto a las relaciones del nuevo presidente estadounidense sobre Venezuela, Ramonet prevé que se abra aún más un debate sobre las políticas de Biden ante el país suramericano. En cambio, con Cuba, detalló que sí se han anunciado medidas en las que Biden, probablemente, retomará políticas aplicadas en la administración de Barack Obama, entre ellas, el restablecimiento de remesas y viajes a familiares hacia Cuba.
También, analizó la caída de Martín Vizcarra, de Perú, como un hecho donde aún no se le comprueban los actos de corrupción, no ha pasado por un juicio, pero aún así se le ha juzgado por falta de ética como parte de un principio constitucional. Y, en el caso de Chile, las movilizaciones populares que se han dado dejan al presidente Sebastián Piñera entre los mandatarios más impopulares de la región. “Me pregunto, ¿dónde está el Grupo de Lima?”, acotó.