A través de un comunicado, la Red en Defensa de la Humanidad expresó su “categórico repudio” a la invocación, por parte de un grupo de países, del Tratado Interamericano de Asistencia Recíproca (TIAR) contra Venezuela desde el Consejo Permanente de la OEA, considerándolo “un obsoleto y nefasto instrumento que históricamente ha buscado legitimar intervenciones militares por parte de Estados Unidos”.
Texto: REDH y Alba Ciudad
El pasado 11 de septiembre, el Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos (OEA), organismo del que Venezuela ya no forma parte, aprobó la activación del TIAR, que contempla “el empleo de la fuerza armada” para una eventual intervención en Venezuela.
La propuesta fue introducida por el supuesto representante venezolano (Gustavo Tarre Briceño designado por el diputado en desacato, Juan Guaidó, y que no es reconocido por el gobierno legítimo venezolano del Presidente Nicolás Maduro) y fue aprobada con 12 votos a favor, 5 abstenciones y 2 ausencias. Los 12 países que apoyaron el TIAR —del total de 19 firmantes— fueron: Argentina, Brasil, Chile, Colombia, El Salvador, Estados Unidos, Guatemala, Haití, Honduras, Paraguay, República Dominicana y Venezuela. Cinco países se abstuvieron: Costa Rica, Panamá, Perú, Trinidad y Tobago y Uruguay; Bahamas y Cuba estuvieron ausentes.
A continuación, el comunicado de la Red en Defensa de la Humanidad.
Red en Defensa de la Humanidad: Repudio a la invocación del TIAR
La Red en Defensa de la Humanidad expresa su categórico repudio a la invocación del Tratado Interamericano de Asistencia Recíproca (TIAR) contra el pueblo de Venezuela y denuncia con preocupación que un grupo de países, alineados a los intereses de Estados Unidos hayan decidido en una sesión del Consejo Permanente de la OEA, activar este obsoleto y nefasto instrumento que históricamente ha buscado legitimar intervenciones militares por parte de Estados Unidos contra los pueblos de América Latina y el Caribe.
La República Bolivariana de Venezuela conjuntamente con otros países de la Región -antes lo habían hecho Cuba y México- se desvincularon el 14 de mayo de 2013 de este infame instrumento de colonización en el que subyacen la agresión y la guerra. Por el contrario, el 29 de enero de 2014 en el marco de la II Cumbre de la CELAC celebrada en La Habana, las y los jefes de Estado y de gobierno, conscientes de que la guerra en uno de los países de la Región pone en peligro la paz del Continente y frena el avance de la unión de nuestra América, proclamaron a América Latina y el Caribe zona de paz.
La Red en Defensa de la Humanidad exige el respeto al derecho internacional sustentado en los principios de la soberanía y la libre determinación de los pueblos. Igualmente reitera el llamado al diálogo como instrumento para tramitar las diferencias y controversias entre los Estados y garantizar la convivencia y amistad de los pueblos.
En esta hora en la que el imperialismo acude nuevamente al expediente de la guerra, la Red en Defensa de la Humanidad hace un llamado a los pueblos del mundo a levantar su voz por los ideales de la paz y convoca a las y los intelectuales, artistas y movimientos sociales a participar en la jornada mundial de solidaridad con el pueblo venezolano, a realizarse el venidero sábado 21 de septiembre, Día Internacional de la Paz.
Red en Defensa de la Humanidad, 13 de septiembre de 2019
Qué es el TIAR
El TIAR (Tratado Interamericano de Asistencia Recíproca) fue firmado por un grupo de países del continente americano el 2 de septiembre de 1947, tras la Segunda Guerra Mundial, durante el inicio de la “Guerra Fría”. Se creó para responder a las supuestas amenazas de la Unión Soviética y de la República Popular China contra Estados Unidos y sus aliados del momento, y dicta que los países firmantes “convienen en que un ataque armado por parte de cualquier Estado contra un Estado Americano, será considerado como un ataque contra todos los Estados Americanos, y en consecuencia, cada una de dichas Partes Contratantes se compromete a ayudar a hacer frente al ataque”.
Es, en otras palabras, un equivalente a la OTAN en el que cualquier ataque a algún país del continente americano por parte de la Unión Soviética o China, sería considerado por Estados Unidos y sus aliados como un ataque a ellos mismos y una excusa para responder militarmente.
El TIAR se está invocando en 2019 con el argumento de que en Venezuela supuestamente hay un “gobierno ilegítimo” y que éste cuenta con el apoyo militar de Rusia, lo que es visto por Estados Unidos y sus aliados como una “agresión” y un “ataque” al que habría que responder.
Por esa razón, el TIAR es visto como una forma de legalizar una ocupación militar contra Venezuela, encabezada por los Estados Unidos.
Venezuela se retiró hace seis años del TIAR, por considerarlo “letra muerta desde que en la década de los ochenta Estados Unidos lo contradijera en la práctica”, ello en referencia a la Guerra de las Malvinas, en la que dicho país se alió con Inglaterra en contra de Argentina. Sin embargo, el diputado Juan Guaidó, quien se autoproclamó en enero como supuesto “presidente interino” de Venezuela con el apoyo de Estados Unidos, solicitó a la Asamblea Nacional la reincorporación del país al TIAR el pasado mes de julio, con el fin de lograr legitimar una eventual intervención militar.