El ministro venezolano para la Cultura, Ernesto Villegas, denunció este lunes que el concierto denominado “Venezuela Aid Live” organizado por el empresario Richard Branson, dueño de Virgin Group, que se realizará el próximo 22 de febrero en la ciudad de Cúcuta, es “un mecanismo de legitimación cultural de la guerra muy peligroso y nefasto. Están convocando a un concierto del lado colombiano de la frontera, donde están haciendo uso de celebridades de la industria cultural y de la farándula, para bendecir la la agresión militar a Venezuela. ¡Eso nunca se había visto!”
Texto: Alba Ciudad (Luigino Bracci Roa)
El concierto “Venezuela Aid Live: Que las estrellas brillen para todos” fue anunciado el pasado 15 de febrero por Richard Branson, empresario británico y fundador del conglomerado de empresas Virgin Group, y se realizará el próximo 22 de febrero en el puente Las Tienditas, que une el estado Táchira en Venezuela con Norte de Santander en Colombia, con el supuesto propósito de recaudar 100 millones de dólares para “paliar la crisis humanitaria”.
A dicho concierto han confirmado presencia diferentes artistas del mundo del espectáculo y la farándula, como Miguel Bosé, Luis Fonsi, Maluma, Carlos Vives, Carlos Baute, Maná, Diego Torres, Chyno, Nacho, Peter Gabriel, Fonseca, Juanes, Dj Alesso, Ricardo Montaner, Rudy Mancuso, Mau y Ricky, Danny Ocean, Alejandro Sanz y Anita, varios de ellos tradicionalmente ligados a la oposición venezolana.
Señaló Villegas, entrevistado en el programa Al Aire de VTV, que si bien artistas acudieron a cantarle a las tropas estadounidenses que invadieron Vietnam, Irak y Afganistán, es la primera vez que hace un concierto “para legitimar y bendecir lo que a todas luces es una agresión militar contra un país soberano. ¡Esto es nuevo!”. Lo comparó con aquellos sacerdotes que, “manchando la historia de la Iglesia Católica, bendecían las bombas nucleares y los misiles que luego iban a caer en los países agredidos por las potencias”.
Deploró “que esto sea una especie de cobertura, de barniz para pintar como bonito lo que no es sino una agresión terrible, que puede costar muchas vidas, en caso de concretarse, entre venezolanos y latinoamericanos”. Recordó que “lo que pase aquí en Venezuela va a tener repercusiones en el resto del continente. Aquí, en Venezuela, se está jugando la paz del continente”.
“Le va a quedar la tacha de infamia a aquellos que participen en este tipo de mecanismos de bendición cultural de una agresión militar de la guerra”, señaló.
Exhortó el ministro Villegas a cantarle a la paz, a la vida y no a la agresión y a la muerte. “Cada quien con su conciencia. Lo que hagamos hoy pesará sobre nuestra Historia en el futuro”. Dijo estar seguro de que la mayoría de nuestros artistas, cultores y creadores de Venezuela y el mundo “lo que queremos es la paz. No queremos que se utilice el afecto, el reconocimiento que nuestros pueblos nos han prodigado para auspiciar la agresión, la intervención y la guerra contra nuestro país“.
El concierto también fue anunciado y apoyado por Iván Duque, presidente de Colombia, y Juan Guaidó, diputado quien se autoproclamó como supuesto “presidente interino” venezolano, en una conversación pública que sostuvieron el pasado 15 de febrero a través de Instagram Live.
Al evento se le ha colocado el nombre “Venezuela Aid Live”, que recuerda e imita los célebres conciertos “Africa Live Aid” realizados en Estados Unidos e Inglaterra en 1985, para recaudar fondos para la catástrofe humanitaria que vivían en aquel momento Somalia y Etiopía, países afectados por fuertes hambrunas, probablemente con la intención de establecer un paralelo entre ambas situaciones.
Se realizará previo al supuesto ingreso de “ayuda humanitaria” por la fuerza
Dicho evento se realizará un día antes de la fecha anunciada por Guaidó, para el ingreso a Venezuela de lo que ellos denominan “ayuda humanitaria”, lo que no ha sido autorizado por el gobierno del Presidente venezolano, Nicolás Maduro ni cuenta con la aprobación de organizaciones de ayuda internacional, como la Cruz Roja.
Guaidó ha señalado en varias ocasiones que espera que militares venezolanos desobedezcan a sus mandos naturales, se rebelen contra el presidente Maduro y autoricen el ingreso de la “ayuda”, lo cual hasta ahora no ha sucedido. La ayuda, que consiste en alimentos deshidratados provistos por una agencia estadounidense, la USAID, ingresarían a Venezuela acompañados de tropas militares, según han explicado periodistas de oposición, lo que efectivamente se convertiría en una intervención militar contra el país, que cuenta con las mayores reservas de petróleo del mundo.
Por su parte, el Presidente Maduro ha señalado que la ayuda humanitaria es “un show” y “un robo”, pues al tiempo que Estados Unidos y la Unión Europea imponen sanciones unilaterales que bloquean cuentas bancarias con al menos 10 mil millones de dólares pertenecientes al Estado venezolano, se entregará una ayuda humanitaria de apenas 20 millones dólares.
“La ayuda humanitaria la han convertido en un show para justificar una intervención en el país. Es un show barato para humillar a los venezolanos. Nos bloquean casi 10 mil millones de dólares en el mundo, nos roban el oro, nos bloquean dinero del petróleo en el mundo, y después vienen a sacar 20 millones de dólares para decirle a los ‘mendigos’: ‘saquen la mano, ahí les va eso’. Una migaja”, denunció el Presidente venezolano el pasado 8 de febrero.
Maduro resaltó que su gobierno entrega todos los meses cajas con alimentos a seis millones de familias como forma de apoyarlos por la crisis económica que vive el país. “Tenemos la capacidad de trabajo, de producción para atender a 6 millones de hogares mensuales, permanentes, como no se atienden en ningún lugar del mundo. Tenemos capacidad para darle educación a nuestros niños y niñas, para darle salud a nuestro pueblo, para darle vivienda, empleo y seguridad social a los venezolanos”.
Por ello, exigió que “¡cese el bloqueo! ¡Cese la persecución financiera! ¡Cesen las sanciones y dejen a Venezuela, tranquila, quieta!”, e indicó que la ayuda humanitaria “no es ningún obsequio. ¡No nos están regalando nada! ¡Nos están robando! ¡Es un robo a nuestras riquezas!”.