El presidente venezolano, Nicolás Maduro, respondió esta tarde a los cuestionamientos hechos por algunas personas a través de redes sociales, señalando que debía liberar a Leopoldo López tras el indulto otorgado por el gobierno estadounidense a Oscar López Rivera, como supuestamente lo había prometido hace dos años. Indicó que ambos personajes son absolutamente incomparables, y dejó en claro que, dada la cantidad de personas afectadas por las protestas violentas lideradas por Leopoldo López en 2014, él debía cumplir con “reparación de las víctimas, pedirles perdón y hacer un compromiso jurado y escrito de no repetición”, antes de considerarse cualquier posibilidad de indulto.
Texto: Luigino Bracci, Alba Ciudad
La periodista Noris Argotte Soto, de la agencia estadounidense Bloomberg, le preguntó al Presidente Maduro sobre sus palabras el 4 de enero de 2015, emitidas luego de que el gobierno estadounidense le exigiera a Maduro liberar a Leopoldo López.
En aquel momento, el Presidente Maduro respondió al gobierno estadounidense recordando que dicho país tenía uno de los presos políticos con más tiempo en prisión en todo el mundo: el puertorriqueño Oscar López Rivera, arrestado en 1981 y sentenciado a 55 años de prisión por acciones en el marco de su lucha por la independencia de Puerto Rico. “La única forma que yo usara las facultades presidenciales que tengo (para indultar a López) es para montarlo en un avión que vaya a Estados Unidos, lo deje allá y me entreguen a Óscar López Rivera, pelo a pelo, hombre a hombre”, dijo en enero de 2015.
Es de notar que, en ese momento, el Departamento de Estado norteamericano respondió indicando que no aceptaban la oferta. “En nuestra opinión, no hay comparación entre estos dos casos. Estoy segura de que esto no es ninguna sorpresa para ninguno de ustedes”, dijo Jen Psaki, portavoz del Departamento de Estado, durante una conferencia de prensa el 5 de enero de 2015.
El pasado martes 17 de enero de 2017, el gobierno norteamericano anunció la liberación, indulto o conmutación de penas de 273 ciudadanos, entre ellos López Rivera, considerado el preso político con más tiempo en prisión en el mundo.
“Son incomparables”
Este miércoles 18 de enero, en su respuesta a la periodista Soto, Maduro señaló que ambos personajes son incomparables: “Oscar López Rivera nunca mató a nadie. Nunca quemó nada, ni destruyó a nadie. El único delito que cometió fue pedir la independencia de Puerto Rico en el siglo 20 y en el 21. Y Oscar López Rivera tiene 35 años preso por luchar por la independencia de nuestra amada Puerto Rico”, señaló, “porque todavía está bajo las cadenas y el yugo colonialista”. Recordó que Puerto Rico “quedó pendiente en la agenda del Libertador Simón Bolívar” junto con Cuba.
“El caso de este señor, Leopoldo López, más allá del comentario jocoso que hice en su momento, está en manos de la justicia venezolana. Y la justicia venezolana y la Comisión de la Verdad procesará ese y todos los demás casos”, indicó Maduro.
Leopoldo López fue sentenciado a 13 años y 9 meses de prisión por su responsabilidad liderando las protestas violentas o “guarimbas” de 2014, que se extendieron por más de tres meses, causaron la muerte de 43 personas y dejaron más de 900 heridas.
Perdón, compromiso de no repetición y de reparación
“Espero que haya justicia. Pero, ¿tú sabes qué espero yo? Que ellos le pidan perdón a las víctimas. Que reconozcan sus pecados, sus faltas y crímenes. Que hagan un compromiso de no repetición y de reparación”, exclamó Maduro este miércoles.
Señaló que 900 personas fueron heridas durante las guarimbas de 2014, lideradas por López y su partido Voluntad Popular. Muchas de ellas quedaron con discapacidades producto de los hechos violentos de esos días.
Relató el caso de un teniente de 20 años, recién graduado, “a quien un francotirador de este grupo de las guarimbas le echó a perderla vida. Le metieron un balazo. Él, con terapias, ha vuelto a caminar, pero todavía no puede hablar después de cuatro años. Lo tienen que ayudar en muchas cosas de la vida diaria. Ese muchacho, que se graduó con tanta esperanza, ahí está postrado. Y el Sr. (Leopoldo) López todavía no le pide perdón”.
“El señor López y sus secuaces todavía no hacen nada para que se repare con justicia a esa víctima. Y todavía no se han comprometido a no repetir la violencia. Y todavía están comprometidos en violencia en el país”, dijo recordando la reciente captura de Gilber Caro, diputado suplente de Voluntad Popular, quien tenía en su poder armas, explosivo C4 y donde admite que tenía como misión la de lograr la muerte de personas en marchas y movilizaciones, para crear consternación y conmoción pública.
“¿Qué ha hecho la oposición? Defender a ese delincuente”, dijo Maduro respecto a Gilber Caro.
“Todavía el señor (Leopoldo) López no ha tenido la altura, y no sé si la tenga, de pedirle perdón al país por lo que hizo. De pedirle perdón a las víctimas que están allí: las viudas y los viudos. Los niños, niñas y jóvenes que quedaron huérfanos, producto de los 43 muertos por las guarimbas”.
Chávez ya lo había perdonado en dos ocasiones
Recordó que Leopoldo López fue perdonado por el comandante Chávez en dos ocasiones ―la última en 2007― por todos los crímenes ocurridos en el golpe de Estado de 2002 y el paro petrolero-empresarial de ese año. “Él es el primero en estar en todos los golpes de Estado”, expresó el Presidente venezolano.
Señaló que espera muy pronto poder conocer, abrazar y dar un reconocimiento a Oscar López Rivera, mientras que de Leopoldo López dijo que es “un agente de la CIA, preparado desde hace muchos años para ser el Presidente de la República en Venezuela, por la vía del terrorismo y de la imposición de un modelo de ultraderecha”.
El presidente Maduro pide “justicia, reparación de las víctimas, perdón y compromiso jurado y escrito de no repetición”, guiándose por las recomendaciones de Ramón Rodríguez Chacín, quien fue asesor de los procesos de paz en Colombia. “Si el método se aplica en la Comisión de la Verdad, vamos a salir ganando todos”. Planteó que esto se lleve a las mesas de diálogo entre el gobierno y la oposición.