Venezuela, en medio de las embestidas de la derecha nacional e internacional, ha reafirmado su carácter irrevocablemente libre e independiente, como lo consagra la Carta Magna vigente, aprobada por el Poder Popular en 1999, indicó el presidente Nicolás Maduro.
Texto: AVN
A pesar del afán intervencionista “la paz triunfó gracias a ustedes, hombres y mujeres de Venezuela, por ustedes triunfó la paz, y ahora en junio vienen con desespero (sectores conservadores) creyendo que Venezuela va a rendirse, va a tracionar, va a dar su brazo a torcer”, indicó el mandatario desde el Palacio de Miraflores, en Caracas, donde repudió la actuación del secretario general de la Organización del Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, quien pidió activar la Carta Democrática Interamericana contra el país sin contar con la atribución para ello.
El jefe de Estado dijo que Almagro “ha pretendido convertirse en un poder supracional, por encima de la carta de la OEA y de la constitución, que es la única carta que reconocemos”.
Sostuvo que esta acción refleja cómo la derecha venezolana ha violado la constitución al promover el intervencionismo contra el país. Para ello, factores internacional le asignaron “la tarea de incendiar el país en abril y mayo”, pero en esos 60 días el pueblo y el Gobierno nacional ganaron la paz.
“Ellos entran en fase de desesperación porque el plan era incendiar Venezuela”, denunció el mandatario nacional ante una multitud de transportistas presentes en el Palacio de Miraflores, luego de una marcha por Caracas en respaldo a la Revolución Bolivariana y al jefe de Estado.
Ahora —refirió Maduro— cuando este organismo continental amenaza a Venezuela, se dará “la batalla en la OEA y en las calles de América Latina y el Caribe” por la defensa de la soberanía e independencia del país.
“Vamos a dar la batalla por Venezuela, por la paz, por el derecho a la independencia. Es irrenunciable el derecho a la independencia, a la libertad, a la soberanía”, expresó el dignatario.
Maduro, además, anunció que el Ejecutivo Nacional introducirá una demanda contra la directiva de la Asamblea Nacional (AN), por usurpar funciones en materia de relaciones internacionales de Venezuela y por solicitar, en contra de la Constitución de la República, la intervención de la nación, un plan en el que se inscribe la actuación de Almagro.