En la clausura de los actos en conmemoración del centenario de Nelson Mandela, el ministro del Poder Popular para la Cultura, Ernesto Villegas, reivindicó la lucha de este revolucionario surafricano que enfrentó y derrotó al imperialismo, que tuvo a su país sometido bajo el régimen del apartheid en la segunda mitad del siglo XX y hasta 1993, cuando ese régimen de segregación racial fue suprimido como consecuencia de la resistencia de su líder.
Texto: Prensa MPPC
Villegas calificó a Mandela como un ícono y paradigma de la lucha en contra de quienes lo tuvieron encerrado injustamente, durante 27 años, por enarbolar las banderas y reivindicaciones de los derechos de los pueblos a ser reconocidos en condiciones de igualdad ante otros pueblos dentro y fuera de su tierra natal.
El titular de la cartera cultural afirmó que hablar de Mandela es hablar de igualdad de unos seres humanos con los otros, independientemente de su origen étnico, el color de su piel, de su línea política o sus creencias religiosas. “Porque el origen de sus luchas fue la necesidad histórica de incorporar a la inmensa mayoría de los pueblos africanos a las conquistas del mundo contemporáneo. Mandela es hacer verbo y carne la igualdad. Es hacer de la sociedad más inequitativa y desigual del planeta, como lo era la surafricana del apartheid, una sociedad en la que el verbo inclusión fuera conjugado, sin perjuicio, por todos sus integrantes”.
Un Mandela incoloro e insaboro
El ministro criticó a quienes hoy en día pretenden desvirtuar y tergiversar la lucha de Mandela por la libertad y la igualdad. “Se puede ser de derecha y conservador y admirar a Mandela. Está bien, pero no se le puede desprender a Mandela de los componentes fundamentales de su liderazgo. Por ese camino, por el camino del Mandela transgénico, insaboro e incoloro, terminaríamos reescribiendo la historia y pintando un Mandela que por sus propios abrió el calabozo para pasar 27 años de vacaciones privado de su libertad. No, Mandela fue a la cárcel contra su voluntad”, puntualizó.
Villegas reivindicó a Nelson Mandela como un líder revolucionario indiscutible “y será por siempre un ícono de las revoluciones en cualquier parte del mundo donde se levanten en contra de la opresión y la injusticia. Mandela fue insumiso y cimarrón, como lo fueron en Venezuela Andresote y José Leonardo Chirinos” y el resto de los afrodescendientes que se rebelaron contra los españoles.
También en referencia a América Latina y el Caribe, el ministro recordó el ejemplo de Haití como primera república negra del mundo y la primera república independiente de América.
“Porque eso también se olvida, que el primer ejemplo de independencia de América nos vino de la revuelta de los afrodescendientes levantados en armas contra el régimen colonial francés. Por eso, hablar de Mandela es hablar de todas las rebeliones negras de todas las regiones y de todos los días en todos los lugares del planeta de ayer y de hoy. Hablar de Mandela es hablar de las luchas contra el colonialismo en todas sus versiones. También de las luchas en contra del heredero del viejo colonialismo que es el moderno imperialismo. Esa es la razón incontestable por la que hablar de Mandela es también hacerlo de alguien que fue incluido en la lista de amenaza terrorista de los Estados Unidos. Lista de la que fue borrado sorprendentemente en 2008, mucho después de haber sido arquitecto del modelo político que hizo superar el ominoso régimen del apartheid”, reflexionó.
En el evento, que se realizó este 5 de diciembre en el Teatro Nacional, el también periodista y escritor se refirió a los que en Venezuela durante muchos años visitaban cada año, en la IV república, el Panteón Nacional, pero no para recordar al Libertador Simón Bolívar, sino para corroborar que estaba bien muerto, como reza la canción de Alí Primera.
Para conmemorar el centenario de Mandela, la cita también contó con la presencia de representantes de la Embajada de Suráfrica en Venezuela, liderados por el embajador Joseph Nkosi; con Julio Chávez, vicepresidente regional del PSUV, del viceministro para África del Ministerio del Poder Popular para las Relaciones Exteriores, Yuri Pimentel.
También la Compañía Nacional de Danza hizo una representación de la cultura africana heredada por Venezuela a través de un baile de tambor ejecutado por sus bailarines.