La juventud venezolana conmemora este martes 60 años de la huelga general estudiantil realizada el 21 de noviembre de 1957 en contra del régimen dictatorial del expresidente Marcos Pérez Jiménez, día que fue clave para poner fin a la dictadura perejimenista meses después, el 23 de Enero de 1958.
Texto: AVN
Una marcha que partirá desde Plaza Venezuela hasta el Palacio de Miraflores, en Caracas, centrará las actividades programadas por la Revolución Bolivariana para rendir tributo a la fecha histórica y celebrar las reivindicaciones estudiantiles de los últimos años que han permitido consolidar el derecho a la educación pública y gratuita en el país.
Durante su participación en el cuarto congreso de la Federación de Estudiantes de Educación Media, que se llevó a cabo este sábado en el emblemático Liceo Andrés de Bello de Caracas, el ministro para la Educación, Elías Jaua, recordó la importancia de aquel 21 de noviembre en el que el frente universitario se pronunció para evitar que Pérez Jiménez se perpetuara en el poder.
Esa razón llevó a los jóvenes de entonces a irrumpir dentro del Aula Magna de la Universidad Central de Venezuela (UCV), donde se efectuaba un congreso internacional de cardiología, para denunciar, ante países del mundo, las injusticias del régimen perejimenista.
Jaua rememoró que a este levantamiento se sumaron los liceos caraqueños Andrés Bello y Fermín Toro, así como otros en varias regiones del país. De esta manera, la protesta se extendió al pueblo venezolano y dos meses después fue derrocada la dictadura.
“Pero luego le tocó, a ese mismo movimiento estudiantil que derrocó la a dictadura de Marcos Pérez Jiménez, tener que montarse un fusil en el hombro e irse para las montañas, frente a la traición de los ideales del 23 de Enero, frente a la persecución, y allí fueron derrotados, fueron masacrados, fueron desaparecidos centenares de generaciones de estudiantes”, recalcó Jaua, quien también fuera líder estudiantil en su época.
Jaua sostuvo que históricamente el movimiento estudiantil se ha caracterizado por mantener su espíritu de lucha, mismo que ha continuado con el proceso revolucionario que durante los últimos 18 años ha consolidado la participación protagónica de la juventud venezolana.