El presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro, llegó la noche de este jueves a Brasilia, capital de Brasil, para participar en la XLVIII Cumbre de Jefas y Jefes de Estado del Mercado Común del Sur (Mercosur) y Estados Asociados. Maduro llamó este jueves a los países miembros del Mercado Común del Sur (Mercosur) a avanzar hacia una nueva dimensión económica dentro del bloque, que se sume a los logros sociales y políticas alcanzados en esas naciones, tras la derrota hace 10 años del Área de Libre Comercio de las Américas (Alca).
El triunfo logrado por los pueblos de la región frente al Alca, alcanzado en la edición de la Cumbre de las Américas celebrada en Mar del Plata, llegó junto con el nacimiento de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (Alba), en diciembre de 2004; PetroCaribe, en junio de 2005; la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), en abril de 2007, y la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), en 2011, organismos de integración y consolidación para los países de la región.
“La bandera principal de nuestros líderes era poner lo político primero antes que lo comercial, poner lo social primero, antes que lo financiero, y así se logró. Hemos superado umbrales de pobreza, somos los países más igualitarios, la inversión en educación, en salud ha avanzado. Hay que seguir fortaleciendo lo político, lo social e ir a una nueva dimensión de lo económico y de lo financiero”, expresó el jefe de Estado venezolano a su arribo a Brasil, para participar en la Cumbre.
El Mandatario Nacional señaló que entre las propuestas que realizará la nación en la Cumbre de Mercosur, se encuentra el lanzamiento definitivo del Banco del Sur, así como impulsar el debate para la creación de un Fondo Financiero del Sur, instituciones que podrían promover el desarrollo de las naciones del continente bajo un concepto de complementariedad y cooperación bilateral.
Venezuela hará reclamación justa y legal del territorio Esequibo
Maduro también señaló que Venezuela irá hacia todas las instancias internacionales que correspondan para exponer la reclamación justa y legal, en el marco del derecho internacional, para recuperar la Guayana Esequiba. Lamentó que el gobierno que dirige David Granger, forme parte de una estrategia para provocar a Venezuela y además enturbiar la vida de El Caribe y Suramérica, al tiempo que reiteró que la Guayana Esequiba siempre fue de Venezuela.
Al ser consultado por la prensa brasilera sobre el mencionado diferendo histórico, Maduro señaló que Venezuela fue despojada de ese territorio por el imperio británico y que existen suficientes documentos que así lo comprueban. El reclamo que hace Venezuela lo rige el acuerdo de Ginebra, el cual establece que en la Batalla de Venezuela había un conjunto de asuntos que tenían que ser tratados y negociados a la luz del derecho internacional, explicó el Presidente.
Acusó al gobernante guyanés, David Granger, de desconocer el derecho internacional y rechazar el acuerdo de Ginebra, al tiempo que abogó para que rectifique en su postura que perturba las relaciones y crea tensiones innecesarias en América Latina y El Caribe.
Venezuela aspira resolver el conflicto a través de la diplomacia de paz y de respeto, más sin embargo será firme en su postura de recuperar un territorio que fue conquistado con sangre por los libertadores de la Patria. “A través de la diplomacia aspiramos a resolver esto, con un tono respetuoso hacia ese pueblo –el de Guyana- pero con mucha firmeza porque a nosotros nos pertenece la Guayana Esequiba” sentenció Maduro.
El encuentro entre los mandatarios de los países integrantes del bloque, previsto para este viernes, estuvo precedido por la reunión de los cancilleres de esas naciones.
En dicha actividad, celebrada este jueves, Venezuela ratificó su apego a los principios del derecho internacional e insistió en la necesidad de que la República Cooperativa de Guyana respete el Acuerdo de Ginebra para tratar bajo mecanismos apegados a la paz el diferendo territorial sobre el Esequibo.
El Mercosur, mecanismo creado en 1991, agrupa actualmente a Argentina, Brasil, Paraguay, Uruguay y Venezuela como países miembros.