Prensa MPPC/Cenal y AVN
En este encuentro se creó una amplia gama de visiones que iban desde el mundo editorial independiente y las ediciones académicas hasta la posición del librero. Esto dio paso al recuento de la bibliodiversidad ante la “bestsellerización”, y, en consecuencia, al debate de la rentabilidad en el mercado editorial.
Los ponentes expresaron sus perspectivas sobre la selección que se lleva a cabo para considerar la publicación o no de un libro, los cánones utilizados para esto, y la difusión que se le otorga a los mismos dependiendo de factores económicos. Señalaron que en ocasiones la venta de estos best sellers en algunas editoriales permitía costear los gastos de otros títulos menos demandados, pero de gran importancia. Coincidieron en que el libro que no se publica deja de tener su función principal: comunicar.
Además, profundizaron en la rentabilidad del mundo editorial, tomando en cuenta que Puerto Rico se enfrenta a los altos costos de impresión y cifras onerosas para la compra de derechos de autor en ediciones propias. Lo que daba al libro independiente un formato limitado de reproducción, pero que cuenta con el valioso aporte de registrar las novedades editoriales regionales en su contexto histórico.
Democratizar el acceso al libro
Los ponentes insistieron en la necesidad que tiene Puerto Rico de poder democratizar el acceso al libro y crear nuevos contenidos. Al inicio del encuentro, Carlos Roberto Gómez, fundador de la editorial Isla Negra, agradeció la invitación que Venezuela le hizo a su país para participar en este evento literario, el cual se extenderá hasta el próximo 22 de marzo en el Teresa Carreño, el Eje del Vivir Bien y la plaza Los Museos, en Caracas.
“Para nosotros es muy importante estar en Venezuela no solamente porque es un país latinoamericano sino porque esta invitación representa una puerta hacia Latinoamérica, y Puerto Rico necesita mucho de esas puertas”, expresó.
En relación con la edición y distribución, José Escoda, de la editorial Pensamiento Crítico. comentó que en Puerto Rico los libros son financiados por lo mismos escritores, las editoriales o las fundaciones, y aclaró que este proceso no recibe el apoyo del Estado norteamericano, que además, no ha dejado que el hombre y la mujer afrodescendientes tengan espacio en la literatura. “Producir libros en Puerto Rico es un trabajo fuerte. Es muy difícil producir libros con el apoyo del gobierno porque el pensamiento es diferente”, explicó.
Resaltó que en su país son muy pocas las librerías y las imprentas por lo que las nuevas generaciones están aportando sus ideas para impulsar el trabajo literario, lo que ha generado un fenómeno identificado como la bibliodiversidad, es decir, la participación de un gran número de personas interesadas en rescatar el libro de las manos del comercio y distribuirlo como un instrumento liberador, necesario para los pueblos.
Por su parte, Neeltje van Marissing, quien labora en la editorial de la Universidad de Puerto Rico, señaló que como una alternativa para producir libros su país ha hecho uso de los avances tecnológicos y está produciendo con más fuerza libros electrónicos. “Los formatos que se están trabajando en Puerto Rico son el PDF y el eBook. A los estudiantes puertorriqueños les gusta ambos formatos”, comentó Marissing.
Por último, los ponentes valoraron la oportunidad que brinda la Filven, al masificar para el pueblo venezolano contenidos propios de la literatura puertorriqueña, especializados en diversas temáticas.
“En Puerto Rico es muy difícil exportar libros a América Latina porque tenemos mercados desiguales. Nuestros libros llegan a Venezuela gracias a ferias como estas, pero aún es muy costoso para nosotros exportar e importar libros de otros países como España y Argentina”, señalaron.
La actividad de este viernes forma parte de un foro central que se desarrollará hasta el próximo 22 de marzo en los espacios cálidos de la Unearte. Para este fin de semana se realizan dos nuevas ediciones de este foro, considerado la actividad central de la Filven. El sábado 14 el debate se enfocará en la edición y la identidad literaria, mientras que el domingo 15 asistentes conocerán más sobre el libro digital y el derecho de autor. La entrada para estas y otras actividades de la Filven es libre.