La voz de Palestina se escuchó en el Teatro Bolívar con la obra “The Gazelle of Akka”

La voz de lucha y dignidad del pueblo palestino se escuchó en el Teatro Bolívar de Caracas a través de la obra “The Gazelle of Akka”, de la actriz Raeda Taha, presentada el 27 y 28 de marzo como parte de la programación del 3er Festival Internacional de Teatro Progresista (FITP) 2024.

Prensa MPPC (Texto: Claudia Hernández / Fotos: Roiner Ross)

En esta pieza teatral, la actriz Raeda Taha se apropia del escenario para contar la historia del escritor y activista político Ghassan Kanafani, quién dedicó su vida a luchar por los derechos y la libertad de su pueblo. Mediante la narración y el manejo de una puesta en escena que recrea el escritorio de líder palestino, la actriz detalla las intensas jornadas de trabajo del también jefe de redacción del diario Al-Hadaf y autor de seis novelas, tres libros de ensayo literario y varias obras de teatro. Además, muestra su faceta como líder político, padre de familia y amante del arte.

La ruptura de la linealidad temporal en el hilo narrativo de la historia permite a los espectadores adentrarse en cada una de las etapas de la vida de Kanafani y luego armarlas como un rompecabezas. Es así como primero conocen su desempeño profesional como periodista y miembro del Frente de Popular para la Liberación de Palestina para después entrar a la sala de su casa y observar la convivencia fraternal que sostenía con su familia y amistades. Luego, el fin de la avasallante vitalidad de Kanafani aparece ante los ojos del público con una explosión de papeles y sentimientos que aluden al atentado perpetrado en su contra el 8 de julio de 1972 en Beirut, Líbano.

“Te pareces tanto a la Patria y la Patria se parece tanto a ti… En ti está recogida la humanidad”. La voz de la actriz Raeda Taha recorre la sala; representa el sentir de los seres queridos de Ghassan Kanafani, a quienes les correspondió despedirlo con profunda tristeza, pero también con el orgullo de haber compartido la vida con un ser humano leal a sus convicciones. Después, la narración da un salto al pasado para trasladarse a la ciudad de Akka (Acre, ubicada actualmente en Israel), donde transcurría la adolescencia de Kanafani y donde su vida cambió al tener que huir con su familia tras el asesinato de muchos de sus compatriotas a manos del ejército israelí. En adelante, se dedicaría a combatir la injusticia y el horror.

Al finalizar la función, Raeda Taha recibió aplausos, elogios y muestras de afecto por parte del público presente. El ministro del Poder Popular para la Cultura, Ernesto Villegas, expresó palabras de solidaridad a la actriz. “Estamos con ustedes hoy mañana y siempre. Venceremos. ¡Viva Palestina libre!”, afirmó.

 

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