Este miércoles, en el anfiteatro de la Casa Andrés Bello en Caracas, comenzó el ciclo “300 Años de Invasión y Colonización”, con una exposición realizada por el escritor e intelectual boliviano Rafael Bautista, quien resaltó el rol de la religión católica durante la etapa de la imposición europea en territorio americano y caribeño.
Texto: Prensa MPPC
“La colonización comenzó el 12 de octubre de 1492. Sin embargo, otros sugieren que comenzó antes con otros acontecimientos religiosos en el caso del catolicismo que fue desvirtuado por otros intereses de lo que el judaísmo planteaba, por allá en el siglo XII cuando aun se desconocía en Europa la existencia del hoy llamado continente América. El trasfondo cultural y religioso que se vivía en el hoy viejo continente influyó cuando Colón comenzó sus viajes a esta parte del mundo”, refirió.
Bautista añadió que “según la historia, el mesías (Jesús de Nazaret) nació en el año 1, pero otros han tratado de comprobar que fue realmente su llegada al mundo en el año 50 cuando se celebró el Año de la Shmita que es, de acuerdo a esa tradición, el año 7 multiplicado por 7 (49) que conllevaba al perdón, a la libertad de los esclavos que estuviesen en ese momento castigados, a la devolución o entrega de tierras, entre otras gratificaciones, o de perdón del agresor al oprimido. Luego, con el pasar de los siglos, vino Alejandro Magno, conquistó Israel y desvirtuó diversos hechos históricos imponiendo otros que hoy suele llamarse la Teoría de la Liberación, pero que ocultó muchos detalles que hoy son estudiados para su rescate cultural e histórico”.
Según el intelectual, esos cambios influyeron en la visión religiosa, en lo metafísico, en lo espiritual y conllevó luego a que la iglesia católica se alejara del judaísmo creando matrices de hechos y colocando a un Dios a su favor para ayudar a oprimir. “Juzgaban en lo político y en lo religioso ‘en nombre de Dios’, dando juicios de valor en injustos sistemas condenatorios. La religión católica ha sido imperial y se ha colocado del lado de los conquistadores a favor de la colonialización”, indicó.
Asimismo, hizo referencia al maltrato de los pueblos indígenas citando una frase de la guatemalteca Rigoberta Menchú, ganadora del premio Nobel de la Paz, quien afirmó que ha sufrido por ser triplemente denigrada: por su condición de indígena, de pobre y de ser mujer.
En ese sentido, Bautista afirma que el actual sistema capitalista aplicado en el mundo agrega otros tipos de discriminaciones adicionales a las tres citadas por la luchadora centroamericana.
Según el catedrático boliviano, “el capitalismo es para muchos prácticamente otra religión, es por ello que debemos estar preparados para saber anticipar alguna jugada que los grandes burgueses del mundo, que representan realmente el 1%. Un ejemplo de eso es la actual pandemia creada por ellos para matar a millones de pobres a escala global, pero que a lo largo de la historia, han tenido acciones similares en contra de las mayorías. Sin embargo, la humanidad de hoy no es la misma del siglo XX, mucho menos la que vivió hace 500 o 300 años. La historia no resalta solo el pasado, es la guía del presente, es la que nos indica hacia donde debemos ir y evitar repetir errores anteriores. Si no sabemos anticipar, caeremos de nuevo”, señaló.
Bautista también acotó que “la historia no solo sirve para hacer terapia, para estudiarla, para sanar heridas, también nos ayudan a indicar quienes fueron los autores que tiempo atrás dieron hasta sus vidas por dejarnos un presente mejor y para recordar a nuestros ancestros. Es por ellos que debemos resaltar que sus esfuerzos no fueron en vano”, afirmó.
Además, recordó la grandeza intelectual de Hugo Chávez, cuando destacó que “el comandante Chávez es ahora uno de nuestros ancestros, debemos resaltarlo siempre para que permanezca vivo no solo en nuestros corazones, también en preservar su legado. Él nos indicó que no es el mundo el que se viene abajo sino es el sistema que decae, el capitalismo produce destruyendo”, indicó.
Sobre ese punto del capitalismo, Bautista refirió cómo las grandes industrias del mundo han estado acabando con el medio ambiente con el afán de ganar más dinero conllevando al cambio climático.
“Para nosotros realmente es una crisis climática más que un cambio. Los verdaderos culpables de que hoy la humanidad esté en peligro son las mismas transnacionales, en el pasado y todavía culpan a los indígenas, pero tienen 300 años destruyendo al mundo; debemos hacer nuevos conceptos sobre la historia, sobre el tiempo”, aseveró.
El ponente explicó que siempre se ha dicho que la historia la escriben los vencedores. Sin embargo, agrega que el modelo de historia de Estados Unidos lo ha impuesto al mundo a su manera, la religión cristiana llegó con el colonizador quien cargó una espada con una mano y con la otra la cruz.
“La Iglesia Católica nunca sostuvo un diálogo con los representantes del judaísmo y una sola vez en la historia, monjes debatieron con sabios aztecas en 1550 allí intercambiaron experiencia sobre la espiritualidad y la religión, aunque no transcendió sino que luego se vio el exterminio de los indígenas que siempre fueron guerreros y no se dejaron dominar”, agregó.
Además, Bautista manifestó que el concepto de democracia hecho en Grecia es basado en un sistema aristocrático que es hoy practicado en Estados Unidos y que hoy se debería rehacer un nuevo concepto más adecuado para referir a este sistema político. “Recordemos que mientras en Grecia se hablaba del concepto de democracia, la misma Europa pasaba de imperial a monárquica. Es decir, no aplicaba ese criterio, sino que fue en América donde realmente comenzó a desarrollarse”, refirió.
La historia de América ha ocultado muchos eventos que fueron factores clave para impulsar la Revolución Francesa. “Varios de esos eventos preindependentistas que comenzaron en los años 1500 y que se desarrollaron entre California hasta Paraguay, dieron paso a que impulsaran ese hecho histórico en Francia. No obstante, siempre nos han dicho la inspiración en esa revolución fue lo que dio inicio real a los movimientos de independencia en este continente. Debemos contar bien la historia”, recalcó.
A juicio de Bautista, la historia puede ayudar más en la reunificación de los pueblos, puesto que juntos hacen más que por separados. Además, considera que toda religión es dogmática y dominante pero también ofrece caminos de liberación.
“Todo inicia con una revolución y en la misma deben incorporarse elementos culturales con su propio arte, música y elementos que den una identidad, sin olvidar sus factores históricos y en lo que puede proyectar hacia el futuro”, concluyó.