La portavoz de la Casa Blanca, Jen Psaki, dijo este domingo que la reunión en Ginebra entre el presidente de EE.UU., Joe Biden, y su homólogo ruso, Vladímir Putin, no trajo consigo “ningún cambio” en la política de sanciones antirrusas de Washington. Según Psaki, la “ley exige” que la Casa Blanca continúe contemplando nuevas restricciones contra Rusia relacionadas con el uso de armas químicas.
Texto: RT
Antes de pronunciar la palabra “ley”, EE.UU. “debe castigarse a sí mismo con sanciones por Yugoslavia e Irak”, así como por los “muertos y mutilados” en todo el mundo, declaró la portavoz de la Cancillería rusa, María Zajárova, en relación a los planes del país norteamericano de introducir nuevas sanciones contra Rusia.
“¿Hace mucho que EE.UU. comenzó a vivir conforme a las leyes? La forma en que actúan en la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas no está sujeta a ninguna ley: total ilegitimidad. Primero, que se castiguen con sanciones por Yugoslavia e Irak, por los millones de muertos y mutilados. Y luego será posible pronunciar la palabra ‘ley'”, escribió Zajárova en su canal de Telegram.
Rusia siempre ha respondido, de forma lógica y conforme a las leyes, a la imposición de sanciones ilegales por parte de Estados Unidos, añadió la portavoz rusa.
Por su parte, el asesor de Seguridad Nacional de EE.UU., Jake Sullivan, dijo también el domingo que EE.UU. está preparando más sanciones contra Rusia en respuesta al supuesto envenenamiento del opositor Alexéi Navalny. Según Sullivan, las autoridades estadounidenses también seguirán imponiendo sanciones contra las compañías rusas involucradas en la construcción del gasoducto Nord Stream 2.