El presidente venezolano, Nicolás Maduro, denunció este lunes una campaña de chantaje por parte de Estados Unidos contra los gobiernos de América Latina, para que voten y apoyen una resolución propuesta por ese país y el llamado Grupo de Lima para suspender a Venezuela del organismo.
Texto: Alba Ciudad, AVN, Agencias / Fotos: Prensa Presidencial
“El gobierno de los Estados Unidos en estas últimas semana ha desarrollado una campaña criminal, macabra, chantaje, amenazas de todos los gobierno de América Latina y el Caribe. Los han amenazado con quitarle las ayudas económicas, posibilidades de financiamiento, a uno países los ha amenazado con quitarle los flujos de turismo y cortárselo, los flujos comerciales, apretar a los migrantes”, expresó el jefe de Estado desde el Hotel Alba-Caracas, durante una reunión con la Dirección Nacional del Partido Socialista Unido de Venezuela (Psuv).
En declaraciones transmitidas por Venezolana de Televisión, el Mandatario Nacional enfatizó que esta campaña tiene como objetivo “acabar con el modelo independiente, de desarrollo” impulsado por el comandante y líder de la Revolución Bolivariana, Hugo Chávez.
“Una vez dominado el país, caigan todas las riquezas en sus manos y comience una era de coloniaje, de esclavitud para nuestro pueblo. Eso es lo que quiere el imperio”, advirtió.
En este sentido, ratificó el carácter antiimperialista del pueblo venezolano para poder enfrentar todos los obstáculos que promueva los ejes imperiales para acabar con la independencia del país. “Ahorita hay una batalla de dignidad de nuestra América y Venezuela está en el centro de batalla por la dignidad. Vamos a salir con la fuerza moral”, enfatizó.
Reafirma intención de retirarse
Durante la actividad, reiteró la decisión de retiro del organismo internacional, acción que lleva a cabo el país desde 2017 y tiene una duración de dos años, debido a la postura intervencionista de la OEA que se ha venido ejecutando en el seno de la organización desde el 2015, cuando llegó Luis Almagro a la Secretaría General.
Por otro lado, la Casa Blanca informó este lunes que el vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, telefoneó al presidente de Ecuador, Lenín Moreno, en un momento en el que su Gobierno encabeza una campaña para suspender a Venezuela de la OEA, un objetivo para el que necesita los votos de 24 países miembros.
En un comunicado, la Casa Blanca informó de la conversación telefónica entre Pence y Moreno, que hablaron de “oportunidades para revitalizar la relación bilateral entre Estados Unidos y Ecuador”.
“Mientras la Organización de Estados Americanos celebra su Asamblea General, los dos líderes conversaron sobre el desastre humanitario y económico en Venezuela, y la necesidad de trabajar juntos con naciones afines para proteger y promover la libertad en el continente”, indicó la Casa Blanca.
La llamada se produjo horas antes de que Pence reciba en la Casa Blanca a representantes de algunos países miembros de la OEA.
En la recepción, Pence “hará personalmente un llamamiento a los países afines del continente americano a votar el martes para suspender a Venezuela de la OEA durante su 48 Asamblea General”, que comenzó hoy.
Piden suspensión de la OEA
Por otro lado, el Secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, pidió este lunes a los países que integran la Organización de Estados Americanos que suspendan a Venezuela. ”Hacemos un llamamiento a las naciones de la OEA que hagan presión al “régimen” de Maduro, que hagan esto hoy mismo con respecto a Venezuela”, señaló.
“La suspensión no es un objetivo en sí mismo, pero mostraría que la OEA respalda las palabras con acciones”, dijo Pompeo, que intervino en la Asamblea General de la OEA, el foro político más importante del organismo, que comenzó este lunes.
En la sesión, los representantes de Argentina, Brasil, Canadá, Chile, Estados Unidos, México y Perú plantearon iniciar el procedimiento para eventualmente suspender a Venezuela de la Organización de Estados Americanos (OEA) por supuesta “ruptura del orden democrático”, según un documento a debate en la 48ª asamblea del organismo en Washington.
El punto 10 del proyecto de resolución sobre la situación en Venezuela, presentado por las misiones permanentes de estos siete países ante la OEA, propone aplicar los mecanismos previstos en la Carta Democrática Interamericana, que pueden derivar en la suspensión de la participación de un Estado miembro cuando se produzca una “alteración del orden constitucional que afecte gravemente su orden democrático”.
Para que Venezuela sea suspendida de la OEA se necesita el respaldo de 24 de los 34 países miembros activos (dos tercios).