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El Ministerio del Poder popular para la Cultura a través de la Fundación Red de Arte, invitan al público en general a visitar la exposición El Arte de Mis Manos del escultor Víctor Aldana, en la sede de la Galería de la Red de Arte Trujillo, ubicada en la Av. Independencia una cuadra más arriba de la plaza Sucre.
Texto: Prensa MPPC
La muestra comprende diversas etapas del trabajo de Víctor Aldana, quien inició su acercamiento a la realización artística desde el año 1982. Este creador trujillano -que nació en La Puerta, pero es en Escuque donde reside actualmente-, se inspira principalmente en la naturaleza como fuente conductora de su trabajo.
“Cuando estoy creando me fijo mucho en la naturaleza, sus colores, sus texturas, sus sonidos. El verdor de las montañas, los árboles, el sonido del agua fresca de los manantiales, los animales, el vuelo de los pájaros.Tengo inquietud por los poemas y la talla en madera, mi primera obra fueron unos viejitos que los tallé de un tronco que me encontré en una hacienda de café, cuando tenía los 20 años, cerca de 1982, estaba emocionado por conocer y descubrir el arte de la talla y la escritura autóctona social, creativa de dichos populares, desde ese momento no he parado”, comenta Víctor Aldana.
“Al principio, mi trabajo consistía en la poca intervención a lo natural, donde trababa de ir manteniendo principalmente las formas naturales de los troncos, para mi primera exposición realizada en la ciudad de Valera, las piezas eran así, convertí un tronco de más de tres metros en una gran serpiente y así sucesivamente todas las obras mantenían las formas de las “Raíces” y por eso llevó ese nombre”, explica Aldana.
Desde Raices, su primera exposición, se fue forjando con mucho ahínco y constancia su carrera artística, ha sido merecedor de gran cantidad de premios regional y nacionales, así como también su participación en exposiciones colectivas e individuales de envergadura tanto dentro de nuestro estado, como a escala nacional.
Aldana destaca el valor de la experiencia y la investigación dentro de su proceso de creación, “A medida que el tiempo va pasando, vamos aprendiendo más y nos hacemos más creativos, uno va reflexionando sobre cada obra y buscando la forma de mejorarla cada vez más, el interés hace que uno investigue, en libros, revistas y vea otros trabajos de otros artistas, para ir mejorando y ampliando técnicas. Es así como el artista popular va creando sus obras”.
Aunque sus temas de inspiración siguen siendo los mismos, su obra ha andado por nuevos caminos, donde la talla ha superado su atmósfera estática para aproximarse a un reto mayor: la sensación de movimiento, Víctor Aldana quiere sumar a su escultura el movimiento, tanto corporal, -con la creación de figuras humanas en pleno movimiento-, como a través de piezas abstractas, donde nos demuestra el domino de técnicas y de sus herramientas.
De esa forma, El Arte de Mis Manos, es una exposición que nos pasea por esas etapas, y nos induce a ese conjunto de ideas que han caracterizado al artista en las diferentes épocas de su trabajo.
Este sencillo escultor y tallista trujillano, comparte la pasión de crear tallas, ejerciendo a la par el oficio de albañilería y plomería, sin perder un segundo de su tiempo libre para irse a buscar la madera a los aserraderos o dónde puedan encontrarse retazos de troncos de árbol abandonados.
Para finalizar nos comenta sobre la importancia de los artistas en la sociedad: “Los artistas populares somos importantes para la sociedad, porque somos como los cronistas, investigamos sobre la historia y las leyendas de nuestros pueblos, lo plasmamos en nuestras obras y luego se lo damos a conocer a la gente, somos enseñanza, nuestro trabajo sólido lleva plasmado mucho significado y grandes ideales, para que su historia siga viva”.
“Los artistas populares no nos guardamos el conocimiento, lo transmitimos los más que podemos, para que el arte siga viviendo todo el tiempo. La vida es una enseñanza para seguir luchando por lo que queremos con constancia y dedicación, y queremos transmitirla al mundo. Cuando estoy tallando quiero que cada obra que hago me quede cada vez mejor, que lo que hago se parezca cada vez más a lo que sueño a mi voz creativa propia, que me habla con experiencia y conocimiento”.