El presidente venezolano Nicolás Maduro indicó este sábado que continúan las averiguaciones en torno a la distorsión registrada en el procesamiento y venta del pan en el país. “Estamos investigando para ver cuánto dinero hay por debajo, involucrado. En la primera panadería que el poder popular de Caracas rescató, ponían a la gente a hacer cola de tres y cuatro horas y allí (descubrimos) 190 sacos de harina de trigo entregada por el gobierno nacional, escondida”, expresó molestó el Presidente, quien aseguró que los responsables ya están a la orden de las autoridades competentes.
Texto: Prensa Presidencial (Marynés Ladera)
Luego de varias advertencias y de conversaciones directas con representantes de la asociación que agrupa a los panaderos, el pasado 16 de marzo el Gobierno Bolivariano inició el despliegue del “Plan 700”, guiado por la Superintendencia Nacional para la Defensa de los Derechos Socioecómicos (Sundde), para la fiscalización del funcionamiento de los negocios en cuanto a producción y distribución de la materia prima del pan.
Hasta ahora se han ocupado dos establecimientos en Caracas y se ha exigido el cumplimiento de un instructivo que debe regir la dinámica de los expendios de pan en el país.
“¿Cuál es esa ideología de alguien que tiene que prestar un servicio, de hacerle pan al pueblo, y le esconde el pan al pueblo?. Es un pecado mortal que ni rezando un millón de Padre Nuestro (se perdona) van directo al infierno quien practique el bachaquerismo”.
Estas impresiones las ofreció el Jefe de Estado durante su encuentro con trabajadores del país, y a propósito de la graduación de 239 profesionales egresados de la Universidad Bolivariana de los Trabajadores, un actividad que fue celebrada en la Plaza Bicentenaria del Complejo Presidencial de Miraflores.