La canciller venezolana, Delcy Rodríguez, dirigió una carta a la empresa transnacional ExxonMobil rechazando la explotación de esa compañía en la Guyana Esequiba, lo que quebranta el cumplimiento de obligaciones bilaterales suscritas entre la República Cooperativa de Guyana y la República Bolivariana de Venezuela. La carta está dirigida a Jeff Simon, gerente de la compañía Esso Exploration and Production Guyana Ltd., y expresa en términos jurídicos y diplomáticos, la firme posición del Gobierno y Pueblo Bolivariano de no aceptar la incursión o interferencia de ninguna empresa transnacional en asuntos soberanos, particularmente en aquellos relacionados con la controversia territorial entre ambas naciones; resaltando que esta nueva incursión reproduce las reiteradas pretensiones de esa corporación petrolera sobre la zona marítima denominada bloque Stabroek.
Texto: Prensa Cancillería
Rodríguez apunta que la actuación de la transnacional, subsidiaria de ExxonMobil, contradice el Derecho Internacional Público y revela su intención de subvertirlo, con la pretensión de realizar operaciones no autorizadas dentro del espacio marítimo colindante con Venezuela, lo cual constituye un acto de violación a lo establecido en el Acuerdo de Ginebra de 1966.
La carta destaca que este hecho no puede descontextualizarse de la acción del gobierno de EE.UU. de declarar a Venezuela como “una amenaza inusual y extraordinaria a su seguridad interna y política exterior”, vinculada al interés imperial de apoderarse de las reservas internacionales probadas colindantes al área en la cual pretenden operar.
La República Bolivariana de Venezuela ratifica que no existe delimitación sobre las áreas marinas y submarinas del espacio territorial de la zona en reclamación; y que sigue en plena vigencia el acuerdo existente que prevé la no incursión en tales espacios con fundamento en el reconocimiento de la “existencia de disputa Internacional que afecta la extensión del área contratada”.
El Gobierno de Venezuela observa como un acto nulo, contrario al Derecho Internacional Público y al orden constitucional interno, cualquier acto que facilite la ejecución de actividades de exploración y/o explotación no consensuadas, ni autorizadas por los Estados interesados en el referido espacio marítimo, donde sólo cabe los efectos jurídicos derivados del consenso “exclusivamente bilateral” entre ambos Estados.
En la misiva se deja constancia de tal desconocimiento por parte de la empresa, en claro detrimento de la normativa legal sobre el Derecho Internacional refrendado por la Organización de las Naciones Unidas, incluyendo violación flagrante a normas relativas a los Derechos del Mar. Venezuela, a través de su Canciller, insta a la transnacional, de manera formal y categórica, a evitar cualquier incursión en dicho espacio marítimo.
Para finalizar, la ministra para Relaciones Exteriores subraya que la Patria de Bolívar y de Chávez se mantiene firme en la defensa de sus derechos soberanos, ajena a injerencias externas en el contexto del desarrollo de ambas naciones hermanas y con la mejor disposición para continuar llevando a cabo actividades ajustadas a lo establecido en el Acuerdo de Ginebra.