Maduro ante el antiguo Cuartel Moncada, hoy Ciudad Escolar 26 de Julio, en Santiago de Chile.
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, afirmó este viernes que gracias a la rebeldía del pueblo cubano y su intento por tomar el Cuartel Moncada, aquel 26 de julio de 1953, liderados por el comandante Fidel Castro, América Latina disfruta hoy día de un sólido proceso de integración regional. Maduro fue uno de los Jefes de Estado que asistió a la conmemoración número 60 del intento de toma del Cuartel Moncada, en Santiago de Cuba, un levantamiento encabezado por el comandante Fidel Castro en 1953 que, a pesar de haber fracasado, es considerado el primer paso de la lucha contra la dictadura de Fulgencio Batista (1952-1959), que terminaría con el triunfo de la Revolución cubana.
Texto: Telesur / Fotos: Prensa Presidencial, AVN
“Gracias al pueblo cubano hoy América Latina es lo que es. Cuba es responsable de procesos como el ALBA (Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América), la Celac (Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños), de que tengamos la esperanza de lo que hoy somos. Ha valido la espera de 60 años, de luchas. Gracias a Cuba, gracias a Fidel, gracias a Bolívar”, afirmó el dignatario venezolano.
Maduro afirmó que el ideal de Fidel y Raúl Castro es el mismo de los próceres venezolanos. “Ellos tomaron las banderas de (José) Martí, de (Simón) Bolívar y empezaron a luchar contra las garras de imperio, que desde el siglo XIX quería caer sobre nuestra América”.
Los mandatarios en el antiguo Cuartel Moncada, hoy Ciudad Escolar 26 de Julio
“Hoy (viernes) estamos aquí para mostrar nuestro amor infinito a Cuba, a Santiago y a las banderas de la rebeldía. Apenas van 60 años”, reiteró el jefe de Estado venezolano.
Diferentes mandatarios latinoamericanos se pronunciaron para conmemorar el aniversario número 60 del intento de toma del Cuartel Moncada, un levantamiento encabezado por el comandante Fidel Castro en 1953 que, a pesar de haber fracasado, es considerado el primer paso de la lucha contra la dictadura de Fulgencio Batista (1952-1959), que terminaría con el triunfo de la Revolución cubana. Fidel Castro lideró ese 26 de julio de 1953, el asalto a ese cuartel militar, en simultáneo con un ataque a la guarnición Carlos Céspedes, en Bayamo (sureste del país), operaciones con las que un grupo de jóvenes quería poner en marcha una revuelta contra el régimen de Batista.
Maduro ante el antiguo Cuartel Moncada en Santiago de Chile.
Los Jefes de Estado ofrecieron un tributo al héroe cubano José Martí.
Los Jefes de Estado ofrecieron un tributo al héroe cubano José Martí.
Nicolás Maduro y Raúl Castro en el Museo 26 de Julio.
Nicolás Maduro y Raúl Castro ante un modelo del barco Granma en el Museo 26 de Julio.
Nicolás Maduro y Raúl Castro en el Museo 26 de Julio.
La idea inicial era ocupar los dos cuarteles y, desde allí, llamar a la población de todo oriente a la lucha. Pero el hecho casual de una guardia de recorrida que dio con los combatientes vestidos con el mismo uniforme que el Ejército, caqui amarillo, fue el comienzo del fracaso.
El fracaso de la toma derivó en persecuciones, la desaparición de los partidos y la detención de miles de opositores, estuvieran vinculados o no a los hechos. Por estos hechos, Fidel fue condenado a 15 años de prisión, aunque en 1955 fue beneficiado con una amnistía, salió de prisión e inició un exilio en México, donde organizó el Movimiento 26 de Julio, nombre que homenajea justamente la gesta social que intentó culminar con el régimen de Batista.
Cuba fue quien incendio la mecha en latinoamérica, para ayudar en las diferentes conquista que, a través del tiempo, se fueron cultivando en los jóvenes con tendencia de lucha por una mejor vida para estos pueblos que hoy se sienten orgullosos cuando llegó el gigante comandante supremos Hugo Chávez Frías, quien con mucho valor seguido de valiente soldado dio el primer paso para que el pueblo de Venezuela despertara de la pesadilla donde estaba en los gobiernos de la cuarta república, para que con una lucha liderizada por él se hiciera el Gran Proyecto Bolivariano, que se continúa a la cabeza de Nicolás Maduro, el hijo de comandante eterno Hugo Chávez, en busca de la libertad plena para toda Latinoamérica y el Caribe