Nuevamente, una manifestación supuestamente pacífica finalizó en graves hechos de violencia y en el ataque a la base militar de La Carlota por parte de grupos de choque opositores, usando bombas molotovs, morteros y explosivos caseros. Los políticos opositores intentaron desmarcarse de los hechos de violencia, a pesar de que ellos mismos convocaron la movilización con mensajes llamando a los militares a derrocar al gobierno venezolano.
Texto: Alba Ciudad
Cientos de opositores acudieron este 24 de junio a una manifestación convocada por dirigentes de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD, coalición de partidos opositores) en la autopista Francisco Fajardo, Distribuidor Altamira, ubicado en el municipio Chacao, al este de Caracas.
La movilización tenía por objetivo “dar un mensaje a las FAN”, según los numerosos panfletos e imágenes de partidos como Primero Justicia, Voluntad Popular y la propia Mesa de la Unidad (MUD, coalición de derecha) que convocaron a la manifestación.
Llama la atención que, en todos sus panfletos, usaron el término “las FAN” (Fuerzas Armadas Nacionales), que se usaba antes de la llegada de la revolución bolivariana, en vez del término “la FANB” (Fuerza Armada Nacional Bolivariana), la denominación vigente actualmente, que también se usa en singular para denotar unidad entre sus componentes.
“Nuestro mensaje a la FAN es ¡Rebélense! Únanse al pueblo, defiendan a los venezolanos que exigimos libertad #FANRebélenseContraElDictador”, rezaba el tuit que Freddy Guevara, diputado de Voluntad Popular y una de las cabezas más visibles de las protestas violentas, escribió este sábado a las 10 de la mañana, en otro abierto mensaje a los efectivos militares para alzarse contra su Comandante en Jefe.
Las exigencias a los efectivos militares para alzarse contra su Comandante en Jefe se alternaban con mensajes insultantes contra ellos y contra las mujeres en general, muy parecidos a los que también se emitían en el año 2002, cuando la oposición usaba prendas íntimas femeninas para calificarlos de “cobardes” por no dar el golpe de Estado y entregarles el poder.
La manifestación opositora fue convocada para las 11 de la mañana, pero al mediodía no habían partido aún de los puntos designados.
Cuando una periodista de VivoPlay entrevistó en Parque Cristal a José Manuel Olivares, diputado de Primero Justicia, el político dio a entender que había un plan para que, una vez los manifestantes estuvieran en la autopista, se les ordenaran movilizarse a algún punto en el centro de Caracas, tal y como ocurrió el pasado 20 de mayo en una marcha similar. Instó a acudir a la autopista y, una vez allí, se les informaría al respecto.
Finalmente, el mensaje para ir al centro de Caracas nunca se dio.
En la autopista
Hacia las dos de la tarde, unos pocos miles de personas ya plenaban el Distribuidor Altamira.
No había una tarima principal, al parecer por desacuerdos internos en la mesa de la Unidad. Al no haber una dirección visible, era inevitable que los violentos tomaran el control: Hacia las tres de la tarde, un grupo de jóvenes con máscaras, autodenominados “La Resistencia”, ya estaban tratando de forzar las barandas de la base militar de La Carlota, intentando derribarlas en el mismo punto donde el jueves, y luego el viernes, también habían causado estragos.
Repentinamente apareció un camión con un sonido, que se colocó en el medio de la multitud y dio algunos mensajes religiosos. Poco después, políticos como Delsa Solórzano lo usaron para llamar a detener la agresión contra la base, afirmando que su convocatoria era pacífica y no estaban de acuerdo con atacarla.
Sus palabras eran bastante difíciles de creer, dados los niveles de agresividad que han manejado los políticos opositores en los últimos días tras la muerte de David Vallenilla el jueves pasado. Richard Blanco, por su parte, dio un discurso bastante agresivo e incendiario, iniciándolo con la frase: “Maldito el soldado que apunte las armas contra el pueblo”.
Algunos politicos opositores se acercaron hasta los grupos de encapuchados, logrando convencerlos por unos minutos de desistir de la agresión contra la base. Los medios presentes, como VivoPlay y NTN24, les dieron bastante relevancia a los políticos, intentando hacer ver que ellos no estaban de acuerdo con la violencia que inevitablemente ocurriría en los próximos minutos.
Sin embargo, las actuaciones eran bastante difíciles de creer. “Yo también quiero quemar esta mierda, pero no es el momento”, decía Juan Requesens, diputado opositor, a un grupo de manifestantes violentos intentando convencerlos de desistir. Sus palabras fueron captadas en este video de NTN24.
La “paz” no fue por mucho. Poco después, desde el camión con las cornetas se declaró que “los objetivos de la marcha habían sido cumplidos” y se dio por concluida la manifestación. Los políticos desaparecieron, y los grupos violentos tomaron el control, ya de forma definitiva.
De nuevo, se repitieron las escenas que se han visto al menos doce veces desde abril: jóvenes meneando las rejas, usando cables y cuerdas para derribarlas y luego arrastrarlas hasta la autopista para usarlas de barricadas.
Finalmente, decenas y decenas de jóvenes encapuchados penetraron la base militar. Lanzaban piedras y bombas molotov contra los efectivos militares, quienes se guarnecían a lo lejos.
Otro grupo de personas reventaban los muros y paredes para obtener piedras, que luego lanzaban a los efectivos.
Como era de esperarse, los encapuchados usaron no sólo piedras, sino explosivos caseros y bombas molotov contra los militares, estallando dentro de la base. Sin embargo, hubo casos de impericia; en un momento, VivoPlay reportó que había dos heridos: uno por asfixia, y otro por mala manipulación de explosivos artesanales.
Un video de VivoPlay dejó ver cómo un explosivo lanzado con un mortero rebotó en un árbol y casi hiere a uno de los manifestantes violentos.
Los efectivos militares se acercaban sólo para lanzar lacrimógenas, y luego regresaban a sus lugares. Ni este sábado ni el viernes usaron escopetas de perdigón.
Los enmascarados entraban, lanzaban bombas molotov y piedras, y luego se salían cuando los efectivos se acercaban a ellos.
Luego, llegaron vehículos blindados conocidos como ballenas, usando agua a presión para intentar disuadirlos.
La confrontación se extendió hasta las 5:15 de la tarde, cuando de pronto un gran contingente de efectivos de la Policía Nacional Bolivariana y Guardias Nacionales llegaron en moto por la autopista Francisco Fajardo.
Los opositores violentos le tienen mucho miedo a los PNB, porque ellos sí tienen potestad para detenerlos. Corrían por todos lados.
Los jóvenes emprendieron la huida velozmente hacia Altamira sur. Los GNB comenzaron a despejar la vía, recogiendo los restos de las rejas y piedras que colocaron atravesando la autopista a modo de barricada, y luego reabrieron el tránsito automotor en la principal autopista de Caracas.
Este es un pequeño resumen de los ataques de opositores a la base militar de La Carlota, reseñados en Alba Ciudad:
- El 20 de abril la base aérea fue atacada, destruyendo sus rejas e intentando ingresar a la misma.
- El lunes 8 de mayo, un grupo violento atacó la base La Carlota usando explosivos caseros, como ellos mismos registraron y publicaron en redes sociales. Pocos días después, el Vicepresidente Tareck El Aissami anunció la detención de 15 involucrados.
- El miércoles 10 de mayo, la Unidad Educativa Francisco de Miranda, institución escolar ubicada dentro de la base aérea militar de La Carlota, en el este de Caracas, fue víctima de ataques por manifestantes violentos que usaron objetos contundentes, piedras, botellas y disparos, según denunciaron los padres y representantes en una asamblea realizada este jueves. Aquí hay otras imágenes. El 11 de mayo, el Presidente Maduro anunció que varios atacantes habían sido capturados.
- El 31 de mayo se registró un ataque contra la base militar La Carlota, que incluyó el uso de explosivos caseros.
- El 22 de junio, un nuevo ataque a la base militar provocó la muerte de David Vallenilla, de 22 años, cuando un policía aéreo le disparó con una escopeta de perdigones a corta distancia, en un momento en el que Vallenilla parecía acercarse a lanzar algo contra los efectivos. El responsable del disparo está detenido.
- El 23 de junio, se repitieron los ataques contra la base militar. Los violentos incendiaron y destruyeron además 4 camiones, dos de ellos de particulares.
[…] El video del acoso, que ocurrió este sábado 24 de junio, muestra a un gran grupo de personas coreando: “¡asesina! ¡asesina! ¡asesina!”, contra una mujer. Luego, un pequeño grupo de personas ayudaban a ponerla a salvo, corriendo de la multitud, que la perseguía por el centro comercial. Entre el grupo de personas habían encapuchados y personas con gorras tricolor, pues venían de la manifestación en el Distribuidor Altamira. […]
[…] Alba Ciudad […]
en cualquier pais del mundo, un acto de este tipo no es permitido, y ya le hubiesen caido a plomo limpio a esos delincuentes mal llamados libertadore