Numerosos comunicadores, activistas y organizaciones de derechos humanos lamentaron la muerte este martes de Rummie Quintero Verdú, referente de la lucha LGTBI en el país, fundadora y presidenta desde 2004 de la organización “Divas de Venezuela” por los derechos de las personas sexo-género disidentes. Así lo informó Richelle Briceño, dirigente del sector, a través de su cuenta Twitter.
Texto: Alba Ciudad (Luigino Bracci Roa)
“Hoy nos ha dejado una de las más grandes figuras ícono de la lucha por los derechos humanos de la poblacion LGBTI y personas en situación de vulnerabilidad. Muchos de sus sueños no se vieron materializados por lo que tenemos una enorme deuda contigo Rummie Quintero”, escribió Briceño.
Quintero se desempeño como defensora de los derechos humanos, en especial de la Comunidad Transgénero en Venezuela, y fue impulsora en 2011 del reconocimiento legislativo para la no discriminación por razón de orientación sexual. Participó en la normativa para la paridad de género en candidaturas ante el Consejo Nacional Electoral.
Fue la primera mujer transgénero en ser postulada a una candidatura de elección popular, la Asamblea Nacional Constituyente de 2017.
- La organización feminista Tinta Violeta lamentó su muerte: “Hoy es un día triste para el feminismo en Venezuela. Nuestra compañera Rummie Quintero cambió de plano. Siempre la recordaremos y tendremos presente en el verbo crítico e incendiario y en su incansable lucha por los derechos de las personas trans y de género diverso”.
- Laura Cano, integrante de Tinta Violeta y extrabajadora de Alba Ciudad, escribió: “A Rummie Quintero nos la llevamos en el verbo crítico e incendiario de cada reunión, en la resistencia trans, en la RE-Existencia. Gracias, hermana, por cada enseñanza, por abrazar el transfeminismo, por hacer de tu vida un motivo para seguir luchando por los derechos de todas/es”
- La cuenta de la organización Comadres Púrpura señaló: “Abrazamos en el calor más grande que acobija nuestro afecto a Rummie Quintero, una hermana guerrera que luchó incansablemente por la defensa de las y los más vulnerables, en especial la comunidad LGTBIQ+, un ser que nos contagió de su ternura, sabiduría y fuerza”.
- El Movimiento de Inquilinas e Inquilinos tuiteó: “Lamentamos el fallecimiento de la compañera de lucha, militante por los derechos humanos de la poblacion LGBTIQ+ Rummie Quintero, acompañamos en este dolor a familiares y amigues”.
- También hizo lo mismo el sitio web Venezuelanalysis, recordando una entrevista que le realizaron hace unos meses.
- La periodista Vanessa Gutiérrez escribió: “Rummie fue una de las activistas por los derechos de la comunidad LGBTI en Venezuela más queridas y respetadas. Siempre estaba haciendo cosas en su comunidad. Su baile, su activismo y su sonrisa serán inolvidables”.
- Luisana Colomine, periodista y profesora jubilada de comunicación social en la UBV, compartió la entrevista que le hizo para la ANC en 2017.
- El Movimiento de Mujeres Clara Zetkin y la Corriente Marxista Lucha de Clases también lamentaron su partida física.
- El movimiento Venezuela Igualitaria señaló: “Nos ha llegado la triste y lamentable noticia de la partida física de nuestra aliada, amiga, defensora de DDHH y ejemplo de coraje y resistencia Rummie Quintero, quien se fue sin que el Estado venezolano reconociera su identidad, pero nos deja su furia para seguir luchando”.
Lo mismo hizo la organización Faldas-R, que compartió el siguiente texto en Telegram:
Hace unos años, para celebrar uno de nuestros aniversarios se nos ocurrió hacer una radio abierta. La hicimos en la Casa de las Primeras Letras. Como suele sucedernos, terminamos convocando muy tarde. Queríamos celebrar nuestro cumpleaños, habíamos escrito un pronunciamiento, buscado el sitio, elaborado el guión para nuestra radio, preparado franelas, stickers, volantes. Pero olvidamos el pequeño detalle de avisarle a nuestres amigues y compañeres cuándo y dónde era el festejo. Estábamos preocupadas, ¿y si no llegaba nadie?
Rummie fue de las primeras en llegar y sentarse muy cerca de las moderadoras de la radio abierta. En unos tacones altísimos y con unos enormes lentes de sol, nuestra Diva se hizo presente.
La radio arrancó, las dos moderadoras entrevistaron a alguien, hablamos sobre la situación del aborto, sobre la Línea y demás cosas en extremo aburridas. Nuestros amigues, aunque comprometides, se comenzaron a aburrir y el bullicio subió.
Entonces Rummie tomó la palabra, o, mejor dicho, se robó la palabra. “¿No les da vergüenza?, ¡Esto atenta contra la familia tradicional!” El silencio fue inmediato. Nuestra amiga interpretó su papel de señora conservadora, increpando y refutando cada cosa que decíamos a favor del aborto con argumentos que ella conocía más que bien. Toda la audiencia quedó cautiva con esta performance y la radio cerró con una avalancha de aplausos que Rummie recibió feliz y compartió con nosotras, como hermoso regalo de cumpleaños.
Hoy nos enteramos con enorme tristeza de su partida física, nuestra compañera, que fue tan importante para nosotres, que nos enseñó, nos acompañó, y cuando tuvo que hacerlo nos criticó amorosamente. La tristeza que sentimos con su partida es profunda. Nos queda su nombre, su lucha, su perseverancia y su irreverencia.
Seguiremos en lucha hasta que todes seamos libres de amar, vivir y elegir sobre nuestros cuerpos y nuestras vidas, querida Rummie, ¡Hasta siempre compañera!
En una entrevista publicada en YVKE Mundial en agosto de 2015, Quintero Verdú expresó que “el fundamentalismo religioso no ha permitido permear los espacios que pensamos, en un momento, que podían ser mucho más amplios. Te puedo citar, específicamente, la Asamblea Nacional. Esta no ha tenido una apertura real hacia lo que son las reivindicaciones de la comunidad sexo-género diversa. Creo que es importante que cualquier servidor o servidora pública se deslastre de sus fundamentalismos y preceptos religiosos. Deberían formarse mucho más en el tema de los derechos humanos, con un enfoque crítico de lo que son, para poder consagrarlos, garantizarlos y aplicarlos. Fundamentalmente eso. Si rompemos con eso, estamos abriendo esa ventana que antes se abrió en cuanto al tema de las sexuales disidentes, a las mal llamadas minorías (personas con discapacidad, adultos y adultas mayores, a las mujeres). Si seguimos manteniendo una cultura judeocristiana, que sea la que mande, que rija los preceptos y las conductas, no podremos avanzar”.
“Debemos, en su lugar, tratar de aplicar una mayor fortaleza hacia la espiritualidad en general. No hacia la religión. Y ahí podemos empezar a reconocer que cada ser humano, inclusive antes de que nazca, tiene derechos”, expresó.
“Yo le tenía mucho miedo al comunismo, porque nos lo inocularon”, dijo en otro punto de la entrevista sobre la importancia de la formación política. “Nos inyectaron que era satánico, que era totalmente algo nefasto, que no garantizaba tus derechos humanos, y resulta que es todo lo contrario: el comunismo es un estado filosófico y de vida tan maravilloso que creo que no lo veremos ni en mil años. El tema de la ideología política es importantísimo porque solo con movimientos de izquierda hemos podido lograr la visibilización, hemos podido lograr algunas reivindicaciones en lo legislativo que no son vinculantes directamente con la comunidad pero que, de una manera global, permiten permear espacios en la sociedad venezolana y tener participación protagónica en la política de manera legal, para que nadie nos pueda decir, bien sea en el Consejo Comunal o en el Tribunal Supremo de Justicia, que no podemos estar ahí porque somos lesbianas o transexuales. No, tenemos una ley del Poder Popular que nos respalda”.
También reconoció avances y cambios en la sociedad venezolana. “Yo estoy aquí contigo hablando tranquilamente. En algún otro momento la gente pudo haberse burlado, se hubiese parado medio mundo a curiosear, y te diste cuenta de que la gente ni pendiente. Puedo salir agarrada de mano con mi novio por la calle a cualquier hora. Eso era motivo para ser burlada. Hoy no. Hoy hay espacios hasta institucionales. Antes, las transexuales éramos totalmente invisibles para la sociedad venezolana. Hoy día vemos más transexuales en la calle durante el día; antes éramos unas vampiras: solo en la noche. Esos avances han sido bien importantes en lo cultural. Por eso decimos que no nos conformamos con tan solo la tolerancia”.
“La transformación que queremos es cultural. Debemos limpiar nuestra mente de los estereotipos sobre lo que debe ser una mujer y lo que debe ser un hombre. Hacia allá es que apuntan las chicas transexuales. Los únicos trabajos que se nos ha permitido realizar son la estética o la prostitución. Pero seguiremos empujando. No es fácil la batalla, pero no es imposible”.