
Comparación del tamaño del USS Jason Dunham (DDG-109), de 160 metros de eslora, con un buque pesquero parecido al “Carmen Rosa”, de 21 metros de eslora. Origen de las imágenes: Turbosquid y AresaShipYard. Gráfico: Alba Ciudad (LBR)
La República Bolivariana de Venezuela denunció este sábado que el destructor misilístico USS Jason Dunham de la Marina estadounidense asaltó ilegalmente una embarcación pesquera venezolana en aguas jurisdiccionales del país caribeño, en lo que Caracas califica como una provocación destinada a generar tensiones en la región.
Texto: Telesur
El incidente ocurrió el viernes 12 de septiembre cuando el buque pesquero “Carmen Rosa”, tripulado por nueve pescadores atuneros, navegaba a 48 millas náuticas (89 kilómetros) al noreste de la Isla La Blanquilla, dentro de la Zona Económica Exclusiva (ZEE) venezolana.
Durante la comparecencia en la sede de la Cancillería venezolana, el ministro de Relaciones Exteriores Yván Gil detalló que marines estadounidenses fuertemente armados abordaron la embarcación pesquera de manera “hostil e ilegítima”.
“Dieciocho hombres armados con armas largas” procedentes del USS Jason Dunham (DDG-109), un destructor equipado con misiles de crucero, ocuparon la embarcación pesquera venezolana, según precisó el canciller Gil.

El USS Jason Dunham es un buque con 160 metros eslora y 20 metros de manga, con un desplazamiento de 9.300 toneladas. Cuenta con un cañón de 5 pulgadas y 4 cañones de 0,50 pulgadas, ametralladoras, capacidad para lanzamiento vertical de misiles Mk 41 de 32 celdas y 1 de 64 celdas (96 celdas en total). También tiene capacidad de lanzar misiles tierra-aire, misiles antibalísticos y misiles de crucero Tomahawk. Fue puesto en operación en 2010.
Las autoridades venezolanas difundieron imágenes captadas por los propios pescadores que muestran el momento del abordaje y la presencia del buque de guerra estadounidense en aguas bajo jurisdicción nacional.
Según el comunicado, la Armada Bolivariana mantuvo vigilancia constante durante todo el episodio, confirmó el titular de Exteriores. Gil subrayó que los hechos constituyen una violación flagrante del derecho internacional marítimo al producirse en territorio acuático venezolano.
El funcionario precisó que la embarcación “Carmen Rosa” es un barco palangrero (con un tipo de aparejo llamado palangre, utilizado en la pesca artesanal) autorizada por el Ministerio de Pesca venezolano para realizar faenas en el mar Caribe, lo que convierte la intercepción militar en un acto carente de justificación legal.
Gil advirtió que sectores del poder en Washington buscan provocar incidentes que justifiquen una escalada militar en el Caribe como parte de su “política fracasada de cambio de régimen” contra Venezuela. “Colocan a sus soldados y oficiales como carne de cañón”, denunció el canciller, quien comparó estos hechos con episodios históricos que derivaron en conflictos armados prolongados, como en Vietnam.
El incidente cobra particular relevancia al producirse en la ZEE venezolana, espacio marítimo donde el país ejerce derechos soberanos sobre recursos naturales hasta 200 millas náuticas desde su costa. La intercepción de la embarcación pesquera en estas aguas constituye, según el derecho internacional, una intromisión en la jurisdicción venezolana que requiere justificación bajo tratados específicos.

Foto publicada en redes sociales del acercamiento de la lancha proveniente del buque gringo, abordando el barco atunero venezolano.
Venezuela ha solicitado explicaciones formales sobre este episodio, mientras evalúa presentar la denuncia ante organismos internacionales correspondientes.




