La casa de los abuelos de La Candelaria, Caracas, conocida como el Comité de Adultos Mayores “La Alegría de La Candelaria”, en pleno corazón de la plaza, albergó a los participantes del Taller Interactivo Culo e’ Puya, a cargo de la profesora Yisel Mejicano.
Texto: Alfredo Tamayo / Foto: Bernardo Suárez
La actividad se enmarcó en la programación de los ejes comunitarios del Festival Mundial Viva Venezuela que se viene desarrollando también, desde las cercanías de las comunidades y organizaciones culturales de base que hacen vida en Caracas.
Mejicano empezó su ponencia con la indumentaria que utilizan tanto hombres como mujeres en el baile del tambor llamado “Culo e’ Puya”, y sus códigos particulares que usan los que bailan este tipo de música Afrovenezolana que tiene diferencias con otros ritmos.
El Tambor Culo e’ Puya se baila en la casa de la cultura y el tambor Mina se baila en la calle, la razón es porque el primero es más reservado por sus técnicas y pasos de bailes, mientras que el segundo, es más popular, más conocido y su repique es más abierto para los turistas y visitantes, explicó durante su ponencia.
“El tambor es para personas muy alegres”, comentó Yisel Mejicano, lo que lleva una predisposición para los que bailan, lo cual deben tener previamente un buen estado anímico.
Asimismo, la ocasión fue escenario para mostrar las agrupaciones de la Casa de Los Abuelos Juana la Avanzadora y Cuero y Tambor.
Un patrimonio viviente de El Callao en La Candelaria
Yarlet Villegas, profesora del club de abuelos Juana la Avanzadora de Sarria, coordinó la presentación de una muestra de Calipso, ya que entre sus integrantes se encuentra desde hace años, una de las Madamas de El Callao apodada La Nena Carmen.
Villegas resaltó que ante todo hay un trabajo de investigación para conocer la manifestación del Calipso y sus Madamas y luego, un trabajo de mostrarlo a todas las generaciones para preservar la tradición.
La representación de las Madamas de El Callao evocan la alegría del carnaval del estado Bolívar. En las pausas de los bailes de calipso explicaron cómo es la indumentaria de los vistosos y coloridos trajes de las Madamas, pero su alegría contagiosa hizo que vecinos cercano se acercaran a bailar este ritmo guayanés.
Tambores para sanar el cuerpo y el alma
Miguel Ilarraza, de la agrupación Cuero y Tambor, por su parte, nos habló de la significación de este tipo de actividades para los adultos mayores como algo sanador para su cuerpo y alma.
“La música es algo sanador y en el caso de ellos la música es una actividad que les sirve para sanar.” La agrupación Cuero y Tambor hace su debut en el marco de este Festival Mundial poniendo de relieve la música de raíces africanas que son patrimonio cultural venezolano hoy en día.
