Esta estrategia, originalmente ideada por Jeremy Bentham, filósofo Inglés, en 1800, está basada en el mecanismo de recompensa y castigo, como un sistema motivacional para mejorar la productividad en el trabajo. Evitar el dolor, haciendo lo que se requiere bajo amenaza, para encontrar “la satisfacción en un supuesto alivio”, por evitación.
Fuente: invcastillo2011 en Instagram
Este mecanismo originalmente se utilizó para inducir a un burro a transportar carga, bajo la amenaza de un garrote, pero viendo colgar frente a él una zanahoria que lo movilizara, como forma de alivio, al evitar el golpe. Esto ha funcionado muy bien en el entrenamiento y la emisión de conductas requeridas, en organismos sub-humanos.
Se extendió con más fracasos que éxitos a la organización científica del trabajo. Formó parte de la cultura empresarial autoritaria y paternalista propia de la revolución industrial, que quiso manejar al trabajador manipulando las emociones basicas: El miedo, el dolor, para mejorar la productividad.
Logró ciertos éxitos, hasta que se topó con la racionalidad del trabajador, que comenzó a asimilar las teorías marxistas de la explotación del trabajador, la extracción de la plusvalía, la conciencia de clase; y su efecto detonador para romper con ese esquema simplista, que pretendía tratar al trabajador como un burro de carga. También se extendió su aplicación al campo de la política, sobre todo en el marco de la Doctrina Monroe, que pretendía, reservar toda la América para los americanos, pero solo los del norte, dentro de la tesis del Presidente James Monroe, que advertía a los europeos, en particular a Inglaterra, que no metiera sus garras imperiales en lo que consideraba su patio trasero, América Latina, reservada, solo a las garras, del imperio del norte.
EE.UU, consideraba a América Latina, como su burro con carreta y todo, que debía garantizar al norte, toda la carga de riquezas que requiriera para su desarrollo.
La famosa tesis del centro (el norte desarrollado) y la periferia (el sur sub-desarrollado), que debía colocarse bajo una relación de sujecion, estar a su servicio; y ser el gran proveedor de riquezas, materia primas, que pudieran garantizar su hegemonia. Se trataba de la época de oro del pensamiento unico, que comenzó a desdibujarse con las guerras de liberación, de todo el S. XX, la autodeterminación de los pueblos, su determinación a ser libres, independientes y soberanos; y dueños de sus propias riquezas.
Hoy de nuevo, con la llegada del supremacismo blanco y su expresión viva, Donald Trump, al gobierno de EE.UU. se desempolva la Doctrina Monroe, y su estrategia de aplicación: la tesis del palo y la zanahoria, que se caricaturiza hoy con la zanahoria, representada por una supuesta ayuda humanitaria a un país irredento, que sólo requiere que lo dejen ser libre y desarrollarse a partir de sus fuerzas productivas aprovechando sus propias riquezas, o exponerse al garrote moderno. La guerra Imperial globalizada multiforme. La unidad Imperial, contra la unidad de los pueblos. Es necesario desarrollar la lucha globalizada de los pueblos, contra la unidad globalizada del imperio. No han podido ni podrán con Venezuela. La propia zanahoria empuñada por los pueblos servirá como garrote para derrotar al imperio. A eso le temen al desarrollo, independiente, soberano y sustentable de los pueblos. HANDS OFF VENEZUELA!
SOLUCIÓN inmediata a nuestros padecimientos en Venezuela: NO HAY: alimentos, GASOLINA, medicinas y equipos médicos, electricidad, agua, libertad a presos políticos ya suman 470. Hoy presenciamos el colapso del mercado petrolero y nos encuentra sin reservas porque la dictadura se las robó, . Aniquilaron el Fondo de Estabilización Macroeconómica, La piedra de tranca es la presencia del usurpador extranjero con sus cuarenta ladrones ocupando a Miraflores.