El homicidio de un joven manifestante de la oposición ha conmovido al país: Juan Pablo Pernalete Llovera de 20 años falleció tras recibir un fuerte impacto en el tórax, durante los hechos de violencia promovidos por la oposición venezolana el día 26 de abril en las inmediaciones de la Torre Británica, ubicada en Altamira, municipio Chacao del estado Miranda. Larissa Costas, moderadora del programa A un Click, a través de su blog, ha hecho un importante resumen de lo que se conoce hasta ahora.
Texto: Larissa Costas
Pernalete fue trasladado a un centro asistencial en Chacao. Ingresó a las 3:00 de la tarde, sin signos vitales, con un hematoma en el pectoral izquierdo. Al centro de salud asistieron funcionarios del Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas (CICPC), sin embargo, es importante destacar que la autopsia del joven fue efectuada por la Jefa de la unidad de patología del Ministerio Público, la Doctora Elizabeth Pelay.
Durante la autopsia no hubo ninguna intervención del CICPC, ni expertos del Servicio Nacional de Medicina y Ciencias Forenses (Senamecf).
Políticos opositores y medios de comunicación difundieron que la causa de la muerte habría sido originada por el impacto de una “bomba lacrimógena”.
El diario Últimas Noticias informó que de manera preliminar concluyen que el muchacho presenta un tatuaje (herida) en la tetilla izquierda similar al que deja “una pistola de perno cautiva”, explicó una fuente judicial. El muchacho recibió el impacto a quemarropa. “Un golpe seco que no dejó una gran herida porque el arma usada no tiene bala; el perno salió y retorno”.
En este trabajo especial que va en la dirección inversa a la que usualmente trabajamos (usualmente se estrena el click por VTV y posteriormente difundimos la investigación por internet). Con esta investigación, ofrecemos los elementos expuestos por las tesis encontradas sobre el homicidio de Juan Carlos Pernalete.
La hipótesis de la lacrimógena
Los artificios lacrimógenos son un tipo de arma no letal, en el que se emplea un producto químico de baja toxicidadusualmente utilizado en funciones de control de orden público. Los artificios lacrimógenos utilizados en Venezuela cumplen con los parámetros y disposiciones de la ONU para tales fines. Los países proveedores de estos artefactos a Venezuela son China, Brasil y España.
Las características generales son las siguientes:
En su forma pura, el CS es un polvo blanco, cristalino, similar al talco. Se lo clasifica como agente irritante y lacrimógeno. Se compone de partículas sólidas. Debe ser arrojado al aire. El olor es áspero y picante, similar al jengibre. El CS es más irritante en un clima húmedo y sobre la piel húmeda. Las partículas diseminadas se adhieren a la persona, a las ropas, a los objetos por largos períodos de tiempo.
Los efectos son:
- Intensa sensación de quemazón en los ojos
- Lagrimeo abundante y cierre involuntario de los ojos
- Tos y dificultad para respirar
- Goteo nasal
- Sensación de quemazón en zonas húmedas del cuerpo: cara, axilas, ingle
- Los efectos perduran por un espacio de 10 a 15 minutos después de alejarse de la zona de lanzamiento.
La principal característica de los artificios lacrimógenos es la emisión de un gas de color blanco.
El periodista Marcos G. Morin difundió en su cuenta Instagram el video de los últimos momentos de vida del joven Juan Carlos Pernalete. Posteriormente su publicación fue difundida por el portal web El Nacional, lo que generó una distribución eficiente de la noticia.
El humo oscuro no corresponde con las características de la lacrimógena. En las cercanías al recorrido realizado por Pernalete y sus acompañantes, no hay señales del gas característico. Si hubiese sido impactado por una de estas cápsulas, el gas blanco se habría dispersado y se observaría en el video.
El humo que se observa al fondo del primer video es el de una barricada opositora que se divisa con mayor precisión en un segundo audiovisual realizado por el mismo reportero a las 3 de la tarde de ese día, aproximadamente una hora después del momento en el que resultó herido Pernalete.
Los videos de este periodista no sólo fueron seleccionados por su privilegiada posición en el momento y lugar de los acontecimientos sino por su posición política: es un antichavista declarado y confeso.
Ambos videos denotan que en la zona no había ni un efectivo de la Guardia Nacional Bolivariana. No existen enfrentamientos en ese lugar. Se trata de una zona de distensión para la oposición, dominada por ellos.
Ese día se registraron enfrentamientos entre la Guardia Nacional y los opositores a unos cuantos metros de esa zona, en la avenida paralela que lleva por nombre Sur Altamira, según podemos ver en el mapa que incluimos a continuación:
Aquí un mapa interactivo en el cual se observan los últimos minutos de vida del joven Juan Carlos Pernalete https://t.co/RNzgj93khL
— Érika Ortega Sanoja (@ErikaOSanoja) April 29, 2017
Otros cuestionamientos en torno a la posibilidad de que Juan Carlos Pernalete hubiese sido asesinado por un artificio lacrimógeno implican las siguientes consideraciones:
- En la zona en la que se observa transitar a Pernalete ningún medio de comunicación registró imágenes de enfrentamientos de grupos de choque opositores con la GNB. En cambio si existen videos en la avenida paralela y en la Autopista Francisco Fajardo.
- Para que un Guardia Nacional fuese el homicida de Pernalete, primero habría tenido que aislarse de su grupo.
- Supongamos que eso hubiese ocurrido: ¿no habría sido capturado por los opositores?.
En otras ocasiones, en esa urbanización, efectivos de la Guardia Nacional Bolivariana o de la Policía- aislados de sus grupos- han sido golpeados, sus motos robadas, atacados con armamentos improvisados como bombas molotov y hasta les han disparado con armas de fuego como ocurrió ese mismo día a escasos metros.
Un poco más hacia el sur, en la Autopista Francisco Fajardo, dos guardias resultaron impactados por armas de fuego de los “manifestantes”: uno de ellos resultó herido en la ingle y el otro fue protegido por el chaleco antibalas.
Veamos el siguiente video de Boris Castellanos registrado hace pocos días en el mismo sector en el que se efectuó el enfrentamiento entre la Guardia Nacional Bolivariana y los grupos de choque de la oposición:
En el año 2015, el alcalde del Municipio Chacao, opositor y militante de Primero Justicia, condenó las llamadas “guarimbas” (actos vandálicos y terroristas ejecutados con intenciones insurreccionales para atentar contra los poderes constituidos del Estado). En esa ocasión, acusó a los “guarimberos” de utilizar como “escudos humanos” a los vecinos de Chacao:
Volvamos al análisis del primer video.
En el video escuchamos el siguiente diálogo:
- ¿Le dieron?
- No, no
- ¿Le dieron, le dieron? Mira, llévatelo ahí, llévatelo ahí
- Llévatelo.
El joven Pernalete viene caminando, desde la barricada oposición (dirección sur-norte), con síntomas que parecen indicar dificultad para respirar, posiblemente originada por la combustión de objetos en la barricada opositora que estaba a pocos metros.
Observemos el comportamiento de la víctima: Juan Carlos Pernalete caminaba erguido hasta que acuden a su rescate. En el momento en el que se une al grupo un encapuchado con camisa naranja, su postura corporal se modifica y lo vemos encorvarse. Otro hecho, igualmente significativo es que, a partir de entonces, Juan Carlos Pernalete lleva sus manos hacia la zona en la que recibió la herida letal.
Inmediatamente después, los “rescatistas” de Pernalete, intercambian un objeto imposible de distinguir en el video. Tomamos cuadro a cuadro el original, lo ampliamos e iluminamos.
Ante la cámara, logramos observar el rostro de uno de los jóvenes que acompañan a Pernalete, medio cubierto con una máscara antigás. Venezuela, con plena vigencia de su estado de derecho y de justicia garantiza la presunción de inocencia de estos jóvenes, sin embargo, es imprescindible que se ofrezcan su testimonio para el esclarecimiento de tan abominable crimen.
Este es el joven que conduce a Pernalete a lo largo del trayecto. También es el primero en abandonarlo. En menos de 15 segundos es indetectable para las cámaras. Se retira hacia el norte, donde se ubica la Plaza Altamira. El otro joven, de camisa naranja, se dirige hacia la barricada ubicada al sureste.
De acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO, por sus siglas en inglés), el perno consiste en una pistola que dispara un cartucho de fogueo, empujando un pequeño perno metálico por el cañón. Puede o bien lesionar el cerebro por perforación o producir una masiva lesión cerebral por medio de un golpe que fractura el cráneo, incrementando la presión intracraneal, produciendo edema y hematoma cerebrales.
Cada modelo cuenta con un calibre propio que varía de acuerdo a las estimaciones de los fabricantes. Hay dos variantes de esta pistola: una de ellas penetra y la otra produce un golpe seco. Una cuenta con una manija y un gatillo, mientras que la otra tan sólo es un cañón que se tiene en la mano. Para usarlo, se coloca contra el cráneo, lo cual hace disparar el cartucho.
Otro tipo de perno tiene un extremo plano y en forma de hongo.
“Mediante un fuerte golpe al cráneo, se logra la pérdida del conocimiento del animal. El cerebro en sí no se penetra. Ya que el animal no está muerto, es un método aceptable en muchos países para el sacrificio ritual del halal. Cuando se utiliza el perno cautivo, la pistola se coloca en un punto exacto de la cabeza del animal,” indica la FAO.
Este tipo de armas es relativamente fácil de adquirir. En internet se pueden encontrar diferentes tipos de proveedores y de modelos de pistola de perno cautivo tanto penetrantes como no penetrantes. La diferencia es crucial, por el tipo de lesión que produce.
En otros países, la medicina forense ha registrado homicidios y suicidios con este tipo de armamento. Disponible en internet hallamos un artículo de una revista forense en el que se analiza un homicidio (Homicide) efectuado por una pistola de perno penetrante (este modelo si origina orificio de penetración). También, en una revista de medicina forense española en línea encontramos algunos análisis sobre el uso de esta arma con fines criminales. En ésta última, se establecen ciertas diferencias con las lesiones producidas sobre huesos duros (como el cráneo) con tejidos blandos exocraneales.
La lesión que se produjo en Juan Carlos Pernalete fue tan severa que, a pesar de contar con una contextura física atlética, le fracturó una costilla.
Somos muy críticos al momento de exponer el cuerpo de personas fallecidas. Transgredimos nuestras propias normas bajo la consideración de un caso sensible para el país.
Se conoce por la imagen que la muerte de Juan Carlos Pernalete debió originarse poco después de que se hubiese producido la herida. Al detenerse el flujo sanguíneo, el hematoma producido por el fuerte golpe es pequeño. Tampoco se observan síntomas de un edema significativo.
Para efectos de este análisis, los expertos han indicado que la lesión fue realizada de abajo hacia arriba, es decir, el homicida debió “agacharse” para generar la herida. ¿Si hubiese sido un guardia Nacional, estaba de rodillas?. Al no tener aletas estabilizadoras, las lacrimógenas no describen una trayectoria recta cuando son lanzadas: ¿dónde estaba Pernalete ubicado? ¿dónde su homicida? Otra serie de las preguntas que quedan abiertas para la investigación de las autoridades.
Se ha dicho que de haber ocurrido una lesión con pistola de perno cautiva, la misma sería más reducida, pero lo cierto es que existen pistolas de perno cautivo no penetrante que pueden originar un impacto de hasta 4 centímetros.
La medicina forense mediática
El año 2002 estuvo lleno de conmociones para los venezolanos. En el mes de abril, una confabulación de la oligarquía venezolana, militares de alto rango y políticos de oposición ejecutaron un golpe de Estado. Un medio de comunicación internacional CNN fue enterado de la asonada varias horas antes de que esta ocurriera y eligió el silencio. En la grabación, realizada por el periodista Otto Neustald, los militares golpistas hablaban de “varios muertos” en la ciudad capital mucho antes de que se produjera el primer caído.
Aquellos que planificaron la masacre, a los pocos meses se atrincheraron en la Plaza Altamira, a muy pocos metros del lugar donde fue asesinado el 26 de abril Juan Carlos Pernalete.
En el mes de diciembre, Joao de Gouveia llegó de Portugal. Había estado de visita por unos 15 días. Pernoctaba en el centro de la ciudad. Su pistola, que había guardado en el Waraira Repano -según relata Germán Sánchez Otero en “La nube negra”- fue desenterrada. Completó su letalidad añadiendo dos cajas de balas tipo Hollowpoint, compradas en la Armería Armaros de Parque Central.
Según Ernesto Navarro escribe en RT, el homicida “se tiñó de rojo el cabello, también las cejas, fue al cine y cuando llegó a la plaza Altamira se detuvo en una esquina, “allí comienza a sentirse exaltado y le surgen unas alucinaciones”
Mató a tres personas (Keyla Guerra, de 17 años, Josefina Inciarte y al profesor Jaime Giraud Rodríguez). Por lo menos 29 resultaron heridas.
A través del canal de noticias Globovisión se difundió la fotografía de una persona parecida a Gouveia al lado de Freddy Bernal, el entonces Alcalde de la ciudad de Caracas, y militante del Partido Político MVR. La hipótesis mediática se forjó lo suficiente como para hacer creer a la oposición de que Gouveia se trataba de un sicario al servicio de los políticos del chavismo. La Fiscal Theresly Malavé ordenó una experticia antropométrica para determinar si Gouveia era la persona que aparecía al lado de Freddy Bernal. El resultado fue negativo. Los medios mintieron. Los medios fueron juez y parte.
Hace aproximadamente cinco años, el comunicador popular Oswaldo Rivero, entrevistó a Joao de Gouveia en prisión. En su testimonio aseguró:
“Estoy pagando un delito que es de un canal de TV, que es Globovisión. Provocaron una tragedia. Me estaban secuestrando en mi residencia, hipnotizado. Fueron para la residencia, donde yo estaba viviendo, hablaron con el encargado de la residencia, luego esperaron que fuera en la noche a dormir para luego secuestrarme hipnotizado”
De Gouveia fue condenado a 29 años y 11 meses de prisión. La condena máxima en Venezuela es de 30 años.
Este es sólo un ejemplo de cómo la medicina forense mediática está determinada por la percepción política que ellos desean implantar en la población. Nosotros nos unimos a la exigencia de un país que clama por justicia, tanto para Juan Carlos Pernalete como para las otras 28 víctimas de la violencia fascista en Venezuela durante este año.
[…] abril Larissa Costa publicó una investigación sobre la muerte de Pernalete en la página web de Alba Ciudad 96.3 FM. En el texto se plantean aspectos como que no habían guardias en el lugar; que el humo que se […]
¿vas a corregir esto con la información de la fiscalía o vas a seguir insistiendo en teorías conspirativas que lo que traen es más odio y violencia?
[…] de la autopsia, se fundamenta un reportaje de Larissa Costa publicado en la página web de Alba Ciudad 96.3 FM el 30 de abril. En el texto se plantean aspectos como: que no habían guaridas en el lugar, que el […]