El macrismo en Argentina aplicó la misma modalidad en diferentes dependencias del Estado, sin aviso y con una lista en la puerta se prohibió el ingreso de miles de trabajadores. Diferentes medios argentinos reflejan el testimonio de quienes padecieron ese traumático momento en la Casa de Gobierno, el Ministerio de Cultura, la Jefatura de Gabinete y Fabricaciones Militares.
Fuente: Diario Z y El Destape / Fotos: Carlos Brigo
Una penosa imagen se repite este verano en Argentina: trabajadores estatales que llegan a sus puestos laborales y son interceptados por uniformados de empresas de seguridad privada que preguntan apellido y nombre desde atrás de la puerta. Si figuran en las listas que confeccionó el gobierno de Mauricio Macri, simplemente se quedan afuera y no entran.
De esa forma, desde “Cambiemos” notifican los despidos en el Estado. Casi 500 trabajadores del Ministerio de Cultura de la Nación argentina, a quienes vecinos de Recoleta tiraron huevos y hielos cuando cortaron Callao y Alvear, fueron víctimas de ese atropello.
Desde ATE (Asociación de Trabajadores del Estado), ya contabilizan 15 mil despidos entre Nación, provincias y municipios. El achicamiento estatal incluyó el pasado viernes 105 despidos en Jefatura de Gabinete, 54 en la Secretaría General de la Presidencia y 12 en el Museo Malvinas que funciona en la ex ESMA (Escuela de Mecánica de la Armada).
Fabiana Almeida, la coordinadora del programa de Derechos Humanos del Ministerio de Cultura de la Nación, en Argentina, relató cómo sus compañeros enteraron que fueron echados en la puerta de la sede de la Dirección de de Artes Visuales, en Alsina 1169. “Estaban cerradas las puertas con candado. Dos personas de seguridad, que nos conocen, llorando y angustiados dijeron ‘tenemos que dar la noticia nosotros y no dejar pasar a los que están en este listado'”, relató Almeida.
A su vez, contó su sensación al ver el listado y rememoró lo que ocurría durante la última dictadura cívico militar que vivió el país, en la cual su hermano fue detenido y posteriormente desaparecido. “Mi sensación fue de que otra vez están las listas negras que no te dejaban entrar a los trabajos y después los chupaban las mismas personas de los trabajos”, detalló. “Esto es una dictadura democrática y van por todos”, cerró.
Dos trabajadoras que se desarrollaban desde hace tres años fueron echadas y contaron cómo vivieron el momento en que eran notificadas de la medida. Ambas se desempeñaban en distintos programas del Ministerio, entre ellos “Café Cultura”, que organiza charlas en todo el país garantizando un acceso democrático a la cultura.
– El mensaje de Analía Fernández Fuks, de amplia trayectoria en diferentes radios de Argentina, egresada de la educación publica, es especialista en comunicación y publicó varios textos de poesía.
– Rocío Cervera Novo, una joven trabajadora del área de Cultura y al mismo tiempo estudiante de dos carreras en simultaneo (Comunicación Social en la Universidad de Buenos Aires, y Radio en la reconocida Escuela ETER), contó: “Hoy llegue a mi lugar de trabajo en el Ministerio de Cultura de la Nación y con lágrimas en los ojos la señora de seguridad me dijo “perdóname Rocío. No te puedo dejar pasar porque estas en la lista”.
– El testimonio del periodista y delegado de ATE, Manuel Cullen: