El escritor venezolano, Luis Britto García, reiteró este sábado que la “guerra es la continuación de la economía, por otros medios”, refiriéndose a la guerra económica que sectores de derecha promueven en el país, causando problemas de desabastecimiento y escasez de algunos rubros. Durante una entrevista en el programa TV Foro, transmitido por Venezolana de Televisión, Britto desarrolló los elementos que componen el sabotaje económico y su propósito desestabilizador, para frenar el avance de la revolución.
Texto: AVN
El escritor señaló que desde el año pasado ha recibido denuncias de “Bachaqueo”, mecanismo de contrabando de extracción masivo de alimentos de Venezuela a Colombia, explicó. “Compran alimentos subsidiados por el gobierno venezolano y lo pasan de contrabando, es un doble negocio y así desabastecen a Venezuela”, dijo.
Asimismo, consideró que los “raspatarjetas” y “vendecupo” contribuyen a aumentar el efecto de la guerra económica, pues los dolares asignados para remesas y viajeros son vendidos en el mercado paralelo. Lo mismo sucede con empresarios que venden productos a precio de dolar paralelo, cuando han sido obtenidos por las vías que posee el Estado. “Es un negocio magnifico: yo obtengo del estado dolares al precio oficial y entonces después te los vendo al precio del dolar paralelo, diez veces mayor”, añadió.
Otra modalidad, señaló Britto, presente en el sabotaje económico es el “corralito bancario”, término que nació en Argentina, y es utilizado para referirse a la restricción sobre la disposición de dinero en efectivo proveniente de cuentas bancarias.
“El día del golpe, en el 2002, uno iba al banco y solo te dejaban retirar una cantidad mínima, la banca impuso un corralito bancario, eso no se ha comentado mayormente”, acotó.
Sentencias de arbitrajes internacionales que obligan a pagar altos montos y la ruptura de un tubo que provocó el año pasado el estallido en la refinería de Amuay, deacuerdo con Britto, forman parte de un plan “macabro y premeditado”.
“Se han vuelto a realizar asaltos en el metro, una de las principales vías de comunicación del pueblo. Sabotajes eléctricos; nada más fácil que sabotear las líneas de corriente, porque eso viene desde el Guri y es muy difícil vigilar toda la extensión”, puntualizó el escritor.
Por otro lado, repudió el manejo de la información realizado por los medios privados de comunicación. “Los medios profetizan que va a desaparecer algún producto y por sorpresa el producto si escasea, está escondido y además un tiempo después reaparece. Es una especie de juego de pánico, cuando el pueblo considera que no va a conseguir alimentos que considera esenciales reacciona con nerviosidad y pesimismo”, explicó.
Finalmente, estima “imposible” que en un país que registra 40 mil viajeros en el aeropuerto en un día y llena eventos “frívolos” que tienen un alto costo, tenga una crisis económica.
“La inflación y especulación se generan por la negativa del sector privado de cumplir la ley”
Para Britto, la inflación y la especulación son producto de la negativa de las empresas privadas de cumplir con las políticas implementadas por el Gobierno Nacional para proteger la economía del pueblo venezolano. En este sentido, denunció que el acaparamiento, la especulación y el remarcaje de precios por parte de algunos comerciantes permite “crear constantemente una escasez temporal”.
Agregó que de continuar esta agresión sistemática contra el pueblo venezolano “una de las salidas sería que el Estado Venezolano asuma el control directo de las importaciones de bienes de primera necesidad en defensa del pueblo y asumir un conjunto de tareas en el que el sector privado actúe bajo el rol que le corresponde dentro de una economía mixta”.
“Si una de las partes no está dentro de las reglas del juego previamente convenidas, llega el momento de cortar las relaciones y asumir esas funciones”, sentenció. Britto manifestó que “en el caso extremo de que sea irreductible la actividad desestabilizadora del sector privado será necesario asumir sus funciones” y fortalecer el sistema jurídico del país para sancionar “con todas las de la ley” a quienes violen las normativas establecidas y arriesguen la economía y el acceso a los bienes de primera necesidad al pueblo venezolano.
Agregó que para hacer frente a la guerra económica el Gobierno Nacional debe continuar fortaleciendo y profundizando en la ampliación de las redes de distribución de los bienes, alimentos y servicios de primera necesidad.
Britto destacó la importancia de controlar el contrabando de extracción de gasolina, el uso correcto de divisas tanto a empresarios como a personas naturales y las importaciones, entre otras medidas para contrarrestar la guerra económica que emprenden los sectores antichvistas del país. Resaltó la importancia del poder popular organizado como copartícipe del Órgano Superior para la defensa popular de la economía, creado recientemente por el Presidente de la República, Nicolás Maduro, “como verdadero poder del Estado venezolano”.
Concluyó que la guerra económica que emprende la derecha del país “sólo busca destruir las mejoras y el bienestar que ha alcanzado el pueblo en Revolución”.