El pasado jueves en la recién recuperada Casa de la Cultura Tito Salas, en Petare, municipio Sucre del estado Miranda, el presidente de la Corporación de Desarrollo de la Cuenca del Río Tuy Francisco de Miranda (Corpomiranda), y ministro del Poder Popular para las Comunas, Elías Jaua, entregó 30 certificados a jóvenes de diferentes estados del país para la recuperación de canchas, gimnasios y construcción de espacios deportivos para la paz, con la finalidad de promover el deporte, la cultura y la sana recreación en sus sectores. En este lugar también se realizó el Foro Permanente de Pensamiento y Acción, con la presencia del ministro para la Cultura, Reinaldo Iturriza, y con vecinos de los diferentes sectores de la localidad, teniendo como objetivo profundizar el debate ideológico que se desarrolla en el país.
Texto: Ciudad Petare (Sandy Barreto) y Prensa MPPC (Roxana Parra)
Fotos: Prensa MPPC (Oscar Arria)
Durante el Foro Permanente de Pensamiento y Acción, actividad realizada por el Ministerio del Poder Popular para la Cultura, Jaua, Reinaldo Iturriza y los demás ponentes debatieron la fecha histórica del Caracazo.
El ministro del Poder Popular para la Cultura, Reinaldo Iturriza, quien inició el foro, presentó a los integrantes de los exponentes participantes y un resumen de la jornada anterior.
El 27 de Febrero de 1989, los barrios de Caracas decidieron que, en adelante, su voz ya no podía ser ignorada. Esa mañana la movilización comenzó en Guarenas, estado Miranda, pero no tardaron los pobladores de zonas populares como Catia, El Valle, Coche y Antímano en tomar el control de las calles. Las protestas comenzaron de forma pacífica, pero se tornaron cada vez más violentas ante los enfrentamientos con los cuerpos de seguridad.
Ya en horas de la tarde de ese mismo día, casi todos los barrios y urbanizaciones de Caracas se habían levantado, la santamaría de los negocios bajado, y los transportes públicos paralizado. Las protestas continuaron los días posteriores. Y hoy, 26 años después, el pueblo venezolano recuerda esa fecha, bien sea como una tragedia, un espanto de la cuarta o una locura popular. En todo caso, el 27 de Febrero de 1989 se da una importantísima movilización que causó gran impacto en la sociedad.
Es por ello, por ese gran efecto causado socialmente, que El Caracazo fue elegido como momento histórico a discutir para cerrar la segunda parte del Foro Permanente de Pensamiento y Acción, donde se resaltó “la importancia de la movilización popular y su relación con acontecimientos que han ocurrido en el proceso político de Venezuela, específicamente el 27 de febrero”.
Activistas recuerdan los hechos
Como activista política de La Vega y militante del Movimiento de Pobladores, se presentó Mariela Machado, quien pertenece al Campamento de Pioneros Kaika-Shi. En la mesa, la acompañó Gustavo Menoni, activista político del barrio 23 de Enero. Junto a ellos estuvo Oscar León, historiador del Centro Nacional de Historia, y el vicepresidente del Gobierno para el Desarrollo del Socialismo Territorial, Elías Jaua.
En el debate se destacó la necesidad de transformar la imagen de El Caracazo. León, como historiador, propuso “sacar un poco el tema de lo anecdótico. Es muy importante y, también, una tragedia terrible, pero la misma tragedia nos transporta algo más. La situación va más allá de lo local, de la situación del barrio, de lo que sucede en Venezuela. Es la puerta de entrada a nuestra propia historia como pueblo, es el encuentro con nuestra memoria histórica que se remonta, a lo menos, a los tiempos de la Independencia”.
Y es que pensar en El Caracazo como un levantamiento, ya no como una tragedia, es desvincularlo de la sola idea de conmemoración para representarlo, exactamente, como el hecho histórico que empezó a forjar una revolución en Venezuela. El Caracazo fue el primer paso, el primer golpe transformador que dieron venezolanas y venezolanos para expresar que ya no soportaban y, en definitiva, no aceptarían un sistema neoliberal.
Entonces, mientras en Europa sucedía la caída del Muro de Berlín y, junto a ella, una baja para el sistema socialista, celebrado en el norte de América con el Pacto de Washington y los Acuerdos de Libre Comercio; en Venezuela, casi de contragolpe, se levantaba el pueblo “bajando del barrio”, es decir, la sociedad tomaba conciencia y, con la conciencia, las calles para hacer escuchar su voz, señaló Oscar León.
Por ello, insistió León, es importante no quedarse en las dimensiones locales, en el tiempo presente y en el espacio únicamente venezolano, sino mirar más allá de la representación, como un movimiento geopolítico que no sólo transformó al pueblo venezolano, sino que trascendió sus límites para darle un fuerte golpe, a nivel internacional, a todo el sistema.
“Los europeos están luchando, sufriendo y rechazando aquello por lo que los venezolanos estuvieron luchando hace treinta años atrás. Lo que comenzó en El Caracazo no se quedó en El Caracazo, a la larga eso se convirtió en una revolución que rompió fronteras y que hoy día es nuestra Revolución Bolivariana”, destacó el historiador.
“La Revolución comienza ese 27 de febrero”, señaló el activista político Gustavo Menoni, “con la movilización del sector estudiantil desplegándose en todo el país, preparando un asalto político a la cuarta República, dando así pie a la primera lucha contra el neoliberalismo, incluso, antes que Europa”, explicó. Al tiempo que consideró El Caracazo como el momento de teorización de la Revolución, que luego fue llevada a la práctica el 4 de febrero de 1992, y que más adelante avanzó con la presidencia de Hugo Chávez.
En virtud de ello, se aplaudió también la participación de Mariela Machado, quien sirvió de ejemplo visible de lo que ha sido el producto de esa revolución. Con ideales de desalienación social, en conjunto a otro grupo de personas, participa en el órgano central de la Misión Vivienda; sólo que esta vez, desde su Campamento de Pioneros, realizan sin cámara de construcción, pero con asesoría técnica, diversas planificaciones y construcciones de urbanismos, a los que Machado se refiere como “no únicamente viviendas, sino transformaciones”.
Al respecto, Machado explicó: “No somos viviendistas, queremos ir más allá: a la construcción de hábitos, de alimentación, con una producción verdaderamente nacional y no dependiente de las trasnacionales. No hay razón para dejarnos asfixiar por empresas, cuando podemos hacerlo por nosotros y desde nosotros mismos”.
En la realización de los urbanismos participan hombres y mujeres, gente que cree en la transformación, sobre todo en la unión, y que participan en la movilización. Lo que resume Mariela es que el pueblo se construye desde el pueblo, y su desarrollo se da únicamente si se toma conciencia. Puede que sea un proceso fuerte, pues es un proceso cultural, pero es necesaria la participación consciente del pueblo para la construcción de una política que transforme conciencias y dé cimientos a una revolución aún más fuerte. “No hay transformación posible si no hay un pueblo consciente”, aseveró.
El ministro Reinaldo Iturriza aprovechó la oportunidad de hacer la invitación a los presentes a la tercera parte del Foro Permanente, en el cual el tema a debatir será la guerra del petróleo y contará, nuevamente, con la presencia de pioneras y pioneros del Campamento Kaika-Shi, quienes pusieron a disposición su sede para la realización de este evento.
Jaua expresó que estando “en vísperas de conmemoración de los 26 años de la rebelión popular, recordamos lo el Comandante Chávez indicó muchas veces, que esta fecha fue la partera del 4 de febrero de 1992, acontecimiento que marcó esa explosión popular y su posterior represión discriminada”.
Los asistentes recordaron el 27 de febrero como una fecha abrumadora e indigna, consecuencia de una problemática que durante años asechó la soberanía de un pueblo y también sus frustraciones e indignaciones”. Los asistentes expresaron sentirse orgullosos de este memorable momento de la historia y glorifican al 27 de Febrero como el día en el que el pueblo, sin dirección política alguna, logró la lucha contra el neoliberalismo mundial.
Certificados
El ministro para las Comunas entregó los certificados de financiamiento de los proyectos por el primer aniversario de Jóvenes del Barrio, por la cantidad de Bs. 50 millones.
Jaua indió que experiencias como éstas son posibles porque hay una Revolución que les facilita recursos, maquinarias, fuerza y factores de producción, por lo que recordó las enseñanzas del comandante Chávez cuando se refería al poder: “el poder es el significado exacto de la palabra: puedes o no puedes”.
Por su parte, la directora nacional de la Misión Jóvenes del Barrio, Lorena Fréitez, enfatizó que a nivel nacional son 600 mil barrios dentro del plan, con más de 40 mil jóvenes activos, distribuidos en 144 parroquias y 40 municipios.
Los proyectos a desarrollarse están clasificados en 30 proyectos sociales, 21 socioeconómicosy en el área deportiva, que cuentan con la certificación del Gobierno revolucionario.
“Los jóvenes son una victoria de la vida, de la paz, de lo humano; una victoria de Hugo Chávez porque apostó y confió siempre en el pueblo. Les digo que no desmayen en seguir ganando victorias, acumulando victorias”, expresó Jaua.
Anthony Linares, productor de la EPS de artículos deportivos Indio Catia, agradeció el apoyo brindado por la Misión para el impulso de esta empresa de propiedad social y envió un mensaje a los jóvenes de otros sectores populares para que sepan “que sí se puede construir, sí se puede hacer y se puede fabricar por nuestros propios medios para que Venezuela no deba depender del mercado capital”.
La fundación Cántaro Cermeño de la parroquia Petare también fue financiada para la recuperación del gimnasio que lleva el mismo nombre, a fin de garantizar la inclusión social de los jóvenes. Leonardo Padilla, vocero de la citada fundación, recordó que el motivo por el cual decidieron remodelar el gimnasio fue porque allí se formaron cuatro atletas olímpicos y dos campeones mundiales, como Antonio Cermeño y Carlitos Barreto, “El Gallo de Petare”
En la actividad no podía faltar la representación cultural juvenil, en la cual el colectivo Búfalo Hip Hop dio muestras de todo el talento que tienen los petareños y los integrantes del plan Jóvenes del Barrio.
Jaua también reiteró la convocatoria a los venezolanos para que el próximo sábado 28 de febrero se unan a la marcha, que tendrá como punto de ataque la Plaza Brión de Chacaíto.
Ante la afirmación de que un grupo de oposición tiene una actividad en el mismo sitio, Jaua recordó que “desde principios dela semana ya habíamos anunciado la partida de la marcha desde Chacaíto. La marcha fue convocada públicamente por el director de movilización del partido, Darío Vivas. La vamos a realizar de acuerdo a todos los permisos establecidos. Eso no es un sitio exclusivo de la oposición, por el contrario allí está uno de los símbolos de lucha contra el imperialismo, como es el prócer cubano José Martí, y por lo tanto también es espacio del pueblo antiimperialista”.
La marcha para conmemorar el Caracazo está convocada a las 9 de la mañana en la plaza Brión de Chacaíto, pasará por la avenida Solano, luego por la avenida Libertador y la avenida Urdaneta hasta llegar a Miraflores, donde culminará con una gran concentración en respaldo al Presidente Nicolás Maduro.