Bruno Manara, ilustrador e investigador ítalo-venezolano que dedicó gran parte de su vida al estudio de la flora y fauna de los parques nacionales venezolanos, especialmente del Waraira Repano, falleció en Caracas este martes 4 de septiembre. Autor de diversas obras en las que ilustró la vegetación y los animales que habitan en el cerro caraqueño, publicó libros de su entera autoría y también colaboró con sus dibujos en volúmenes en los que compartió los créditos con otros autores.
Texto: AVN
Monte Ávila Editores publicó dos de sus libros dedicados al Waraira: El Ávila. Biografía de una montaña (Colección 30 Aniversario, 1998), el cual se encuentra en proceso de reedición por el 50 aniversario de la casa editora; y Aves del Ávila (Colección Primera dimensión, 1998, 2004).
Así lo dio a conocer una nota de prensa de la editorial, que difundió la noticia del fallecimiento a través de su cuenta en la red Twitter.
Bruno Manara nació en Verona, Italia, en 1939. Llegó a Venezuela durante los años 50. Entre las destrezas que trajo consigo estaba la del dibujo, habilidad que con el tiempo le permitiría convertirse en uno de los mayores colaboradores del Instituto Botánico de Venezuela.
Su otra gran pasión estuvo representada por el mundo literario; se formó en Literatura en el Instituto Pedagógico de Caracas y estudió Letras en la Universidad Central de Venezuela. Se dedicó a la enseñanza de latín y griego bíblico en la Facultad de Filosofía y Teología de la Universidad Católica Andrés Bello. También se desempeñó como profesor de gramática castellana en el Instituto Venezolano de la Audición y el Lenguaje, reseñó el boletín difundido por Monte Ávila.
Además de dedicar al Ávila la mayor parte de su trabajo como ilustrador participó en el proyecto Flora of the Venezuela-Guayana, en Ciudad Bolívar, formando parte de un equipo de botánicos que editó nueve volúmenes en inglés sobre la vegetación de la región.
Otras publicaciones que forman parte de su legado son: Guía ilustrada del Jardín Botánico de Caracas (1995), Paria, en el tiempo y en el corazón. Guía para el turista ecológico (1996, 2014), El Ávila. Un museo viviente (2014), María Lionza: su identidad, su culto y su cosmovisión anexa (2015), Los siete mares, un ecosistema sustentable (2016), obras que se suman al acervo cultural de nuestro país y representan una valiosa fuente de consulta para investigadores del mundo entero.