Venezuela solicitó este jueves al Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas (CSNU, por sus siglas en inglés) que investigue las ejecuciones extrajudiciales que el Gobierno de Estados Unidos (EEUU) viene perpetrando en la región y determine su carácter ilegal. Así lo señaló el representante permanente de Venezuela en la ONU, Samuel Moncada.
Texto: Diario Vea
La solicitud es presentada luego del más reciente ataque «contra civiles que se encontraban a bordo de una pequeña embarcación en situación estacionaria en el mar Caribe, a escasas millas de las costas venezolanas», perpetrado el 14 de octubre, precisó Moncada.
Resaltó que, Venezuela también solicita al Consejo de Seguridad que sea confirmada la amenaza que representan estas acciones ilícitas para la preservación de la paz en la región de América de Latina y el Caribe, mencionando entre ellas las ejecuciones extrajudiciales, la concentración de fuerzas militares, la retórica belicista contra Venezuela, y las operaciones clandestinas de la CIA para cometer asesinatos políticos.
Como tercer punto, destacó, que también se exige a esta instancia de la ONU un pronunciamiento en el que reafirme el principio del respeto irrestricto a la soberanía, la independencia y la integridad territorial de Venezuela como base indispensable para preservar la paz.
27 personas fallecidas
Moncada señaló que entre las víctimas del ataque ejecutado el 14 de octubre, fueron identificados dos (2) humildes pecadores oriundos de Trinidad y Tobago.
“Sus familiares afirman que los asesinados estaban ejerciendo labores de pesca. Este acto es un capítulo más en la escalada de bombardeos ejecutados desde el mes de septiembre hasta la fecha contra embarcaciones civiles que transitan en aguas internacionales del mar Caribe”, expresó ante los medios.
Haciendo lectura de la carta que entregó al CSNU, precisó que «hasta ahora ha dejado un saldo de cinco (5) ataques ilegales y 27 personas fallecidas».
Asimismo, indicó que algunas de las víctimas han sido reconocidas por sus familiares y sus gobiernos como nacionales de Colombia y de Trinidad y Tobago. «Ese hecho lo enfatizamos porque indica que afecta a toda la región, no es un tema nada más venezolano», indicó.
Punto de máxima tensión
El embajador venezolano consideró que los recientes ataques en el mar Caribe suponen un punto de máxima tensión para la paz y la estabilidad de Venezuela «al observar las recientes declaraciones del presidente Trump que revela que el gobierno de los Estados Unidos de América está considerando lanzar ataques en tierra», medida que, recordó, es claramente contraria a las disposiciones del artículo 2.4 de la Carta de las Naciones Unidas relativo a la abstención del uso de la fuerza.
«A esta alarmante decisión debe sumársele las recientes declaraciones de la Casa Blanca, según la cual, el gobierno de Estados Unidos autorizó en secreto a la CIA a llevar acciones encubiertas en Venezuela. La nueva autorización permitiría a la CIA llevar a cabo operaciones letales en Venezuela y realizar operaciones en el Caribe», añadió.
Moncada resaltó que, tanto en América Latina como en otras partes del mundo, es ampliamente conocido el expediente tenebroso de la Agencia Central de Inteligencia (CIA) que incluye operaciones encubiertas destinadas a generar procesos de desestabilización, sabotaje, contrainsurgencia, planificación de golpes de Estado y magnicidio contra jefes de Estado y de gobierno con la finalidad de instalar sistemas políticos serviles a los intereses estadounidenses.
«Se trata de una gran operación de propaganda belicista que está en camino», advirtió Moncada.
Precisó que la agresión de ejecuta desde tres (3) puntos: «una operación de propaganda belicista, una escalada militar con grandes equipos militares acercándose a Venezuela, y una avanzada clandestina de inteligencia con licencia para matar, con el propósito de imponer un golpe de Estado en la República Bolivariana de Venezuela».