La Sala de Conciertos de la Universidad Central de Venezuela (UCV) recibió este miércoles a la Orquesta Típica Nacional con un nutrido repertorio de música de raíz tradicional venezolana.
Texto: Alfredo Tamayo / Fotos: Dirección Cultura UCV
La directora de cultura de la máxima casa de estudios, Morella Alvarado, dió la bienvenida a la orquesta y al público presente, así como el agradecimiento a las autoridades de la Fundación Compañía Nacional de Música, cuyo presidente, Ali Alejandro Primera, se encontraba presente entre los asistentes.
Durante su intervención, Primera destacó que “ha sido un año bastante complicado para el hecho artístico, sin embargo, nosotros en este momento tenemos la hermosura de que la maestra Yolanda Aranguren nos esté apoyando y que nos esté hermanando con las agrupaciones orquestales que hacen vida dentro de la Universidad Central de Venezuela, especialmente con la Estudiantina, y por supuesto, con nuestro patrimonio: el Orfeón Universitario”.
Por su parte, la directora invitada de la Orquesta Típica Nacional para esta ocasión, la profesora Yolanda Aranguren exaltó que para ella es un honor ser la directora invitada “de esta maravillosa Orquesta Típica Nacional, patrimonio artístico de la nación y de mis grandes y admirados compañeros, porque son unos extraordinarios músicos todos”.
Aranguren aprovechó la oportunidad para contar una historia poco conocida entre la Estudiantina Universitaria de la UCV, fundada por el maestro Teófilo León, que también fue fundador de la Orquesta Típica Nacional.
“Siempre se estableció un vínculo a través de la historia, porque los músicos que tocaban en la Estudiantina Universitaria, que a su vez tocaban en la Orquesta Típica Nacional, recomendaban a los mandolinistas de la Estudiantina para que conformaran la Orquesta Típica , porque tenían una gran formación”, refirió la directora de la orquesta.
Música con historia de todos los rincones del país
El repertorio de esta cita musical se inició con el vals Castro en Margarita de Vicente Cedeño, composición musical que tiene una anécdota que relató el profesor Jesús Torres.
Cedeño originalmente lo había compuesto para una dama de la isla que el pretendía conquistar, pero a ella no le gustaba ni el vals ni el pretendiente. Vicente Cedeño, decepcionado por el desaire, cuando el presidente Cipriano Castro visitó por primera vez la isla de Margarita y elogió el vals interpretado preguntándole a Cedeño cómo se llamaba, inmediatamente le cambió el nombre original y le dijo que se llama Castro en Margarita.
Con un aforo prácticamente lleno, el evento musical prosiguió con las piezas Fantasía Criolla de Luis Laguna, Cerezita de Luis Mariano Rivera Moliendo Café de Hugo Blanco, Golpe Tocuyano, el merengue Carmen de Balbino García y Pa’ Oriente Compai de Alberto Beto Valderrama.
Asimismo, se interpretó el pasodoble Caracas de Jhonny Quiroz quien murió en 2013 y fue popularizado por Alfredo Sadel con arreglo de Orlando Gámez. También se rindió tributo al maestro Teófilo León con la pieza Juramento a la cual le hizo un arreglo en 1955 que todavía guarda vigencia.
Para culminar esta velada musical vespertina, la Orquesta Típica Nacional de Venezuela interpretó Querellas de un campero con arreglo de Teófilo León y el AlmaLlanera de Pedro Elías Gutiérrez, canción la cual fue entonada por el público asistente en medio de ambiente de gran alegría.