El Presidente venezolano, Nicolás Maduro, recibió este sábado la primera dosis de la vacuna rusa Sputnik-V contra el COVID-19 desde el Palacio de Miraflores, ubicado en Caracas, luego de ser vacunado el personal de salud y otros sectores priorizados “Ya hemos vacunado al personal médico y como lo dije al pueblo le estoy cumpliendo. ¡Vamos a vacunarnos!”, manifestó el Jefe de Estado.
Texto: Prensa Presidencial
El Mandatario reafirmó su confianza con el antiviral ruso, cuya efectividad supera el 90% de acuerdo con un estudio publicado en la revista médica británica The Lancet. Además, Nicolás Maduro manifestó tener plena confianza por las vacunas desarrolladas también por países como China y Cuba.
En este contexto, reiteró que producto del bloqueo ilegal que mantiene el gobierno de los Estados Unidos sobre Venezuela se ha dificultado la adquisición de mayor cantidad de dosis anti COVID-19.
“Nos tienen secuestrado todo el dinero del mundo, hicimos un acuerdo con la Organización Panamericana de la Salud y la Organización Mundial de la Salud para que liberarán 300 millones del oro que nos tienen secuestrado en Inglaterra y no han hecho nada, pero vamos a garantizar todas las vacunas para el pueblo de Venezuela”, aseveró el Dignatario.
El proceso de inmunización fue sencillo. Maduro ofreció sus datos personales para completar la tarjeta de vacunación, luego ingresó a la sala donde se le colocaría la inyección y aguardó durante los 15 minutos reglamentarios para constatar que no existiesen efectos secundarios.
En la jornada, también se inmunizó la primera combatiente de la República, Cilia Flores.
Esta vacuna corresponde al lote de las 100.000 dosis arribadas el sábado 13 de marzo al Aeropuerto Internacional de Maiquetía «Simón Bolívar», de La Guaira, en una aeronave del Consorcio Venezolano de Industrias Aeronáuticas y Servicios Aéreos (Conviasa).
En 21 días, el Dignatario completará la inmunización con la segunda dosis del antígeno desarrollado por el Centro Nacional de Investigación de Epidemiología y Microbiología Gamaleya, situado en Moscú.
El proceso de vacunación que inició el 18 de febrero, está dirigido al personal de la primera línea de atención contra el COVID-19. Así pues, la médico cirujana Glendys Rivero se convirtió en la primera venezolana en recibir la vacuna rusa.
En diciembre pasado, Venezuela y Rusia acordaron la adquisición de 10 millones de dosis de la vacuna Sputnik-V.