Una imponente movilización acompañó este lunes los restos del líder revolucionario Fabricio Ojeda por las calles de Caracas, con el fin de llevarlo hasta el Panteón Nacional, donde el país resguarda a sus máximos héroes. La movilización partió desde el Cementerio General del Sur, pasó por Roca Tarpeya, la avenida Fuerzas Armadas, el Mercado de La Hoyada, la avenida Universidad; siguió por la avenida Baralt y las afueras de la sede del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), hasta llegar al Panteón, en el centro de Caracas.
Fotos: AVN (Ricardo Herdenez, Zurimar Campos, Gregorio Terán)
El Presidente Nicolás Maduro decretó el traslado del dirigente al Panteón, como un proceso de reivindicación hacia las batallas sociales que se libraron en Venezuela, primero contra la dictadura de Marcos Pérez Jiménez en 1958, y luego al desligarse Ojeda de su puesto en el Congreso Nacional, casi cuatro años después para unirse a la guerrilla. “Fabricio Ojeda encarna el espíritu del 23 de Enero y de la Juventud Patriota que luchó por nuestra Patria. Ejemplo de Lealtad Revolucionaria”, escribió el Presidente a través de las redes sociales.
El 20 de junio de 1966, Fabricio Ojeda fue capturado en La Guaira, hoy estado Vargas, por el Servicio de Inteligencia de las Fuerzas Armadas (Sifa). En extrañas circunstancias, a dos días de su aprehensión, apareció asesinado en su celda, que estaba ubicada a escasos 200 metros del despacho presidencial, con signos de tortura.