Este domingo, en una muestra de soberanía, autodeterminación y rechazo a la propuesta hecha por los acreedores europeos, el pueblo de Grecia dijo “No” de forma aplastante en el referendo de este domingo, en contra de las medidas que implican más recortes al gasto social y la profundización de la crisis humanitaria en su país. Con más de 90 por ciento de los votos escrutados, la tendencia ya resulta irreversible, pues la opción del “No” muestra un 61,31 por ciento del apoyo, muy superior al 38,61 por ciento del “Sí”: más de veinte por ciento de diferencia.
Texto: RT y Telesur
Este domingo Grecia se ha pronunciado en un referéndum clave para el futuro del país y de la zona euro. Tras cinco años de programa de rescate acordado para Grecia por la Troika de acreedores internacionales, (el Fondo Monetario Internacional, el Banco Central Europeo, y la Unión Europea), el Gobierno izquierdista de Alexis Tsipras se plantó y decidió no seguir con el programa bajo las condiciones de los acreedores, que exigen nuevas reformas de austeridad, es decir nuevos recortes de pensiones y el nuevo aumento de impuestos.
En respuesta, los acreedores congelaron los fondos designados a Grecia en el marco del programa de rescate, pese a que sin estos fondos Grecia carece de recursos suficientes para saldar las deudas acumuladas en estos cinco años. El pasado 27 de junio, con las negociaciones entre Grecia y sus acreedores en un callejón sin salida, a tan solo tres días de concluir el plazo para el pago de 1.600 millones al FMI, Tsipras anunció un referéndum alegando que había llegado la hora de que el pueblo griego decidiera qué hacer con el programa de rescate.
Con esta victoria, el Gobierno de Syriza tiene carta verde para renegociar la deuda con el Banco Central Europeo, la Comisión Europea y el Fondo Monetario Internacional (FMI) en condiciones más ventajosas para el pueblo. Grecia pide una reducción del 30 por ciento (95 mil millones de euros) y un período de gracia de 20 años, además de ciertas condiciones para no empeorar la grave situación socio-económica del pueblo.
Según datos del Ministerio del Interior, en la consulta participó un 50 por ciento del electorado heleno, superior al 40 por ciento necesario para que el proceso fuera considerado legal.
En un entrevista ofrecida esta semana, Tsipras denunció una campaña de manipulación para confundir al electorado y negó que entre los planes del Ejecutivo esté abandonar la Zona Euro. “Están mintiendo quienes dicen que tenía un plan para sacar a Grecia del euro (…) El referendo no es sobre si seguimos en la Unión Europea. Sólo sobre el acuerdo con nuestros acreedores”, aclaró.
Además, el jefe de Gobierno aseguró que la última propuesta de su administración, que renegocia, por ejemplo el tema del pago del IVA y de la extensión de la edad de jubilación, seguirá en pie después del referendo. “Nuestra última propuesta seguirá sobre la mesa después del referendo del domingo”.