Iván Pérez Rossi. Foto: Manaure Quintero, AVN (Archivo)
En esta edición del Festival Mundial de Poesía, que inicia hoy miércoles, se incorporó el género musical para homenajear también a aquellos compositores que han contribuido con la poesía desde su canto. Este es el caso del cantautor venezolano Iván Pérez Rossi, uno de los homenajeados para esta edición. Entrevistado por Néstor Viloria, rector de la Universidad Nacional Experimental de las Artes (Unearte) en el programa “Hacer arte es hacer Patria” en la emisora Alba Ciudad, Pérez Rossi recitó su décima “La Calle de la Amargura”, que nunca había salido a la luz pública. Destacó la importancia de esta forma de la poesía y lo arraigada que está en el país.
Texto: Angie Vélez, Alba Ciudad y Ana Maneiro, Correo del Orinoco
Entrevista: Néstor Viloria, programa “Hacer arte es hacer Patria”
“¡Me siento muy contento! Para mi fue una sorpresa cuando me llamó William Castillo para decirme que iba a ser uno de los homenajeados. Yo le respondí: mira William, yo no se por qué, yo no soy poeta; apenas compongo algunas canciones. Me explicó que, como siempre están creando cosas nuevas en el festival, se incorporó la música cantada al festival, como una de las expresiones de la poesía. Fui seleccionado por unanimidad dentro de las personas que estaban para rendir el homenaje”.
Así lo expresó Pérez Rossi en un contacto telefónico realizado en el programa Hacer Arte es Hacer Patria de Alba Ciudad, entrevistado por el rector de la Universidad Nacional de las Artes (Unearte), Néstor Viloria.
Rossi alegó sentirse afortunado de ser homenajeado en esta edición, ya que no sólo compartirá con poetas venezolanos, sino que tendrá la oportunidad de compartir con invitados provenientes de Siria, Egipto, Francia, Haití y toda América Latina. “Para mi es un honor que me mezclen con esa gente; es mucho con demasiado para uno”, indicó.
Mientras más musical es la poesía, mayor impacto tiene en quien la percibe, explicó Viloria.
La décima es una de las formas poéticas más exigentes
Rossi como compositor se ha dado el trabajo de acentuar la poesía a través de la musica, destacando la décima (estrofa constituida por diez versos octosílabos) como forma poética.
Iván Pérez Rossi. Foto: Manaure Quintero, AVN (Archivo)
Explicó Rossi que ha trabajado muy poco las décimas, porque es un trabajo que hay que saberlo realizar muy bien, recordando que cuando habla con poetas, músicos y compositores margariteños, la mayoría habla en décima.”Recuerdo que, cuando al poeta Rosas Marcano lo nombraron hijo adoptivo de la ciudad de La Asunción, donde nació, él hizo su discurso en décimas”. Indicó que Ibrahím Bracho habla y escribe en décimas, le salen muy fácilmente. Rossi manifestó que le ha resultado algo difícil escribirlas; sin embargo ha logrado escribir algunas, como “La Calle de la Amargura”; a las personas que la han escuchado, les ha parecido muy buena.
Manifestó que Venezuela es un país donde se ha practicado mucho la décimas, siendo ésta una de las formas musicales de la poesía más exigentes.”Yo he musicalizado muchas décimas, le puse música a unas décimas de Aquiles Nazoa, creo que es es una de las cosas más bellas que se ha escrito sobre el nacimiento del Niño Jesús, se llama Retablillo de Navidad. Le puse música hace tiempo”.
“También le puse música a unas décimas extraordinarias de Ernesto Luis Rodríguez, uno de los grandes poetas del llano venezolano. Unas décimas llamadas Bolívar; me gusta tanto las décimas, que primero las musiqué en forma de bambuco, y después las volví a musicar en forma de pasaje llanero; yo la grabé con Serenata Guayanesa en forma de pasaje, y Cecilia Todd también la grabó, y así mucha gente las está cantando”.
Rossi culminó su intervención recitando La Calle de la Amargura; asegura que no ha salido a la luz publica pero aprovechó la oportunidad de recitarlo. Dice así:
La calle de la amargura
escuchó al gallo cantar
y a María preguntar
por su angelical criatura
le contesta con dulzura
una niña acongojada
con la mirada angustiada
y una corona de espinas
hacia el calvario camina
con una cruz muy pesadaLa calle de la amargura
la camina el peregrino
y es tan negro su destino
como negra es la conjura
para engolar la figura
que es del hombre el redentor
él, que nos dio tanto amor
y la paz fue pregonando
hoy lo están crucificando
y se muere de dolorLa calle de la amargura
vio caer al Nazareno
con una cruz muy sereno
caminando a la tortura
la Veronica le cura
su semblante ensangrentado
y en aquél manto sagrado
hecho de lino y de gasa
en la tela y en la hilaza
quedó su rostro grabadoLa calle de la amargura
es la calle del calvario
donde a Cristo los sicarios
rasgaban sus vestiduras
tres clavos, mil quemaduras,
fue el final de su camino
salvador que al mundo vino
y que se muere diciendo:
¡no saben que están haciendo!
¡perdónalos, Dios divino!
“Me doy por pagado porque Chávez nos dio demasiado”
El pasado sábado, durante la inauguración de la Casa Cultural Tito Salas, el músico, compositor y miembro fundado de Serenata Guayanesa manifestó que se daba “por pagado” por todo lo que el comandante Chávez y la Revolución Bolivariana ha hecho para democratizar la cultura.
Afirmó que el líder de la Revolución Bolivariana le dio cosas intangibles y que no tienen precio. “Me dio amor por el pueblo, reafirmación en mis creencias, amor por mis tradiciones, me dio un profundo amor porque se que la gente se alfabetizó (…) ¿cuánto puede costar eso?”, dijo en conversación con el Presidente Nicolás Maduro reseñada por Correo del Orinoco.
“Yo estoy sorprendido con esta casa, no la conocía, (refiriéndose a la Casa Cultural Tito Salas). Nos habían comentado que estaba abandonada, llena de maleza, llena de malandros y entonces uno se pone a reflexionar (…) y a sacar cuentas de lo que se ha hecho desde el Comandante Chávez para acá, por la cultura en el país”.
(Archivo/Alba Ciudad/L. Bracci)
El integrante del reconocido grupo ‘Serenata Guayanesa’ resaltó los cambios que ha tenido la ciudad de Caracas. “Se han recuperado espacios, uno puede ir tranquilo con su familia a la Plaza Bolívar, cosa que no se podía hacer, antes te asaltaban, te robaban”, recordó. Destacó la cantidad de teatros que se han hecho o recuperado para la difusión cultural, como el Principal. En ese sentido dijo: “un teatro que conocí de niño, el teatro Bolívar, el de Catia, el de Aquiles Nazoa. Cuando tu empiezas a ver todo lo que ha hecho el gobierno bolivariano por la cultura, quedas asombrado”.
No obstante, Pérez Rossi señaló que todavía faltaba por hacer e instó a “afincar y hacer todo el esfuerzo” para que cada día se acerquen a la cultura más niños y niñas, porque allí es donde está, a su juicio, la transformación profunda.
El cuatrista, cantante y compositor nació en Ciudad Bolívar, estado Bolívar y su vida artística esta íntimamente ligada al grupo Serenata Guayanesa, del cual es miembro fundador desde 1971. Con Serenata Guayanesa grabó más de 50 discos y 5 álbumes en solitario. Es el autor del cancionero infantil “Cantemos con los niños”, que contiene un método práctico para aprender a tocar el cuatro con estas melodías. Otros libros son “La cajita de Música” y “El juego de las Metras”.