La socióloga Maryclen Stelling denunció este martes que el decreto injerencista firmado por el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, es una estrategia de agresión y deterioro de la imagen de Venezuela a nivel internacional, pero que también tiene impacto nacional. Explicó que desde el ámbito internacional existe un cerco mediático que muestran a la nación suramericana de manera negativa. “Tenemos que abrir caminos y explicar exactamente lo que está sucediendo en el país”.
Texto: AVN
En los 16 años de Revolución Bolivariana, Venezuela ha profundizado la garantía de derechos fundamentales como educación, vivienda, salud, igualdad de género, acceso a servicios públicos, entre otros logros reconocidos por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL).
En este sentido, además, la socióloga comentó que en el país factores de la derecha están implementando una estrategia dirigida a deteriorar la convivencia, inocular la desesperanza y la sensación de que no hay futuro en Venezuela, con el objetivo de buscar otras salidas como acabar con la Revolución Bolivariana.
De acuerdo a un análisis que ha realizado a los medios de comunicación privados del país, Stelling ha detectado que la intención de estas empresas es generar que la convivencia de los venezolanos se haga mediante el miedo, la decepción y desesperanza.
“Esa estrategia encuentra una suerte de realidad o de caldo de cultivo que es la crisis de desabastecimiento, las colas en los supermercados y a eso se une la estrategia mediática, ese ataque constante de agresividad que ha deteriorado la subjetividad del venezolano”, dijo a la salida de su participación del encuentro de intelectuales, que se realiza en la Casa Amarilla, en Caracas.
Por ello, Stelling consideró que la VII Cumbre de las Américas, a realizarse los días 10 y 11 en Panamá, representa un momento importante para el Gobierno venezolano, pues permitirá utilizar el decreto Obama de manera positiva, para reafirmar la defensa de la soberanía e independencia del país.
“Puede darle un vuelco al decreto Obama y convertirlo en un Obamazo, es decir aprovecharlo positivamente para demostrar que somos esperanza y no desesperanza. Además el Obamazo ha despertado el venezolanismo y la negación a la injerencia”, agregó.
Por su parte, el experto en derechos humanos, Antonio González, sostuvo que no es creíble la preocupación del presidente Obama sobre la supuesta violación de los derechos humanos en Venezuela, pues recordó que la nación norteamericana no ha firmado los tratados internacionales de protección de los derechos humanos.
Además, mencionó que el gobierno de Estados Unidos con los países que suscribe acuerdos comerciales, los obliga a firmar una cláusula que exime de responsabilidad penal a ciudadanos norteamericanos que han sido violadores de derechos humanos en ese país, por ejemplo Colombia, país en donde el imperio estadounidense tiene bases militares.
“Estados Unidos tiene una historia de violación de los derechos humanos en el mundo a través de invasiones, ocupaciones y conspiraciones que los deslegitiman para cualquier tipo de critica en la materia”, añadió.