Este domingo el ministro del Poder Popular para la Cultura (MPPC), Ernesto Villegas, entrevistó en su programa dominical “Aquí con Ernesto” al viceministro de Fomento a la Economía Cultural, Raúl Cazal, periodista egresado de la Universidad Central de Venezuela (UCV) y paraguayo de nacimiento, pero venezolano desde los 11 años de edad. Esta fue la edición 99 de este programa de televisión que conduce el también periodista y titular del MPPC.
Texto: Prensa MPPC
Cazal, quien viene de una familia perseguida por antiguas dictaduras del Cono Sur, tanto de Uruguay como de Paraguay, forma parte de un núcleo que cuenta con varios comunicadores sociales egresados, al igual que los Villegas.
El viceministro también preside el Centro Nacional del Libro (Cenal) y dirige el Fondo Editorial El perro y la rana.
Su nombre copleto es Dimas Raúl Nicolás Cazal Acosta. Fue llamado con tres nombres propuestos por su padre, quien fue comunista en la nación guaraní. Lo nombraron Dimas, por su abuelo; Raúl, por el hermano de Fidel Castro, y Nicolás por uno de los grandes de la historia de Rusia. Aunque estaba en la clandestinidad, pues su abuelo llevaba escondida la imprenta del Partido Comunista de Paraguay.
Esas identidades se las colocaron para evitar ser llamado Lenin o Fidel, porque delatarían a sus padres, quienes tuvieron que pedir asilo político en Uruguay donde vivieron por 25 años en Montevideo. Allí fueron torturados sicológicamente mientras su padre estaba en la embajada venezolana en esa nación.
Sobre todo su madre sufrió ese tipo de torturas. “Ella fue muy férrea, aguantó toda esa tortura psicológica que le aplicaban. A nosotros, quienes estábamos pequeños, nos decían que nos iban a llevar a otros hogares, luego se cansaron y nos dejaron tranquilos”.
Cazal comentó que “mi abuela no sabía hablar bien en español. Hablaba guaraní. Era una campesina, era ignorante con el español, inclusive toda la población paraguaya habla guaraní”.
Explicó que al llegar a Caracas, “nos alojamos en el Hotel El Conde, fuimos asilados, acompañados por el cónsul venezolano en Uruguay y los mismos policías uruguayos venían en el avión”. Cuando llegamos a Venezuela, relató, mi papá fue entrevistado por el diario El Nacional. Al día siguiente salió la entrevista y recibimos la solidaridad del personal del hotel, quienes nos ayudaron y nos dijeron: “no se preocupen, los gastos los paga el Gobierno venezolano”.
El viceministro recordaba la vida en sus primeros años en Venezuela y el trato que recibía su papá por parte de personas de otras naciones, aunque siempre mantuvo la humildad que lo llevó a tomar futuras decisiones con su vida.
“Mi padre recibía cartas de grandes personalidades, como Eduardo Galeano, Ernesto Cardenal, entre otros. Eso me apasionó y me decidí a estudiar periodismo. Estudié artes gráficas, hice estudios en el Ince (hoy Inces). Cuando llegué a la universidad ya tenía varios estudios. Fundamos en los 80 varios el periódico ‘Letras’. En esos tiempos conocí a quien hoy es el presidente de la República, Nicolás Maduro, quien aprendió con nosotros a diseñar. Ya él trabajaba en el Metro de Caracas”, recordó Cazal.
Su presente
Hoy es viceministro y dirige dos entes culturales adicionales. “Ha sido una gran labor. Cuando me propusiste esta labor, fue una época difícil. La gente se estaba yendo del país. Luego vimos que con menos estábamos haciendo más. Ahora trabajamos también coordinadamente con la Biblioteca Ayacucho y la editorial Monteávila con el trabajo con los libros”, expresó.
A juicio del Cazal, los tiempos han cambiado y ahora la tecnología hace más accesible la lectura. “Los textos impresos y los digitales pueden convivir como pasa con la radio, la televisión y el cine, entre otras expresiones, (…) sin embargo hay editoriales que no trabajan con los libros como antes”.
Las librerías privadas tienen pérdidas, dinero estancado, afirmó. “A través de las Librerías del Sur ofrecemos los textos de buena calidad y con buenos materiales y no tenemos competencias. Los libros son adquiridos, sin embargo, hay que extenderle las manos al sector privado para que no cierren y se mantengan”, sostuvo. Luego agregó que “es una tristeza ver cómo cierran, aunque hoy deben cambiar para que sean convocadas las personas y puedan llegar allí. El modelo de negocio va cambiando”.
XVIII Filven
Cazal informó que para la venidera Feria Internacional del Libro Venezuela (Filven) será del 10 al 20 de noviembre y “van a venir más de 20 escritores africanos, quienes estarán en diferentes facetas, habrá talleres de redacción de escritura policial, de saberes de África, así como editores que van a venir a un encuentro para sostener unas reuniones y discusiones con escritores latinoamericanos”.
Esta edición llega a su mayoría de edad, recordó y agregó que “yo creo que el MPPC ha tenido un gran papel en esto, al igual que el Cenal que tiene cómo llevarlo con sus editores, escritores, diseñadores. En el caso nuestro es la política que nos generó Hugo Chávez, es la promoción del libro y de que hoy tengamos a un pueblo conciente de nuestra soberanía y que nutre a las otras artes. Es la expresión de la cultura venezolana y que se demostrará en noviembre”.
La Filven será instalada nuevamente en el Casco Histórico de Caracas, entre el Palacio Federal Legislativo y las esquina de Padre Sierra y Gradillas. “La feria es para que todos puedan estar en esta gran fiesta, no es de un tinte político exclusivo, son 10 días consecutivos que estaremos presentes”.