Imposible resumir cinco milenios de cultura en una obra, pero al menos parte de ella será expuesta en la presentación que se realizará este lunes, martes y miércoles en la sala José Félix Ribas del complejo cultural Teresa Carreño a las 7 de la noche. Una serie de marionetas, títeres, hombres y mujeres, darán vida a pequeños sketches que relatan algunas de las leyendas tradicionales de China.
“La civilización de china cuenta con una historia de cinco mil años ininterrumpidos, es la única civilización continuada entre las civilizaciones de la humanidad”, aseguró Zhao Rongxian, embajador de la República Popular China en la República Bolivariana de Venezuela, durante la gala de inauguración que se realizó este domingo.
Con esta programación, inician las actividades del Teresa Carreño en este 2015 y se busca seguir fortaleciendo las relaciones culturales entre ambos países. “Hoy por hoy, en esta Venezuela universal estamos estrechando lazos y dándonos cuenta a través de la cultura que tenemos semejanzas espirituales que aunque hablen lenguas distintas, en estos encuentros nos estamos enriqueciendo como seres humanos”, expresó Gustavo Arreaza, director del Teatro.
A pesar de las diferencias idiomáticas y de costumbres, las risas y aplausos de los espectadores durante la primera gala, reservada para invitados, dan cuenta del entendimiento que brinda las expresiones culturales. No hace falta traducción, ni muchas palabras; unos cuantos gestos y actitudes parecen unir al ser humano en cualquier rincón del planeta.
La primera escena presenta la lanza con borlas rojas, arma utilizada para el arte marcial de ese país. Pero en este caso, cada uno de los cuatro hombres, vestidos con túnicas típicas de amarillo, lanza el palo que rebota en la marioneta manejada por una mujer.
El muñeco, de figura femenina, tiene largas plumas que simulan las orejas de una cabra. Símbolo que, según el calendario lunisolar chino, rige el año 2015. “Un animalito muy tranquilo, muestra la estabilidad y la suerte del año que está presente”, contó el embajador chino.
Otras expresiones de este arte se podrán ver en esta muestra. Como una marioneta haciendo un dibujo tradicional (bangiao) con tinta negra.
Otra, con mangas -que llegan hasta el piso- de colores brillantes, danza en el aire creando círculos y tirando papelitos resplandecientes. Mientras seis hombres con sus trajes tradicionales hacen piruetas, saltos y giros.
Luego llega el momento de los títeres de animales, que relatan algunas de las historias populares chinas, como “la tortuga y la grulla”, “el flojo y la mosca”, “el héroe Wu Song y el tigre”. “Son pequeñas leyendas que han ido alimentando la cultura de China y que hoy nos vienen a mostrar a Venezuela como símbolo de las estrechas relaciones con este hermano país”, explicó Katiuska Rodríguez, Directora de Relaciones Internacionales del Ministerio del Poder Popular para la Cultura.
En ese sentido, los representantes de ambas naciones resaltaron la importancia del arte para que sus pueblos puedan conocerse mejor. Para eso, el año pasado, al cumplirse cuarenta años de relaciones diplomáticas entre ambos países se firmó un convenio de cooperación cultural.
Dentro de ese marco, en el 2014, vino a Venezuela un grupo chino multifacético que trabajó la danza, la música y el teatro. Y en el país asiático, participó el músico venezolano Ismael Querales. En tanto que para este año, un film de la nación sudamericana espera participar del Festival de Cine de China.
“Ahora, muchos venezolanos van a China como turistas, por negocios o estudios. Hay en China cien venezolanos que estudian la cultura de china, la medicina y otras ciencias tanto naturales como sociales. Y aquí también hay chinos que están estudiando para conocer la sociedad venezolana”, opinó Zhao Rongxian.
Todavía falta por conocer. Por ahora, las marionetas y los títeres acercarán parte de esa cultura tradicional china al pueblo venezolano. Los aplausos y las risas suenan al comienzo de un entendimiento.