Para la rectora del CNE Socorro Hernández, “los dirigentes (de la oposición) están generando en la población una serie de dudas que ellos y sus técnicos saben que no son válidas”, pues ellos estuvieron presentes en todas las etapas de auditoría y no manifestaron disconformidad. Sobre la solicitud de auditar las huellas de quienes votaron el 14 de abril para buscar personas que hayan votado varias veces, la rectora indicó que dicha auditoría no ha podido comenzar porque el CNE ha estado avocado a realizar la auditoría de verificación ciudadana fase II a solicitud de la propia oposición. La nueva auditoría durará de 2 a 3 meses, porque requiere comprobar la huella de cada votante con 18 millones de registros en la base de datos. Negó que haya muertos votando en las elecciones, e indicó que es irresponsable someter a la población a zozobra e intranquilidad por casos que pudieran ser excepcionales y no están comprobados.
Texto: Alba Ciudad (Luigino Bracci) y VTV
Hernández, entrevistada este lunes en el programa “Contragolpe” de Venezolana de Televisión por la periodista Vanessa Davies, señaló que “la Mesa de la Unidad ha participado en todo el proceso de auditorías de huellas, que también se hizo previo al proceso electoral. Ellos conocen perfectamente cuál es la situación de la base de datos de huellas del CNE, y saben que tuvimos elecciones continuas: tuvimos las elecciones del 7 de octubre, la del 16 de diciembre y que en ese interín a nosotros no nos ha dado tiempo de hacer el acopio y la consolidación de toda esa base de datos para sacar el reporte que están solicitando. No hemos podido. Y luego vino una elección sobrevenida (la del 14 de abril) que tampoco nos ha dado tiempo para eso”.
-Ese reporte que están pidiendo sobre las huellas, ¿se les va a entregar posteriormente? -preguntó Davies.
-Por supuesto. Lo que pasa es que no lo hemos podido realizar. No hemos podido hacer la consolidación porque hay que recabar toda la información desde las máquinas de votación (unas 39 mil). Primero hay que hacer todo ese proceso, que está pendiente para esta elección del 14 de abril, que es un proceso de recabar y de limpiar todas las máquinas y prepararlas para el próximo proceso. Eso no lo hemos hecho. Después de eso, una vez que tienes todas las huellas recabadas, tienes que hacer un proceso complejo porque cada huella de cada elector tiene que ser comparada contra todo el resto de los 19 millones de huellas para garantizar que no haya duplicidades. Y no son sólo 19 millones de huellas: recordemos que se toman los dos pulgares y en algunos casos se tienen hasta 4 huellas. Todo ese proceso hay que hacerlo.
Hernández estima que la duración del proceso de la auditoría de huellas durará de 2 a 3 meses, pero recordó que la oposición tiene que esperar a que culmine la auditoría de verificación ciudadana fase II, que fue solicitada por ellos mismos y dura unos 45 días en total. “Es mes y medio dedicado a auditorías, que perfectamente pudimos emplear para hacer todas las otras actividades, pero ellos quisieron que se hiciera auditoría, y se está haciendo”.
Alto costo de la auditoría solicitada por la oposición
La rectora no quiso dar cifras sobre el costo de la verificación ciudadana fase II que se realiza en este momento en el galpón del CNE en Filas de Mariche pues aún no tiene un monto exacto. Pero recordó que dicha auditoría implicó transportar el material de votación y los comprobantes de voto hasta dicho lugar (normalmente se quedan en cada uno de los estados del país), y que el material no cabía en el galpón del CNE en Filas de Mariche; hubo que habilitar unas carpas inmensas, con aire acondicionado para preservar el material de votación. Hubo que contratar todo el equipo de auditores externos, quienes son transportados día a día al galpón y hay que suministrarles alimentación y cancelarles su trabajo. “Es una cantidad de dinero que se ha venido erogando día a día”, manifestó.
No hay muertos votando
Sobre el artículo del periodista Eugenio Martínez publicado el pasado 2 de junio en El Universal, que asegura que 90 fallecidos habrían votado, Hernández recordó que “nosotros auditamos el registro electoral”, proceso en el cual también participó la oposición. “El proceso de depuración del Registro Electoral se realiza permanentemente para que esté completamente depurado. Tiene una depuración por encima de cualquier otro registro electoral casi que del mundo”. Y sí: reconoció que es cierto que “en este o en cualquier Registro Electoral” puede quedar un pequeño porcentaje de personas fallecidas, pero “es un porcentaje mínimo, que no puede generar ningún tipo de cambios” en los resultados electorales.
Hernández negó que hubieran fallecidos votando, y de haber un ilícito tienen que cumplirse los mecanismos para que se realicen las averiguaciones pertinentes, y “si hay que penalizar a alguien porque está suplantando una identidad, también están los mecanismos. Pero esas cosas no se pueden hablar al aire; hay que probarlas”. Indicó: “Si uno, a priori, dice que tiene información sobre alguien que falleció y votó, tiene que demostrar que eso es así. Lo que tenemos es un proceso que permanentemente está depurando el Registro Electoral”.
La rectora advierte que no se puede irresponsablemente someter a la población a zozobra e intranquilidad por casos que pudieran ser excepcionales y habría que analizarlos para saber cuál es la situación real. Citó casos, por ejemplo, denuncias sobre duplicidad de nombres, pero eran dos electores distintos con nombres similares, o padre e hijo con el mismo nombre y en un mismo centro de votación.
Sobre estos casos excepcionales y no comprobados, Hernández acotó: “Eso no tiene que ser motivo de un titular ni de un escándalo. Estamos hablando de 19 millones de electores y votó el 80%”, recuerda la rectora, entrevistada en Contragolpe. La rectora anunció que este fin de semana se completará la verificación ciudadana en su fase 2.