El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, y su homólogo Cubano, Raúl Castro, se reunieron este sábado en Panamá, en el marco de la VII Cumbre de las Américas. En un encuentro histórico, tras más de 50 años de ruptura de sus relaciones diplomáticas, ambos mandatarios se dieron un inédito apretón de manos y se sentaron a dialogar.
Texto: Telesur
Durante la cita, el mandatario cubano aseguró que el Gobierno de la isla está dispuesto a dialogar con EE.UU. con mucha paciencia: “En algunas cosas estaremos de acuerdo y en otras no”. No descartó que se presenten puntos en que no puedan ponerse de acuerdo inmediatamente, se resuelvan a largo plazo. “Ha sido una historia complicada pero estamos dispuestos a avanzar y a entablar la amistad entre nuestros pueblos (…) Avanzar simultáneamente entre las reuniones que se están llevando para el restablecimiento de nuestras relaciones”, indicó.
Por su parte, Obama agradeció al presidente cubano por su “espíritu de apertura” y afirmó que espera “ir hacia una apertura transformando nuestra relación basándonos en el respeto mutuo”.
También dijo que “mi política será la de asegurarme que que el pueblo cubano sea un pueblo próspero y que pueda entablar una conexión con el resto del mundo”. “A medida que haya más intercambio a nivel comercial, va a haber un contacto más directo, mayor conexión entre los pueblos, va a reflejar positivamente los cambios (…) Seguirán habiendo diferencias profundas y significativas entre nuestros gobiernos, pero con el tiempo podemos dar una vuelta a esta página entablando una buena relación entre los dos países”, agregó.
Previo a esta cita, ambos mandatarios intervinieron en la VII Cumbre de las Américas. Mientras Raúl Castro reiteró la convicción patriótica de la isla, el mandatario estadounidense reconoció que la aplicación de los Derechos Humanos en su país no ha sido “congruente” y que “en ocasiones” no han cumplido con los principios.