El vicecanciller venezolano para América del Norte, Samuel Moncada, acusó este domingo al gobierno mexicano de ser cómplice de las agresiones verbales y amenazas de golpes que recibió, por parte de extremistas de su país al llegada al hotel donde se realizará la Asamblea General de la Organización de Estados Americanos en Cancún.
Texto: Alba Ciudad y EFE
“Es cómplice porque les advertimos de que había habido amenazas y de que debíamos tener más protección y porque permitieron las condiciones para que extremistas fanáticos venezolanos vengan a agredir a la delegación venezolana por permitir que se infiltren”, dijo Moncada en declaraciones a la agencia española Efe en el hotel Moon Palace.
Moncada se pronunció en este sentido después de que la canciller venezolana, Delcy Rodríguez, denunciara en Twitter al secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, y al canciller mexicano, Luis Videgaray “por las agresiones y ataques” contra Moncada y la embajadora Carmen Velásquez.
“Denuncio a Luis Almagro y a Luis Videgaray por las agresiones y ataques contra el Vicecanciller Samuel Moncada y la Embajadora Carmen Velásquez”, señaló Rodríguez en la red social Twitter. “Responsabilizo directamente a Almagro y a Videgaray de la integridad física de nuestros diplomáticos conforme a la ley internacional”, añadió. “Nada detendrá que llevemos la verdad de Venezuela a la OEA y defendamos nuestros legítimos derechos como Patria soberana”.
La canciller también publicó una foto del embajador mexicano en la OEA, Luis Alfonso de Alba, reunido con quienes agredieron a Moncada y Velásquez.
El vicecanciller, que también representa a Venezuela en la OEA, explicó a Efe que un individuo conocido como Gustavo Tovar Arroyo les agredió verbalmente y les amenazó con golpes cuando estaban en la recepción del hotel. “Han permitido que agresores se filtren dentro de las instalaciones del hotel, aquí puede haber cualquier loco con armas infiltrado y la seguridad mexicana aún no ha aparecido, el Gobierno es cómplice y faltó a su obligación de prestarnos seguridad”, indicó el diplomático.
Al respecto, la canciller Rodríguez denunció en Twitter que “Gustavo Tovar Arroyo es un sicópata incitador a la violencia letal en Venezuela. Participó en la ‘Fiesta Mexicana’ para entrenar paramilitares”.
Gustavo Tovar Arroyo es un sicópata incitador a la violencia letal en Venezuela. Participó en Fiesta Mexicana para entrenar paramilitares pic.twitter.com/GCSngrutsd
— Delcy Rodríguez (@DrodriguezVen) June 19, 2017
La “Fiesta mexicana” fue una reunión de tres días realizada entre octubre y noviembre de 2010 por Tovar Arroyo y Pedro Burelli en un hotel del Distrito Federal en México, con jóvenes de la derecha venezolana con el objetivo de recibir entrenamiento clave que les permita desestabilizar el gobierno bolivariano. Los participantes recibieron un taller para llevar a cabo un programa de acciones de “protestas para recuperar la democracia”, que “activen las fuerzas juveniles con un propósito claro de liberación nacional”, denunció en 2014 el entonces ministro de Relaciones Interiores, Miguel Rodríguez Torres. Entre los participantes al taller estuvieron Lester Toledo, Freddy Guevara, David Smolasky, Roderick Navarro y Yon Goicoechea, entre otros.
Rodríguez pidió al gobierno de México que aclare “si apoya a los violentos que están en Cancún para atacar a la delegación venezolana. Protesto formalmente”. El Gobierno mexicano aún no ha respondido a esta petición ni se ha pronunciado sobre el incidente, señala Efe.
La canciller venezolana también señaló a los diputados opositores venezolanos Luis Florido y William Dávila, presentes en el hotel, de ser promotores de la violencia.
Moncada cree que la Secretaría General de la OEA y el Gobierno de México “están creando condiciones para hacer imposible que Venezuela participe” en la Asamblea, y considera que “esto es una emboscada”. El vicecanciller dijo que su Gobierno aún está pensando si acudirá a la reunión de cancilleres sobre la crisis social y política venezolana que se celebrará este lunes, antes de la inauguración de la Asamblea General de la OEA por la tarde.
El hotel Moon Palace, sede de la 47 Asamblea de la OEA, está rodeado de fuertes medidas de seguridad, pero aloja estos días no solo a las delegaciones de la OEA, sino también a turistas regulares.
El Gobierno venezolano inició el pasado 28 de abril los procedimientos para su salida de la organización, que no será efectiva hasta 2019. La máxima cita anual de la OEA, que tendrá lugar hasta el miércoles, reúne este año a representantes de 34 Estados (todos los del continente menos Cuba), 26 de ellos cancilleres.