El presidente de la República, Nicolás Maduro, llamó este martes a todos los venezolanos a hacer una gran Revolución Cultural, una Revolución desde la cultura, al celebrarse hoy el Día Nacional del Artista Plástico y de la Afrovenezolanidad. Durante su programa semanal En Contacto con Maduro, que transmite Venezolana de Televisión, el jefe de Estado pidió hacer todos los días la revolución cultural “para ir construyendo un ser humano, un hombre, una mujer, culto, con una identidad clara, sólida, con la suficiente inmunología espiritual y moral frente a los virus de los antivalores, de la mercancía, de la violencia, de la droga”.
Texto: AVN
Este martes fueron llevados los restos mortales de los cultores César Rengifo y Armando Reverón al Panteón Nacional, en Caracas, como un homenaje de los venezolanos a estos artistas que elevaron la identidad nacional.
Maduro comentó que es necesaria “la gran revolución cultural, de la cultura y desde la cultura, la gran revolución de la identidad, antiimperialista, anticolonialista, antiracista, identidad igualitaria, democrática, profundamente nacionalista y latinoamericanista, profundamente humanista, bolivariana, profundamente Chavista, porque ya (Hugo) Chávez es parte de los valores nacionales porque supo levantar esto y creyó en la cultura de Venezuela, y eso no nos lo va a quitar nada ni nadie”.
Recordó el legado de Rengifo y Reverón, y le pidió al músico e investigador Rafael Salazar su reflexión sobre Rengifo. Salazar comentó que el pintor y dramaturgo venezolano dedicó su obra a la espiritualidad y defensa por los pobres.
Durante el programa, Maduro encargó al ministro del Despacho de la Presidencia, Jesús Salazar, y al ministro para la Cultura, Freddy Ñáñez, encontrar el boceto de Rengifo titulado “Forjadores de la nacionalidad”, a sugerencia de Rafael Salazar. “La obra de Rengifo trasciende a su propia vida y por eso está en el Panteón”, expresó.
Foto: @eledgarpaez
César Rengifo nació el 14 de mayo de 1915 en Caracas. Desde niño sintió un gran interés por las artes, heredado de quien fuera su padrino y mentor José Carmen Toledo. Con el tiempo se convirtió en un gran crítico social, hombre reflexivo, que luchó por la libertad y la democracia a través de las letras y la dramaturgia.
Murió el 2 de noviembre de 1980. Fue autor de más de 40 piezas teatrales y pictóricas, que tienen una concepción sobre el realismo social concebido como el reflejo de la realidad nacional.
Por su parte, Armando Reverón nació el 10 de mayo de 1889, fue autor de más de 100 obras y dio sus primeras pinceladas desde la niñez. Por la separación de sus padres no tuvo un hogar sólido, hasta que se mudó a Macuto, estado Vargas, donde construyó el suyo junto a su esposa. Allí también tuvo su taller, donde expresó hasta su último momento su inspiración por la luz.
