Olores ancestrales, tejidos que entrelazan generaciones, cantos de agradecimiento y un arraigo profundo con la Abuela Kueka. Así es el pueblo Pemón de Santa Cruz de Mapaurí, en el municipio Gran Sabana del estado Bolívar, donde cada rincón susurra una historia y el presente se nutre de la sabiduría de los siglos. En esta comunidad de 756 habitantes, el pasado y el futuro conviven en armonía, formando un corazón latente.
Prensa MPPC (Texto y Micros radiales: Angie Vélez / Fotos: Mónica Sánchez)
La estructura comunal de Santa Cruz de Mapaurí se ha erigido con la misma solidez de su historia. Organizada en seis Consejos Comunales, el liderazgo recae en figuras como Melchor Flores, encargado del ámbito comunal, y el capitán Leonard Loyola.
La tradición democrática, establecida por el abuelo de Loyola, Ignacio, ha perdurado, asegurando que el liderazgo sea un reflejo de la voluntad popular. En este entramado, el papel de los 74 ancianos, cariñosamente llamados “la juventud acumulada”, es fundamental. Ellos son los principales consejeros y transmisores de conocimientos, los “libros abiertos” de la comunidad.
Las tradiciones no son meras costumbres; son pilares de identidad que se mantienen vivos en las manos de los abuelos. Bernardina Díaz, una de las guardianas de ese saber, hila algodón para hacer hamacas, una técnica transmitida por sus propios ancestros, quienes, en lugar de festividades foráneas, “se reunían y adoraban el sol”.
La culinaria es otro pilar inamovible: el mingao y el tumá son alimentos esenciales en manos de las portadoras de saberes. Mientras que el cumachi, un líquido picante, sustituye la sal, el cachiri, una bebida fermentada, acompaña cada reunión comunitaria.
En un mundo de cambios constantes, la comunidad se resiste a diluir su identidad. La transmisión de saberes es un legado vivo. Desde la escuela básica Ko’wai Kueka, la docente Gabriela Benavides subraya la importancia de enseñar el idioma oficial, el Taurepán, y el respeto por los mayores. Desde pequeños, los niños aprenden a tejer y a preparar alimentos tradicionales, un conocimiento que forja su identidad desde la infancia. Como insiste Benavides: “Debemos llevar lo que nos han dejado nuestros ancestros, porque sin eso no somos nada”.
El compromiso con la autonomía y el desarrollo se manifiesta en proyectos concretos. Melchor Flores destaca cómo la figura jurídica de las comunas ha fortalecido a la comunidad, permitiendo la ejecución de proyectos como el primer galpón de gallinas ponedoras. Este éxito ha inspirado a la juventud, que ya trabaja en la creación de un galpón para una fábrica de bloques, asegurando el crecimiento futuro.
La Abuela Kueka y el documental
La historia del regreso de la Abuela Kueka, una piedra sagrada para el pueblo Pemón, es un símbolo de resiliencia. El documental “Kueka, memoria ancestral” se convirtió en una herramienta vital para visibilizar la lucha del pueblo Pemón previa a la repatriación.
Para la directora, María de los Ángeles Peña, el cine fue una “poderosa metáfora de la dignidad y la resiliencia del pueblo Pemón”. El 30 de agosto de 2025, la comunidad se reunió para ver, por primera vez, su historia contada en la pantalla grande. Las miradas reflejaban una mezcla de alegría inmensa y una profunda nostalgia. Había una satisfacción palpable en el aire: la emoción de ver su lucha y sus rostros inmortalizados, una victoria por la verdad y por una historia bien contada.
Sin embargo, también se sintió la ausencia de los abuelos y líderes que partieron antes de ver este sueño hecho realidad. La entrega oficial de la película al capitán Leonard Loyola fue un momento de celebración y recuerdo, un triunfo para todos, presentes y ausentes. La voz del cantautor José Alejandro Delgado, cuya canción se convirtió en una “marcha que refleja el recorrido épico del pueblo Pemón”, aportó una dimensión musical a esta lucha, demostrando que la militancia puede tener diversas formas.
Santa Cruz de Mapaurí y su reconocimiento internacional
En este destino, la cultura y el paisaje se encuentran. El Eco-Museo de la Abuela Kueka recibe a los visitantes para que conozcan la historia y el significado espiritual del pueblo Pemón. Los guardaparques de Inparques guían a los visitantes, quienes luego pueden explorar la icónica Quebrada de Jaspe, una losa de roca semipreciosa que deslumbra.
La belleza de la región se complementa con otros atractivos como la Piedra de la Virgen y los saltos Kamá Merú y Aponwao. Es esta combinación única de riqueza natural y patrimonio ancestral la que ha valido a la comunidad de Santa Cruz de Mapaurí una nominación al Premio Nacional de Turismo, un reconocimiento a su labor como un destino que trasciende las expectativas.
El documental, esa poderosa metáfora de la resistencia, ha comenzado a volar más allá de la Gran Sabana. Seleccionado para formar parte del Festival Entre Largos y Cortos (ELCO) 2025 en Anzoátegui, su mensaje ha resonado con fuerza en el país.
Pero la voz del pueblo Pemón no se detiene en las fronteras de Venezuela. El filme ha sido reconocido a nivel internacional: nominado como Mejor Largometraje Documental y Mejor Diseño Sonoro en el Festival Internacional de cine del Chocó (FICCHO) en Colombia; participante en el Festival Itinerante de Cine Comunitario de la Tierra (FICCTerra) en México; seleccionado para el Festival Audiovisual de Bariloche (FAB) en Argentina, y para la inauguración del Verano Vienés 2025, Photo Film Festival en Austria. Finalmente, como un acto de justicia poética, ha sido postulada como obra elegible para representar a Venezuela en la 40° edición de los prestigiosos Premios Goya, llevando la historia de la Abuela Kueka a los ojos del mundo entero.
Micros radiales
Bernardina Díaz
Gabriela Benavides
Leonard Loyola
Melchor Flores














