La correspondencia entre la vida y obra de “El Chino” Valera Mora, y la vigencia que siguen teniendo sus poemas entre los jóvenes y el público en general, fueron aspectos resaltantes del conversatorio y lectura colectiva que en homenaje al poeta trujillano se realizó el pasado viernes en Maracay, estado Aragua.
Texto: Prensa MPPC Aragua
La actividad en honor a Víctor Valera Mora, con motivo de cumplirse 83 años de su natalicio, fue organizada por el Ministerio del Poder Popular para la Cultura, a través del Gabinete estadal de Cultura, y la Fundación Editorial El perro y la rana, con el concurso del Consejo Popular de Cultura del municipio Girardot, y otros colectivos culturales.
Una forma de decir y de ser
El joven Jonathan Rojas, de la casa editora El perro y la rana en Aragua, fue el facilitador del Conversatorio titulado “Oficio de poeta”.
Rojas hizo una reseña del homenajeado y su obra. Indicó que “El Chino” Valera Mora nació el 21 de octubre de 1935 en Valera, estado Trujillo; padeció la prisión política (1958), se graduó de sociólogo en la Universidad Central de Venezuela, y luego incursionó en la lucha revolucionaria de la década de 1960, que acompañó con su libro “Canción del soldado justo”(1961)
“Su identificación con el obrero, el campesino, la lucha de clases, los guerrilleros combatientes, tienen cabida en sus versos desenfadados, irreverentes, con un humor caústico, que retratan la lucha social de un tiempo, sin dejar de cantarle al amor y al erotismo. Él encarnó no sólo una forma de decir, sino de ser. Fue un hombre auténtico, digno, su vida y obra tenían una estrecha relación”, enfatizó.
Indicó que la obra poética de “ El chino” Valera Mora incluye, además de “Canción del soldado Justo”; “Amanecí de bala” ( 1971); “Con un pie en el estribo” ( 1972), su último libro publicado en vida, “70 poemas stalinistas”( 1979), con el cual ganó el Premio del Conac en el año 1980, y su obra póstuma “ Del ridículo arte de componer poesía”, que fue publicada 10 años después de su desaparición física en la ciudad de Caracas en 1984.
Luego leyó el poema “Oficio de poeta” del Libro “70 poemas stalisnistas”, y dio paso a la lectura colectiva, en la cual los presentes, poetas, cultores, músicos, artesanos, gente del pueblo en su mayoría, escogieron de las antologías editadas por la Fundación Editorial El Perro y la rana y la Fundación Editorial Monte Ávila Editores, los poemas de su preferencia y los leyeron.
En efecto, “Amanecí de Bala”, “Oficio Puro”, “Maravilloso País en Movimiento”, “Cuarteta pre-romántica”, “Hasta Cuándo”, entre otros textos fueron leídos con sentida emoción por los participantes, lo cual evidencia que la voz poética de “El Chino” Valera Mora, sigue teniendo eco en los corazones y las conciencias de jóvenes y adultos.
El pueblo leyó su obra
Luego de escuchar la lectura de varios poemas, la señora Mariela Acosta expresó que: aunque “no conocía la poesía de El chino, me parece realmente extraordinaria, me gusta mucho”. Y entonces buscó un poema y lo leyó. Al final preguntó “dónde puedo conseguir, o comprar un libro de él”.
Nomara Navarro, facilitadora de Misión Cultura, antes de dar lectura a “Maravilloso País en movimiento” indicó que los poemas de “El Chino” Valera Mora siempre los utiliza en los talleres de creación literaria que dicta en distintas comunidades. “Y voy a leer éste que siento refleja el país que estamos construyendo, siempre en constante movimiento”.
Por su parte, el joven Yoel García dijo que siempre le han gustado los poemas de “El Chino” y comentó que La Comparsa Marabunda, agrupación de Aragua, musicalizó uno de sus poemas en ritmode reggae, y él lo toca en su guitarra. “Es que Valera Mora es un poeta que cala en la juventud por su estilo, por sus letras irreverentes”, afirmó.