Una selección de la obra poética de Luis Fernando Álvarez, escritor caraqueño que formó parte del recordado Grupo Viernes, fue compilada por el docente e investigador Pausides González en el libro Oscuridad de no tenerte. Este libro, presentado ayer como parte de las actividades de la duodécima edición del Festival Mundial de Poesía, incluye una una antología que el propio Álvarez hizo de sus poemas, pero que nunca llegó a publicar. A este tesoro, desenterrado de la biblioteca del autor, González le sumó 15 poemas dispersos que consideró importante recuperar, además de otros cinco inéditos que también halló entre los documentos de Álvarez.
Correo del Orinoco ( Sharlaine Chona) / Fotos: AVN
Uno de los cinco poemas inéditos -explicó González- fue el último que escribió Álvarez, y es el que le dio su título al libro. “Oscuridad de no tenerte” es una de las frases que componen el texto. Ese mismo poema es el que las lectoras y los lectores podrán encontrar en la portada del libro, disponible en las Librerías del Sur.
Entre los libros de Luis Fernando Álvarez que se encuentran en Oscuridad de no tenerte están Va y ven, Víspera de la muerte, Soledad contigo, Recital, Raza, y Navío desmantelado, entre otros.
FIGURA FEMENINA Y ESOTERISMO
Durante la presentación del libro, Pausides González abordó varios de los aspectos que consideró que estaban relacionados con su quehacer poético: en primer lugar, mencionó el año 1936 y su participación en el Grupo Viernes
González, quien confesó que siempre admiró la obra de Álvarez, contó que Oscuridad de no tenerte resultó de una investigación en la que dio con varios hallazgos, como algunos documentos que encontró en la casa de Álvarez y en la biblioteca del autor a las que tuvo acceso luego de presentarle el proyecto a su familia.
Además de la antología y de los poemas inéditos, en su búsqueda, Pausides González también encontró varios números de la revista El Teósofo, de la sociedad teosófica, que el autor sumaba a sus lecturas personales. Según González esto da cuenta de “ese esoterismo” que hay en su poesía.
Asimismo, González mencionó entre sus hallazgos a una mujer a la que definió como “un personaje misterioso”. Se trata de Elda Carrizo, una joven de quien Luis Fernando Álvarez estuvo enamorado y que tras su fallecimiento en 1937, generó una manera particular de escribir de Álvarez.
DE LA NUEVA POESÍA
Al cierre de la presentación del libro, Pausides González enfatizó que la idea del texto es también “recordar, reimpulsar y recuperar”, la obra de Luis Fernando Álvarez, pues considera que sus letras, así como de otros integrantes del Grupo Viernes, fueron “los creadores de la poesía nueva venezolana”.
“La poesía contemporánea venezolana parte de los hallazgos, de las inquietudes, de las búsquedas y de la reinvención de lenguaje que el Grupo Viernes trazó a lo largo de ese pequeño período de tiempo que fue desde 1936 hasta 1941”, refirió el investigador.
El docente recordó que luego de la disolución del grupo, cada uno de los poetas siguió “una propia voz” y en el caso particular de Álvarez asegura que la suya fue “una búsqueda básicamente mística, metafísica”.
“En su trabajo poético se sustenta mucho su formación teosófica y esotérica y dentro de este misticismo, eligió como símbolo de su poesía justamente a una figura femenina (Elda Carrizo), convirtiéndola en ese ideal de su poesía que era, de alguna manera lo que lo hizo, en cierto modo producir gran parte de su obra. Su palabra estaba muy relacionada con la formulación poética del amor a través de lo místico y lo esotérico”, señaló.
