Contraataque: Un programa radial contra la canallada mediática

Osly Hernández y Gustavo Villapol (Foto: MPPC)

Gustavo Villapol y Osly Hernández terminan su jornada laboral con una sonrisa de oreja a oreja después de conducir el programa Contraataque, que se transmite de lunes a viernes, de 5:00 a 6:00 de la tarde por la señal Alba Ciudad 96.3 FM.  Desmontan matrices de opinión creadas por la oposición dejando de lado las formas acartonadas y aburridas, pero también se involucran con quienes hacen trabajo en las comunidades.

Militantes comunales, trabajadores sociales y comunicadores, son estos dos jóvenes que difunden con humor y conciencia las noticias, y hacen que su cola en el tráfico de la ciudad sea más llevadera. Este espacio radial fue creado con la intención de contraatacar y contrarrestar el bombardeo de información de muchos medios de comunicación, pues según lo explica Osly Hernández, “la gente está aburrida de ese formato acartonado de comunicación que nos hace alejarnos de lo que somos”.

-¿Cómo nace el programa?
GV: Es un contraataque en respuesta a las matrices comunicacionales que generan los medios nacionales e internacionales no sólo en contra del Gobierno Bolivariano, sino contra todo ese movimiento progresista y revolucionario que se viene dando en Latinoamérica con mucha fuerza.

OH: Gustavo y yo andábamos con la idea de sacar un programa que pudiera agarrar las matrices de opinión de la tarde a nivel de medios, que es donde se inserta la línea política de la oposición, y nuestra intensión es desmontarla.

-¿Cómo definen a Contraataque?

GV: El programa cumple casi tres meses y ha tenido buena respuesta de la gente por la forma en que decimos la noticia, la forma de contrarrestar y contraatacar. Es un espacio muy diferente al que uno escucha en cualquier programa de noticias, nosotros somos personas muy joviales, muy trabajadoras, pero a la vez somos echadores de broma como todos los venezolanos. Las secciones del programa son graciosas, por ejemplo,”El extraño mundo de las cotufas explotadas”, que hacen del hecho noticioso que está en contra de la revolución, una burla, entonces eso ha calado mucho en la gente, también hacemos rifas y entregamos libros de las editoriales del Ministerio del Poder Popular para la Cultura.

OH: Cuando hay noticias serias somos serios, pero cuando la información es inventada, lo que hacemos es burlarnos de ella porque no podemos tomar con la rigurosidad el ejercicio del periodismo con algo que para nosotros es palangrismo mediático, y de allí nace el tema de la guerrilla comunicacional, en la medida en que tengamos sectores que no informan sino que atacan y pretenden manipular, nosotros estaremos aquí desde la guerrilla comunicacional respondiendo de igual manera.

Gustavo Villapol. Detrás de él Luiger Loyo, operador (Foto: MPPC)

-¿Cuál ha sido la reacción de los usuarios y usuarias que los escuchan por Alba Ciudad 96.3 FM?

GV: La gente goza un puyero, de hecho nos está pasando algo muy gracioso con las personas que escuchan Contraataque porque todas ellas producen el programa, nos llaman para darnos información, te das cuenta entonces de que estamos construyendo el programa con la gente que nos escucha,y eso lo hace más interesante aún porque es un producto del colectivo. Desde El Valle nos llama todos los días una señora que se llama Francis, que es como nuestra reportera de calle, nos envía correos y ayuda a producir el programa.

OH: Creo que la gente estaba aburrida de ese formato acartonado de comunicación que nos hace alejarnos de lo que somos, nosotros como pueblo somos muy dicharacheros y felices. Nosotros venimos haciendo militancia comunal, hemos aprendido a entendernos como parte de un pueblo trabajador y explotado, desde allí hablamos en nuestros códigos con nuestras formas de expresión juvenil,además, la juventud es rebeldía e irreverencia. A pesar de que echamos chistes, hay mensajes con un contenido ideológico que defendemos porque estamos convencidos que es el camino.

Osly Hernández (Foto: MPPC)

-¿De qué manera se han planteado abrir más espacios de participación popular en el programa?

GV: El planteamiento que tenemos desde que comenzamos es que a medida que el programa vaya calando y consiguiendo espacios donde uno milita, hace actividad comunal y trabajo social, Contraataque se involucre como una forma de expresión de lo que hacen las comunidades, porque qué mejor respuesta a la canallada mediática que el trabajo que está haciendo la comunidad. Este sábado estuvimos en La Bombilla de Petare, tememos programado ir a Coche, a un lugar que se llama El Festival, también estamos preparando un programa con la gente de Fuerte Tiuna. Nuestro objetivo es mostrar lo que se viene haciendo en las comunidades bolivarianas.

OH: Desde que arrancamos con el proyecto en Alba Ciudad, pensamos que la radio debía salir a la calle. Sabemos que la cabina nos ofrece unas condiciones de audio, pero la tecnología podría facilitar que el programa se hiciera directamente desde la calle y ese es el reto. La intención es que la radio se mantenga en la calle porque no queremos seguir mediatizando las relaciones humanas, nuestro país está muy mediatizado y la única manera de quebrar esa forma de relacionarnos es entrando en el cuerpo a cuerpo, en el tú a tú.

-¿Cómo concibe Contraataque el hecho cultural y el hacer revolución de la conciencia en medio de la Batalla de las Ideas?

GV: Las políticas culturales que emanan de la Revolución Bolivariana son fundamentales para llegar al Socialismo. Los teóricos revolucionarios a lo largo de la historia han sostenido que sin cultura no hay revolución, y por supuesto Contraataque es parte de esas políticas culturales del Gobierno Bolivariano, enmarcadas en la Batalla de las Ideas, así que el ámbito cultural es fundamental y nosotros damos diariamente esa batalla.

OH: La revolución de la conciencia es la tarea inaplazable para cualquier militante de la revolución. Para nosotros el trabajo es incansable, es consecuente, no tiene ni fecha ni horario en el calendario, no hay salario que lo remunere además, no estamos aquí por un quince y un último, estamos aquí porque creemos en las ideas que profesamos. Alba Ciudad nos dio ese espacio para introducir esas ideas, para compartirlas con un sector que siempre nos llama, nos envía mensajitos y está pendiente de nosotros y nosotros de ellos. Para mí la cultura es el quehacer de las mayorías, la cultura revolucionaria es donde está nuestro acervo histórico popular, si nosotros queremos definir a Venezuela no lo debemos hacer desde una élite, tenemos que hacerlo desde el corazón de Venezuela, y ese corazón está en nuestro pueblo, está en nosotros mismos.

Hernández y Villapol (Foto: MPPC)

-¿Qué retos se proponen para este año?

GV: Mientras el programa sea más colectivo, más participativo y nos encontremos con el hecho cultural desde las comunidades, el programa seguirá creciendo.

OH: A veces es difícil lidiar con las responsabilidades, pero cuando uno se aferra en la construcción de abajo hacia arriba, no te enajenas en esos espacios y sigues manteniendo el programa de luchas, la esencia, creo que lo más importante es llegar a las comunidades y que sean ellas las que expresen lo que allí se hace.

-¿Quiénes son Gustavo Villapol y Osly Hernández?

GV: No soy periodista, soy administrador pero sí soy comunicador. Comencé como comunicador en un consejo comunal en un periódico, allí me dí cuenta que era necesario que como trabajadores sociales y revolucionarios mostráramos lo que estábamos haciendo, y dejáramos ser objeto comunicacional para ser sujeto comunicacional. Así, poco a poco me fui involucrando, haciendo talleres de producción audiovisual, oratoria, locución y me fui formando poco a poco sin ser periodista.

OH: Soy una persona muy apasionada y desprendida. Alguien que decidió hacer de la militancia su forma de vida, me entrego en todo lo que hago a una causa porque estoy convencida de ella. Soy una transgresora de la comunicación formal, no me llevo muy bien con la institucionalidad burguesa, he tenido dificultades para relacionarme entre el burocratismo, la estructura y la verticalidad, porque nosotros venimos formados desde el construir popular.