Cientos de personas acampaban este miércoles en el corazón de Madrid para protestar contra una clase política y un sistema, que dicen, no les representa. Aunque sus reivindicaciones todavía son un poco difusas, el movimiento ya se conoce en España como la “revolución de los indignados”.
Texto: Patria Grande y Público
Miles de personas se concentran en la Puerta del Sol a pesar de que la Junta Electoral Provincial de Madrid desautorizó este miércoles la concentración convocada por los organizadores de la #acampadasol. La resolución de la Junta ha sido adoptada a primera hora de esta tarde tras la petición para efectuar la convocatoria que ayer trasladaron varias personas.
“No se considera que concurran causas extraordinarias y graves que justifiquen la urgencia de la convocatoria solicitada en un espacio de 24 horas”, han indicado fuentes cercanas al organismo arbitral electoral.
El campamento de Sol está ocupado por jóvenes, pero también desocupados, jubilados y gente de todas las edades, descontenta con la situación que atraviesa España. La crisis económica ha golpeado con dureza al país ibérico. El desempleo alcanza el 21,3% de la población, con más de 4,9 millones de desocupados. Entre los jóvenes, la tasa alcanza el 40%.
“Pedimos justicia social. Reivindicamos trabajo digno, que la precariedad laboral pase a la historia”, explicó Paco López, portavoz de los manifestantes. “Los derechos sociales están siendo atacados por los mercados financieros, con el beneplácito de la clase política”.
El colectivo no tiene ideología. No se definen ni de izquierdas ni de derechas. Y en sus mensajes critican por igual al gobernante Partido Socialista y al opositor Partido Popular. Genéricamente, demandan cambios a pocos días de las elecciones municipales y autonómicas del 22 de mayo.
“Este movimiento se está creando, se está gestando. Es un ser vivo plural, heterogéneo, fruto de la indignación de los ciudadanos”, explicó López, quien se encuentra desempleado.
La protesta, de momento pacífica, comenzó el pasado domingo, pero cobró fuerza a través de las redes sociales entre el lunes y el martes. Una plataforma apolítica llamada Democracia Real íYa! consiguió sacar a la calle a miles de personas, sobre todo jóvenes, en todo el país sin más ideario que hacer oír su voz en contra del desempleo, la precariedad, los recortes sociales, los bancos y la clase política en general.
De aquellas manifestaciones convocadas a través de internet en 50 ciudades, se derivó un nuevo movimiento de protesta especialmente numeroso en Madrid, pero que también se ha reproducido en otras ciudades como Barcelona.
Argumentos electoreros
La Junta ha considerado además que “la petición del voto responsable”, a la que hacen referencia muchas de las personas que acampan en la plaza madrileña, “puede afectar a la campaña electoral y a la libertad del derecho de los ciudadanos al ejercicio del voto”.
La resolución ha sido notificada a la Delegación del Gobierno en Madrid, donde ha tenido lugar la reunión con algunos de los convocantes de la concentración, a quienes se ha informado de la decisión.
Fuentes de la Delegación han declarado a Público.es que desplegarán los “dispositivos oportunos y necesarios” para hacer cumplir dicha resolución. Han señalado además que, junto con la Jefatura Superior de Policía, han decidido situar a la Unidad de Intervención Policial (UIP) en las diferentes calles que dan acceso a la Puerta del Sol, algo que ya han denunciado los miembros de la acampada.
Los agentes registran a quién intenta entrar en la plaza, le solicitan la documentación y le informan de que está prohibida la concentración convocada, pudiendo incurrir en un delito si se quedan allí. Fuentes policiales descartan que se vaya a cargar contra los que finalmente se concentren, aunque sí se podría identificarlos, informa Pedró Águeda.
Juan Cobo, portavoz de #acampadasol, ha confirmado que no tienen previsto marchar y sigue en pie la convocatoria de la concentración a las 20.00 horas. “Ahora mismo estamos reunidos y por ahora queremos manifestar cómo se ha quitado un nuevo derecho de los ciudadanos, el derecho de reunión”, ha dicho.
Cobo ha señalado además que los dispositivos policiales comienzan a movilizarse y a colocarse en los accesos a la plaza para impedir que la gente pueda entrar. “Dentro estaremos alrededor de unas mil personas”, ha dicho. Entre ls cánticos más sonados: “Lo llaman democracia y no lo es”, “Ya ha llegado la revolución” o “Buscad protector solar, vamos a tener Sol para rato”.
Carlos Sánchez Almeida, uno de los abogados que colabora con #acampadasol, ha comentado a Público.es que “no consta una notificación”, por lo que creen que la decisión de la Junta se trata simplemente de “un dictamen”. “En el momento que salga la notificación, podremos analizarlo y llegado el caso, presentar un recurso”, ha asegurado.
Además, Sánchez Almeida ha recordado que “el artículo 21 de la Constitución Española” ampara el “derecho a reunión pacífica y no necesita de autorización previa”. También se ha remitido a algunas sentencias del Tribunal Constitucional (sentencias 170/2008, 37/2009 y 38/2009), que fallaron que España “había vulnerado el derecho a reunión de varios colectivos que quisieron manifestarse durante una campaña electoral”.