Sesenta y cinco niños y niñas, cursantes del trayecto inicial en la Unidad Educativa Estadal “Manuelita Sáenz”, de Cagua, municipio Sucre del estado Aragua, participaron en el taller “Elaboración de maracas con materiales de provecho”, dictado por la cultora Eveling Pérez, especialista del Istituto de Artes Escénicas y Musicales (IAEM), en el gabinete estadal del Ministerio del Poder Popular para la Cultura de la entidad.
Texto: Prensa MPPC Aragua
La actividad formativa se cumplió en varios grupos del turno de la mañana, en horario de 8:00 am a 12 m, con la participación de escolares con edades comprendidas entre los 7 y 9 años, quienes escucharon atentos las explicaciones de Pérez, experimentada maraquera y bailadora de joropo en su diversidad, y luego procedieron a elaborar las maracas, instrumento musical de origen indígena, del pueblo arawaco.
Pérez precisó que en el taller les explicó a los niños los diferentes tipos de maracas que hay, tanto la palo pegado, como la palo atravesado. De igual manera, los distintos sonidos y modos de tocar el instrumento en el joropo central, el llanero, el oriental y el merengue venezolano.
“Previamente hacemos unos ejercicios para el movimiento de las muñecas, para que no se lesionen cuando toquen. Son ejercicios básicos, alzando los brazos, moviendo las manitas, abriéndolas y cerrándolas para tener más fuerza. Se les explica también cómo hay que agarrar las maracas y el ritmo básico. Uno les va explicando didácticamente; en algunos casos me pongo con ellos, les agarro las manitas, para que lleven el ritmo, el sonido”, dijo.
Subrayó que para elaborar las maracas utilizaron botellitas plásticas, palitos de escoba, cinta plástica y pabilos, en algunos casos; mientras que en otros: bolitas de anime, palitos de piñata y palitos de altura. “Los niños emplearon pinturas para decorar sus maracas, algunos les colocaron sus nombres, figuritas, muñequitos, cada quien de acuerdo con su creatividad, a su gusto”, expresó.
Agregó que adentro le colocaron piedritas: “Algunos niños llevaron canutillos, otros un poquito de arroz picado, y otros caraotas, de las que se desechan cuando uno las limpia para cocinarlas, para darle la sonoridad a las maracas”.
La especialista del IAEM informó que, posteriormente, dictará el taller a los niños de la segunda etapa y al turno de la tarde, que también se han mostrado interesados . Y, luego, seleccionarán aquellos que han mostrado más interés en aprender a tocar el instrumento, y que tengan oído rítmico para dictarles un taller intensivo.
Al finalizar los escolares mostraron orgullosos las maracas elaboradas con sus propias manos. De ellos surgirá, quizás, el día de mañana, un destacado o una destacada maraquera que acompañará la fiesta del joropo central, tuyero, llanero, oriental, u otro género musical.
Ya Eveling Pérez advirtió que “hay algunos que con tan sólo escucharme agarran el ritmo de inmediato, porque tienen un excelente oído musical y rítmico, una maravilla”.