Una periodista del diario estadounidense The Washington Post redactó una nota sobre los sucesos en Baltimore, ocurridos por el brutal trato de parte de la policía al afrodescendiente Freddie Gray, asesinado mientras estaba en custodia policial. Pero la redactó de forma distinta a sus colegas, mostrando cómo lo cubrirían los medios internacionales si estos hechos estuviesen ocurriendo en otro país que no fuera Estados Unidos.
Karen Attiah, The Washington Post
Traducción libre de Giuliano Salvatore
Si lo que ocurre en Baltimore ocurriera en otro país así es como los medios internacionales lo cubrirían:
Líderes internacionales expresaron su preocupación por la escalada de racismo y violencia estatal en Estados Unidos, especialmente al respecto del trato hacia las minorías étnicas de ese país y de la corrupción en las fuerzas de seguridad del Estado cuando se trata de casos de brutalidad policial. La más reciente de las crisis está teniendo lugar en Baltimore, estado de Maryland, una ciudad otrora vibrante de la costa este, donde un hombre desarmado llamado Freddie Gray murió asesinado mientras estaba bajo custodia policial.
Los afroamericanos, un grupo étnico minoritario en ese país, son asesinados por fuerzas del Estado en un porcentaje mucho más alto que a la mayoría blanca. Jóvenes afrodescendientes tienen 21 veces más chance de ser atacados por la policía que un joven blanco estadounidense.
El Reino Unido expresó su preocupación por los elevados índices de violencia en Estados Unidos en los últimos meses. El Ministro de Relaciones Exteriores de ese país expresó que “exhortamos al régimen estadounidense a castigar y detener a los agentes de la fuerzas policiales del Estado que han atacado brutalmente a grupos étnicos minoritarios en ese país. La aplicación por igual de las leyes, además del respeto a los derechos humanos de todos los ciudadanos, negros o blancos, es esencial para la democracia”. El Reino Unido ha mantenido siempre un gran interés en los asuntos de su excolonia.
Palestina ha ofrecido ayuda y asistencia a los activistas pro-democráticos en EEUU, enviando kits “anti-lacrimógenos” a aquellos que protestan contra la brutalidad policial en varias ciudades norteamericanas. Grupos pro-democráticos egipcios también han dicho que compartirán su experiencia de cómo lidiar con armas antimotines hechas en los Estados Unidos, luego de su experiencia luchando contra ellas en manos de los cuerpos represivos del estado egipcio en 2011.
Un anuncio oficial de las Naciones Unidas expresa que “condenamos la militarización y la violencia policial que hemos visto en los meses recientes en Estados Unidos y exhortamos fuertemente a las fuerzas de seguridad del Estado a emprender una investigación completa sobre las razones de la muerte de Freddie Gray en Baltimore. No hay excusa para el exceso de fuerza policial”. Las Naciones Unidas exhortan a los Estados Unidos a llevar a cabo un esfuerzo nacional por hacer públicos los datos de violencia policial en el país con el objetivo de aumentar la transparencia y detener la corrupción en el sistema de justicia.
Analistas internacionales predicen que estos sucesos pueden ser la semilla de la así llamada “primavera estadounidense” rápidamente extendida por las redes sociales. “Es increíble lo que las redes sociales están haciendo por la justicia en EEUU” dijo un analista por los derechos políticos radicado en Ginebra. “Los jóvenes afrodescendientes norteamericanos están mostrando cómo luce un activista de derechos humanos en el siglo XXI, usando tecnología, redes sociales y estrategias descentralizadas en las protestas para mantener a raya a las fuerzas policiales y presionar por un cambio. Estos muchachos representan la cara moderna y actual de los luchadores por los derechos civiles en el mundo. La revolución sí será twitteada, grabada y transmitida por las redes sociales”
El gobierno local de Baltimore impuso la semana pasada un Estado de Excepción luego de que las manifestaciones pacíficas se hicieran violentas en respuesta a la represión policial. Ante ello, países de todo el mundo han advertido a sus compatriotas de piel oscura cancelar todos los viajes no necesarios a áreas de ese país donde se han hecho repetitivos actos de violencia por parte de las fuerzas policiales en contra de civiles negros desarmados, especialmente en lugares peligrosos como Nueva York, Misuri, Oklahoma, Carolina del Sur, Ohio, California, Michigan, Virginia y ahora Maryland.
Grupos de derechos humanos de todo el mundo han instado a la comunidad global a facilitar asilo a miembros de las minoría étnicas negras norteamericanas que logren escapar de la situación que sufren en su país. Un vocero de estas organizaciones en Europa, al ser preguntado si la Unión Europea estaba dispuesta a prestar refugio para activistas negros huyendo de EEUU, exclamó: “¡¿Más negros refugiados?! Ya estamos lidiando con nuestra propia crisis en el Mediterráneo, así que ahora no es un buen momento para nosotros. Creemos que debe haber una solución estadounidense a los problemas estadounidenses”. La Unión Africana no ha hecho comentarios sobre la pregunta.
Oficiales del Gobierno norteamericano han caracterizado a las protestas como “turba de maleantes”, término que cada día se hace más común para referirse a jóvenes afrodescendientes en ese país. Además, muchos comentaristas a lo largo de todo Estados Unidos han comparado lo que ocurre actualmente en el estado de Maryland con personajes y eventos de la famosa serie “The Wire”, ambientada en el Baltimore de principios del 2000, en el que la violencia policial, la complicidad de los grandes medios y la corrupción del sistema de justicia norteamericano eran el centro de la discusión.
Las minorías étnicas negras de Estados Unidos han sido desplazadas de muchas de sus comunidades debido al fenómeno que los expertos llaman “gentifricación”, proceso en el que habitantes de un mayor poder adquisitivo se mudan a barrios pauperizados desplazando a sus habitantes originales a lugares aún más pobres y lejanos. Baltimore no es una excepción a esta “moda” en el que algunas áreas han visto subir el precio de las propiedades un 137 por ciento cuando los dólares de las grandes inmobiliarias buscan oportunidades en áreas pobres.
Joe Smith, miembro de la etnia blanca mayoritaria y residente de la zona, dijo frente a un Starbucks (franquicia mundial de venta de café) recién instalado cerca del puerto de la ciudad: “No sé por qué estos negros están destruyendo sus propias comunidades. ¿Por qué no siguen el ejemplo de Martin Luther King? Ellos también sufrieron los embates de la violencia policial en sus tiempos, pero no intentaron levantarse y pelear como ahora, haciendo que todos estemos inncesariamente incomodos”.