En el Museo de Bellas Artes, ubicado en la plaza de Los Museos, existe un espacio para el encuentro, el compartir, el análisis, la reflexión y el esparcimiento, donde el pueblo caraqueño puede apreciar las maravillas culturales e históricas que rodean al séptimo arte. Este lugar tan importante y emblemático para la ciudad es conocido como la Cinemateca Nacional, que este 4 de mayo está cumpliendo su quincuagésimo aniversario.
Texto:Ciudad CCS (Tibisay Maza Giménez)
Esta institución fue fundada por la directora y guionista venezolana Margot Benacerraf, quien recordó que la primera película que se proyectó en esta sala fue Barbarroja, del director japonés Akira Kurosawa, y posteriormente se impulsó un ciclo de cine brasileño.
“Con este ciclo quisimos demostrar que éramos una Cinemateca latinoamericana, y de esta manera el público se entusiasmó muchísimo y empezó a acudir a este nuevo organismo cultural”.
Benacerraf realizó sus estudios cinematográficos en París y fue ahí donde se planteó crear un espacio cultural que enalteciera el cine criollo.
“La mayoría de los directores franceses se formaron en una cinemateca, ya que pudieron presenciar todas las maravillas que estaban presentes en su cine, es por ello que creí que era importante crear una cultura cinematográfica en Venezuela, ya que no había ningún organismo que se ocupará de resguardar los archivos cinematográficos de la nación”.
Contó que quería que los jóvenes pudieran ver cómo se hacía el séptimo arte y cuando obtuvieran esas herramientas se convirtiesen en grandes creadores.
La entrevistada expresó sentirse satisfecha y feliz tras este nuevo aniversario. “Fue una obra que hice con mucho cariño y mucho esfuerzo, y me complace ver que la Cinemateca sigue en pie, a pesar de todo el tiempo que lleva de fundada”.
Agregó que tiene grandes expectativas. “Hay un equipo con mucha mística y me parece que la Cinemateca tiene un gran porvenir, ya que hay una concienciación sobre la labor que se emprende en esta institución, que como todos sabemos trata de enaltecer al cine nacional y latinoamericano”, dijo.
El antes y después
El expresidente de la Cinemateca Nacional y actual jefe del Registro Audiovisual del Instituto de Altos Estudios del Pensamiento de Hugo Chávez, Xavier Sarabia, explicó que esta institución se ha fortalecido en los últimos 16 años.
Relató que hace 50 años el país tenía una democracia representativa que respondía a los intereses de unas élites, pero ahora tenemos una democracia participativa y protagónica, donde la cultura es para el pueblo.
“Así fue surgiendo una cultura cinematográfica contrahegemónica, a través de la creación y distribución de los bienes y servicios culturales cinematográficos. ¿Para qué? Para producir una audiencia emancipada y emancipadora”, afirmó.
Comentó que al principio la Cinemateca Nacional solo tenía dos salas en Caracas, pero tras la llegada de la Revolución Bolivariana esta experiencia se multiplicó. “Ahora hay 16 salas regionales por todo el país y también se han creado salas comunitarias que tienen muchísima importancia, ya que cuentan con una Coordinación de Formación y Participación”.
Acotó que la Cinemateca se encarga de producir una serie de libros que son únicos en el país. “Tal es el ejemplo de la Colección de Cuadernos de Cineastas, la Colección de la Filmografía Venezolana y la Colección de Ensayos”.
Fortaleciendo el cine nacional
Sarabia expresó que la Cinemateca Nacional se ha convertido en el circuito de cine más importante de Venezuela en estos 50 años.
“Nuestro cine es independiente al gobierno hollywoodense. Si no existiera la Cinemateca, no se vería el cine documental venezolano. En los últimos años se ha logrado incluir las diversas modalidades que hay en el cine, como por ejemplo el mediometraje y cortometraje, que son muy difíciles apreciarlos en las salas comerciales”.
Comentó que en algunos estados del país no hay salas comerciales, sino las alternativas que ofrece la Cinemateca, como por ejemplo en Vargas, Amazona y Apure. “No hay salas comerciales en estas regiones porque el estudio de mercado arrojó que no iban a tener audiencia, por esta razón el Estado tiene que garantizarle al pueblo la distribución del séptimo arte”, destacó.