La Escuela de Ballet y Música Fredy Reyna, ubicada en la urbanización Vista Alegre de la ciudad capital, comenzó sus actividades académicas para continuar impartiendo disciplina y valores a través de las artes. Así lo afirmó su directora Nereida Velásquez, quien está al mando de esta institución gratuita, adscrita a la Alcaldía de Caracas y formadora de jóvenes en las expresiones de ballet, danza tradicional, contemporánea y música.
Texto: Ciudad Caracas
“Mi misión como la nueva encargada del recinto es reestructurar el pénsum de las clases de ballet y ofrecerles a las niñas inscritas, un programa profesional que las forme académicamente para que egresen con un excelente nivel y animarlas a que continúen su carrera como bailarinas profesionales en otras escuelas o compañías”.
Asimismo, comentó que cambiará los años de formación y los adaptará al año escolar “siendo nueve años en total lo que le tome a una joven aprender correctamente toda la técnica”, aseguró Velásquez, según nota de prensa de Fundarte.
El horario de clases es entre las 2:00 pm y las 5:00 pm; sin embargo, se pretende extender a una hora más para permitir que las niñas completen las lecciones con mayor calma y puedan trabajar los 90 minutos requeridos para la formación clásica de ballet.
“La escuela Fredy Reyna consta de tres salones amplios, iluminados y en óptimas condiciones para que las jóvenes aprendan y se enamoren de esta hermosa disciplina”, reiteró.
En este sentido dijo que existen cuatros salones adicionales donde se imparten clases de cuatro, guitarra, mandolina, violín e identidad caraqueña. Esta última disciplina consiste en dominar cantos y versos. Comentó que la mayoría de los instrumentos que los niños utilizan pertenecen a la escuela, a excepción de la cátedra de violín donde cada chamo es dueño de su instrumento.
Se espera que para este año haya una participación del grupo de danza tradicional en el Festival de Teatro 2016 y a su vez, con los cambios que se han venido suscitando, le permitan a la escuela resurgir y ser reconocida nuevamente como una referencia de primer nivel en la formación de profesionales.
Doscientas niñas y niños hacen vida en el recinto que ahora lleva como tutora principal a una profesional del ballet con 20 años de experiencia como bailarina profesional y que actualmente, además de dirigir la escuela, se encuentra estudiando para ser docente en Unearte e incorporarse en las clases para todos aquellos niveles que así lo requieran.
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