En las afueras del Palacio de Miraflores, el vicepresidente de la República, Jorge Arreaza, recibió este miércoles a movimientos organizados de transportistas, motorizados, indígenas y estudiantes, como parte del llamado a debate que ha hecho el Gobierno Nacional para el reimpulso y la renovación de la revolución desde las bases. Durante el encuentro, transmitido por Venezolana de Televisión, el segundo al mando del Ejecutivo escuchó los reclamos y aportes hechos por el poder popular en cada una de sus áreas, para dar continuidad al método de gobierno que comenzó el comandante Hugo Chávez, que consiste en escuchar directamente al pueblo, tal como señaló.
Texto: AVN / Fotos: Prensa Presidencial y @alba_tv
Recordó que antes de la revolución espacios como Miraflores estaban reservados para las autoridades gubernamentales y sus cúpulas aliadas, a diferencia de la actualidad, cuando la sede del Gobierno se ha convertido en la “casa del pueblo”, refirió Arreaza montado en un camión al que seguidamente se subieron voceros del poder popular para tomar la palabra.
“Nunca nos vamos a rendir”, expresó el estudiante de la Universidad Bolivariana de Venezuela Deivis González, aupado por otros estudiantes y personal de la institución que marcharon hasta el lugar.
Clamor Indígena
En la concentración estuvieron presentes integrantes del movimiento indígena Evolución, del estado Sucre, que manifestaron su compromiso con el proceso revolucionario, el cual por medio de instrumentos jurídicos e instituciones ha avanzado en la reivindicación de esta población. Allí exigieron a la dirigencia que escuche con más atención la voz del pueblo y ejecute los planes pendientes.
En este sentido, Wilson Espinoza, gobernador indígena Kariña, expresó: “A los resultados del día domingo (6 de diciembre) debemos darle una lectura importante, aquí no creemos realmente que haya habido una desbandada del chavismo hacia la oposición, solamente le están diciendo que debe escuchar con mucha más atención al pueblo. Verdaderamente el que estemos hoy aquí, sin ser llamados por ningún ministerio, sino que vino el pueblo solo organizado, está dando muestras de solidaridad y de que cree en este proyecto”.
Espinoza insistió en la necesidad de que se conforme el Instituto Nacional de Pueblos Indígenas (Inpi), contemplado en el título 2 de la Ley Orgánica de Pueblos y Comunidades Indígenas (Lopci, 2005), el cual tendría la tarea de alinear a los movimientos aborigenes en la ejecución de sus políticas, como parte de un proceso democratizador del poder.
“El ministerio indígena hay que revisarlo, hay que democratizar el poder (…) Los ministros que están no lo han puesto a funcionar (al Inpi) sencillamente por no dejar de manejar los recursos”, denunció.
Igualmente, lamentó que se hayan perdido las tres curules indígenas a la Asamblea, que al igual que el Ministerio de Pueblos Indígenas representan una reivindicación de la Revolución Bolivariana, y pidió al presidente de la República, Nicolás Maduro, que, como lo hacía Chávez, rinda honor a los compromisos asumidos con los pueblos originarios.